Foto: Stock
Dos periodistas antioqueños se encuentran amenazados y aseguran que no cuentan con medidas de protección. Sergio Monsalve y Giovanis Llanes Ramírez manifiestan que son víctimas de hostigamientos y amenazas de muerte. Los dos han presentado las respectivas denuncias a las autoridades pero no han sido atendidas.
Debido a las intimidaciones, Monsalve ha estado encerrado en su casa en el municipio de Chigorodó desde hace seis meses, el mismo tiempo que se demoró el estudio de riesgo de la Unidad Nacional de Protección (UNP). La semana pasada la UNP le respondió para anunciarle que le entregarían un chaleco antibalas y un celular como medidas de protección. “Yo con un celular no me puedo defender, y la UNP es tan desordenada que se olvidaron que yo ya tenía un chaleco desde mitad de año”, aseguró Monsalve, que ya ha sufrido tres atentados en su contra, de los cuales ha salido ileso.
El periodista ha realizado denuncias de la corrupción administrativa en Chigorodó, del microtráfico en los centros educativos, y de abusos sexuales a menores de edad. Estos temas serían los causantes de las constantes amenazas de muerte.
A Llanes, el sábado 17 de diciembre, dos hombres le dispararon desde una moto mientras se encontraba con su esposa en un restaurante en Cali. Él viene denunciando desde 2014 la corrupción administrativa alrededor del diferendo limitrofe entre Antioquia y Chocó, en Belén de Bajirá. Dede este municipio, por amenazas de muerte, tuvo que desplazarse a Bogotá, donde también sufrió dos atentados. Por último se trasladó a Cali, y ahora, con el último ataque, dice que tendrá que esconderse en otra ciudad.
El caso de Monsalve, a pesar de no contar con esquema de seguridad, aparece registrado en las bases de datos de la Fundación Para la Libertad de Prensa (FNPI), mientras que Llanes manifiesta que no tiene protección porque no han atendido sus demandas.
Tomado de: Elcolombinao.com