28 enero 2020 –
Foto: Pixabay –
Tomado de: RSF.
La Fiscalía Federal de Brasil ha acusado formalmente al periodista de investigación estadounidense Glenn Greenwald de haber «ayudado, alentado y guiado» a un grupo de piratas informáticos que supuestamente le proporcionaron información comprometedora sobre el poder brasileño. RSF denuncia que se trata de acusaciones injustificadas.
El 21 de enero, la Fiscalía acusó a siete personas como parte de la investigación sobre el pirateo de teléfonos móviles de altos funcionarios brasileños en 2019. Entre los acusados figura el periodista estadounidense Glenn Greenwald, residente en Brasil y cofundador del diario digital The Intercept Brasil.
El fiscal federal Wellington Oliveira considera que el periodista «ayudó, alentó y guió» a un grupo de seis hackers informáticos para que borrasen los mensajes que le habían transmitido, a fin de que no se le pudiera vincular con la obtención ilegal de datos. Esta acusación se basa en una conversación entre el periodista y uno de los piratas informáticos, cuyo contenido fue encontrado en un ordenador incautado por la policía.
Esta misma conversación había llevado previamente a la policía federal a concluir, en un informe publicado en diciembre de 2019, que el periodista había adoptado «una postura cautelosa y distante en relación con la comisión del pirateo». A principios de agosto, una decisión de la Corte Suprema de Brasil también reafirmó el derecho constitucional a la protección de las fuentes.
«Las acusaciones presentadas contra el periodista Glenn Greenwald son absurdas, injustificadas y van en contra de las opiniones ya formuladas», denuncia la oficina de RSF en América Latina. “El fiscal federal se basa en una conversación en la que el periodista simplemente se preocupaba por preservar el anonimato de sus fuentes, como haría cualquier profesional de las noticias. Es claramente una represalia contra el trabajo del equipo de The Intercept Brasil que reveló fallas en el poder judicial y político en Brasil».
Desde junio de 2019, The Intercept Brasil ha venido publicando una serie de informaciones en las que revela serias irregularidades en la investigación por anticorrupción en el caso «Lava Jato». Los artículos exponen intercambios privados entre varios fiscales y miembros del poder judicial obtenidos a través de una fuente anónima citada por Glenn Greenwald. Los mensajes desvelan con claridad la connivencia entre el ex juez y actual Ministro de Justicia, Sérgio Moro, el fiscal principal a cargo del caso «Lava Jato», y todos los equipos a cargo de las investigaciones.
Estas publicaciones provocaron ataques contra Glenn Greenwald, su familia y sus compañeros de trabajo, en especial periodistas en The Intercept Brasil. El presidente Jair Bolsonaro dijo el 27 de julio de 2019 que el periodista podría «ser encarcelado».