Washington (7 de marzo de 2019).- «Las fake news son en parte provocadas por la polarización, las redes sociales y periodistas y medios que hacen un trabajo deficiente», consideró el periodista mexicano Roberto Rock, directivo de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) durante su intervención en la conferencia «Medios y Democracia en las Américas II», realizada en esta ciudad.
Tomado de:Portal web La SIP.
Rock, director del portal La Silla Rota de Ciudad de México, enfatizó el problema del impacto de las noticias falsas en las redes sociales, ya que «la gente tiende a creer lo que es viral». Recomendó también consultar la Declaración de Salta sobre Principios de Libertad de Expresión en la Era Digital de la SIP (enlace), cuyo décimo artículo expresa que «la desinformación no se debe combatir con mecanismos de censura ni sanciones penales, sino con la adopción de políticas de alfabetización noticiosa y digital».
Otro de los participantes, el periodista Paul Farhi, de The Washington Post, achacó el deterioro de los medios «no a la falta de credulidad, pero sí a la presión económica que disminuye la habilidad de reportar». Farhi, reportero especialista en medios, dijo que «a esto se agrega la estigmatización del presidente Donald Trump contra los medios y las redes sociales, donde todos pueden ser periodistas». Dijo que esta situación «ha creado una combinación de que no hay credibilidad sobre las noticias, sino que la gente cree la propia opinión que tiene».
Por su parte, Michael Camilleri, abogado y director del Programa Peter D. Bell sobre Estado de Derecho de la organización Diálogo Interamericano (IAD), habló «de la masiva exposición a las noticias falsas o desinformación maliciosas… donde nace el problema». Dio como ejemplo las elecciones presidenciales de octubre 2016 en Estados Unidos de las que dijo, «todavía estamos analizando el impacto de lo que ocurrió».
Desiré Yepez, periodista del sitio de verificación de datos Ecuador Chequea, destacó «la importancia del fact checking, no como género, sino como un periodismo más profundo y de volver a las fuentes para comprobar y verificar la información». Agregó que «los medios tradicionales a veces se adueñan de fake news porque encuentran algunos hechos extraordinarios». Sin embargo, advirtió que «esa es justamente la alarma que tiene en cuenta el fact checking: si algo es extraordinario, se debe checar».
Con referencia al ejercicio periodístico, el reportero del The Washington Postconsideró que «se debe distinguir mejor entre lo que es opinión y la información. Eso ayudará a recobrar mejor la confianza del público».
Rock subrayó la responsabilidad de los medios para prevenir la diseminación de desinformación y «recobrar la confianza del público».
En tanto, Camilleri sugirió iniciar una conversación interdisciplinaria para ver qué se puede hacer frente a las noticias falsas. «Antes, no se tuvo en cuenta el rol de las plataformas digitales, pero ahora se sabe que tienen gran responsabilidad en la difusión», concluyó.
La conferencia «Medios y Democracia en las Américas II» reunió en la sede del IAD a periodistas, representantes de medios y de organizaciones de prensa, entre otros expertos del hemisferio occidental.
Rock formó parte de una delegación de la SIP que visitó Washington del 6 al 8 de marzo para exponer en distintos foros y en reuniones bilaterales la grave situación por la que atraviesan las libertades de expresión y de prensa en Nicaragua.
La SIP es una entidad sin fines de lucro dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión en las Américas. Está compuesta por más de 1.300 publicaciones del hemisferio occidental; y tiene sede en Miami, Florida, Estados Unidos.