8 Agosto 2019.
Por Juan Carlos Oberndorfer / Lalinternaazul.com En estos días nos están bombardeando con imágenes sobre el plástico y en nombre de la preservación, se está atacando sin misericordia el mismo, dejando de lado la verdadera causa problema: El plástico llega al mar, principalmente a través de los ríos en combinación con una gran cantidad de otras basuras, siendo estas otras las que verdaderamente contaminan las aguas, matando las especies acuáticas o impidiendo que se reproduzcan. Un solo rio contaminado por material orgánico causa un daño al medio ambiente, que excede y por mucho, el daño causado por el plástico. ¿Cuántos animales y plantas vivirían en ríos como el Bogotá o el Medellín, y sus quebradas aledañas si estos no estuvieran contaminados por los elementos orgánicos y no orgánicos muchos, por cierto, biodegradables, de las basuras y las aguas negras? ¿Cuántos animales y plantas matan y afecta esta contaminación aguas abajo, en los ríos, lagunas y en el mismo mar donde finalmente van a parar sus aguas? Este daño, aunque es muy conocido, es bien poco lo que se hace para evitarlo porque estas basuras actúan de manera silenciosa e imperceptible. La pregunta es: ¿qué hacer con las basuras? Lo primero es que desde la fuente se deben recolectar lo más separadas posibles, para después facilitar el reciclaje de los elementos reciclables, como plástico, vidrio, papel, metales, residuos orgánicos y otros. En todos los procesos de reciclaje hay una máxima, mientras más homogénea sea una materia prima que va a ser reciclada, mayor será el valor obtenido por la misma al reciclarla y menor el costo de reciclaje. Lo segundo es reciclarlas. Para fomentar el reciclaje es necesario estrictas leyes que premien la separación y castiguen la mala disposición de las basuras. Tengo entendido que en Medellín apenas se recicla el 17% de las basuras, aunque sospecho que el porcentaje es mucho menor. Sobre el tema de reciclaje del plástico, el vidrio o el papel, es mucho lo que se sabe y se ha avanzado, sin embargo, en el tema de los residuos orgánicos es bien poco lo que se ha avanzado a pesar de que son, y por mucho, los residuos más tóxicos y dañinos para el medio ambiente. Las basuras orgánicas, al biodegradarse afectan todo el ecosistema y dependiendo de la concentración acaban con toda la vida. Una de las causas por lo que este pasa desapercibido es por la errónea idea de que por ser orgánicas y/o biodegradables, no son tóxicas y porque las mismas se disuelven en el agua entonces no causan un impacto visual que llame la atención. Entonces ¿Qué hacer con las basuras orgánicas? Sobre este tema, hay muchas alternativas, las más conocidas, son el biocompostaje y la incineración, hay otras menos conocidas, como convertirlas en compuestos que sirvan de relleno en la fabricación de productos plástico y eventualmente para otras materias primas y otras alternativas como biocombustibles, etc. La primera es el biocompostaje con bacterias y otros animales que conviertan el carbono en metano dejando los demás compuestos de los mismos, en formas asimilables para las plantas. Esto sin embargo tiene tres problemas, el primero que este sistema pudiera servir como medio de cultivo, para infecciones potencialmente mortales para el ser humano, es por eso que este sistema puede tener limitaciones importantes, la segunda que la tasa de producción de metano, de los sistemas actuales es muy baja y la tercera es que se producen residuos líquidos conocidos como lixiviados que son muy tóxicos. Por lo tanto, esta alternativa requiere mucha más investigación, para reducir los riesgos biológicos, incrementar sustancialmente la producción de metano de tal manera que sea rentable aprovecharlo y reducir a casi 0 la producción de lixiviados. El gas natural está compuesto en más de un 90% por gas metano. La segunda alternativa para las basuras orgánicas y otros residuos es la incineración para producir energía. Aquí, hay dos métodos: 1- La incineración directa, que usualmente tiene una eficiencia más baja 2) La gasificación de los mismos que pareciera tener una eficiencia mayor.
¿Cuál tecnología de incineración escoger? La respuesta depende de las tecnologías que haya disponible en el momento, de los costos, de la composición de las basuras y del grado de separación que tengan. Las alternativas de producción de energía son muy interesantes, porque, no representan riesgos para la salud pública y, además, debidamente implementadas, como se verá a continuación, puede convertir procesos con huella de carbón positiva en procesos con huella de carbón negativa o sea ayudar a fijar carbón. Los residuos de la incineración son básicamente cenizas y C02, el principal gas de efecto invernadero y por mucho. Lo bonito de este sistema es que ese C02, se puede recolectar y ser usado de muchas maneras, las principales: · Para cultivos hidropónicos en invernaderos cerrados. Se sabe que una mayor concentración de C02, con la adecuada cantidad de luz incrementa de manera importante el crecimiento de las plantas. Hay que recordar que el principal alimento de las plantas es el C02 que toman del aire. · La gran ventaja de los cultivos hidropónicos en invernadero es que tienen una productividad muy alta, en comparación con los cultivos en tierra. · La segunda opción es para producción de algas que sirvan de combustible y de paso ayuden en el proceso de generación de energía. Esto tiene un pequeño problema y es que en el tiempo habría un exceso de algas para incinerar., · Esto lleva a la tercera posibilidad, utilizar las algas para la fabricación de verdaderos bioplásticos ecológicos, o sea aquellos reciclables, no biodegradables o para producir biocombustibles. Aquí el campo de investigación es muy grande, porque con las algas las posibilidades son muchas más. Actualmente estas alternativas no se han popularizado porque son mucho más costosas que simplemente botar las basuras, dejándolas que contamines de manera grave el ambiente. Una ventaja importante de los sistemas de incineración, es que pueden ser una gran fuente de producción ECOLOGÍA de energía. Hay que recordar que, a la fecha, la forma más ecológica de producción de energía a gran escala es la hidráulica, las demás tienen limitaciones importantes. La utilización del C02, para cultivos hidropónicos en ambiente cerrado, puede contribuir, de manera importante a reducir la presión sobre la tala de bosques para abastecer la creciente demanda de alimentos. Hay que tener en cuenta que ya varios grupos de científicos están pidiendo que se haga una gran campaña de reforestación a nivel mundial, porque dicen que esto es esencial en la preservación del medio ambiente y tiene efectos muy rápidos. Un próximo artículo sobre soluciones a las emergencias ambientales de Medellín tratará sobre estos temas. Una tercera posibilidad para las basuras orgánicas es homogenizarlas y convertirlas en compuestos que sirvan como relleno para los plásticos y otros materiales. Las posibilidades continúan. En conclusión, hay que reciclar las basuras y para avanzar en el tema, es necesario, establecer estrictas leyes que premien el reciclaje y castiguen la mala disposición de las mismas. |