El Fiscal Nestor H. Martínez reconoció que se habían interceptado comunicaciones durante la administración de los fiscales Jorge Perdomo (E) y Eduardo Montealegre.
El pasado 17 de agosto el periodista y director del portal El Expediente, Gustavo Rugeles, denunció en su cuenta de Twitter que había sido informado de una interceptación de sus comunicaciones por parte de funcionarios de la Fiscalía General de la Nación.
https://twitter.com/GustavoRugeles/status/898308370309971968
El periodista contrastó la información y procedió a preguntarle públicamente al Fiscal General, Néstor Humberto Martínez, si habían regresado las chuzadas y si de ser así, le informara quien había ordenado la interceptación de su teléfono personal.
El Fiscal Martínez atendió de forma oportuna y eficaz el llamado del periodista. Rugeles le informó que se había enterado que el Fiscal Daniel Hernández -cercano a la administración Montealegre Perdomo- habían escuchado sus conversaciones interfiriendo su ejercicio periodístico y que procederia, a través de su apoderado Abelardo De la Espriella a formular la denuncia ante organismos internacionales y ante las autoridades competentes.
De regreso de la reunión de fiscales en Mexico, Martínez Neira se comunicó con el periodista Rugeles y le confirmó que en efecto se habían dado las interceptaciones el 18 de junio de 2016 y calificó la situación como “sumamente grave y sin ninguna justificación”.
El fiscal convocó a Rugeles y a su abogado al bunker de la Fiscalía para informarle sobre detalles de los sucedido:
Durante la administración de Jorge Perdomo y Eduardo Montealegre en la Fiscalía, hizo carrera un modus operandi para adelantar investigaciones selectivas mediante la figura de asignaciones especiales con las que el Fiscal o el Vice Fiscal le asignaban procesos a sus funcionarios de mayor confianza.
Fue como a principios de 2016 llegó a las manos del Fiscal Daniel Hernadez una investigación por un supuesto intento de extorsión cometido por dos particulares cuyos nombres forman parte de la reserva procesal. El fiscal, de toda la confianza de las dos cabezas de la Fiscalía, habría encontrado allí un pretexto para ordenar una interceptación de las comunicaciones del entonces editor político de Las2Orillas. Rugeles mantenía conversaciones con una de las personas investigadas quien le suministraba información en calidad de fuente para distintas investigaciones periodísticas, y con ese argumento, el fiscal Hernández ordenó la chuzada el 18 de junio de 2016.
Para esa época Rugeles formaba parte del equipo de investigación que desde Las2Orillas adelantaba una investigación sobre el rol de la dirección nacional de inteligencia y la Fiscalía en la posible infiltración de la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga en 2014.
El trabajo de campo de esa investigación en la que participó Rugeles y otros miembros del portal Las2Orillas inició en el mes de mayo de 2016 y terminó el 11 de agosto del mismo año con la publicación del articulo: ”Infiltración en la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga? Revelaciones de un testigo”, el cual dejó en evidencia irregularidades en el proceder de la Fiscalía en una de las más sonadas decisiones de la era Montealegre – Perdomo: el caso del Hacker Andrés Sepúlveda.
El Fiscal que tuvo a cargo el caso del hacker Sepúlveda fue el mismo que ordenó la interceptación telefónica de Rugeles: Daniel Hernández, quien actualmente permanece en la Fiscalía a cargo de algunos procesos importantes relacionados con el escándalo de Odebrecht.
Llama la atención que la orden de interceptación contra Gustavo Rugeles, que se hizo desde la Sala Esperanza de la Fiscalía, hubiera sido ordenada mientras se llevaba a cabo la investigación dos meses antes de la publicación de la investigación sobre la infiltración de la campaña presidencial y se hubiera ordenado su cierre unos días después de la publicación de la nota el 11 de agosto de 2016.
Según la carpeta en poder de la Fiscalía se determinó que Rugeles no tenía nada que ver y no está siendo investigado por los hechos que forman parte de ese proceso que se usó como pretexto para escuchar sus conversaciones.
No era un caso aislado ni una simple coincidencia. Sobre el fiscal Daniel Hernandez recaía la responsabilidad de sostener la legitimidad de las actuaciones de la Fiscalía General en el caso del hacker Sepúlveda y la investigación de Las2Orillas fue un duro golpe que puso a temblar a la Fiscalía que acudió a una vieja tactica: escuchar a los periodistas para estar al tanto de sus fuentes, sus pasos y sus investigaciones. Complicado precedente de cara a la libertad de prensa.Todo indica que no es el único caso y el Fiscal Martínez está dispuesto a informar cuantos periodistas más fueron escuchados por ordenes de Montealegre y Perdomo.
Tomado: Las2Orillas