POR ÓSCAR ANDRÉS SÁNCHEZ Á. | PUBLICADO HACE 12 HORAS
La vista del Papa a cualquier país levanta el orgullo católico y motiva a los decepcionados, porque el jerarca lidera una revolución del evangelio e invita a los creyentes y al clero “a convertirse en hospital de campaña y en la iglesia de los pobres”.
Este es, en esencia, según el vaticanista José Manuel Vidal, el mensaje que traerá Francisco en su visita a Colombia, que será del 6 al 10 de septiembre. Pero sus palabras también generarán impacto en los diferentes líderes políticos y sociales, que buscarán su interlocución. El Sumo Pontífice llegará en pleno debate electoral y con la implementación del Acuerdo en marcha.
Francisco Barbosa, docente de la Universidad Externado, cree que no va a ser “una ficha política para validar o no validar cosas”, y que llegará con críticas al sistema social, político y económico. De lo que sí está seguro es que habrá un espaldarazo a la paz y al proceso de reconciliación del país.
Según Vidal, no es gratuito que el lema de la visita papal al país sea “Demos el primer paso”, que muy seguramente lo propuso la Conferencia Episcopal Colombiana, con la venia del Vaticano.
“Francisco dice que hay que iniciar procesos, que no empiezan y terminan, sino que continúan. El primer paso en Colombia ha sido posible, ya se puso en movimiento, y apuesta por la esperanza de que se consolide a fondo, a pesar de las dificultades que pueda entrañar el proceso de paz”.
¿Pero que tanto puede influenciar su discurso? Freddy Santamaría, director del Grupo de Investigación en Estudios Políticos de Bolivariana, afirma que el Papa es un líder religioso, pero también político, pues ostenta un poder que atañe a los hombres. “Cumple, como diría el teórico John Searle, una función de carácter institucional, lo que significa que aglutina y que sus palabras causan efecto en quien las sigue”.
Para Rodolfo Arango, docente de Los Andes, para un pueblo tan religioso como el colombiano, la visita del Papa es un gran espaldarazo para fortalecer la paz.