Raúl Gutiérrez trabajó en “Noticolor” y “24 Horas”. / David Schwarz
Por: El Espectador
Raúl Gutiérrez, periodista y socio del Círculo de Periodistas de Bogotá, que tiene bastante experiencia y sabe bien cómo es el oficio del periodismo puro, fue entrevistado por EL ESPECTADOR:
»Antonio Guzmán, el director de Radio Santa Fe. Lo conocí en una emisora pequeña que se llamaba Radio Continente. Me enseñó a escribir y me dio varias oportunidades en reportería.»
¿Quién fue su mentor en el periodismo?
Antonio Guzmán, el director de Radio Santa Fe. Lo conocí en una emisora pequeña que se llamaba Radio Continente. Me enseñó a escribir y me dio varias oportunidades en reportería.
Una chiva inolvidable.
La candidatura presidencial de Luis Carlos Galán. Había una disputa entre el turbayismo y el Nuevo Liberalismo, que él lideraba. No había poder que pudiera reconciliarlos, pero llegaron a un acuerdo y Galán fue el candidato.
La noticia que más le dolió dar.
El crimen de Álvaro Gómez Hurtado. Un día antes de su asesinato, él llegó al consejo de redacción del noticiero 24 Horas y hablamos sobre el programa del 28 de diciembre, que recogía momentos graciosos.
Lo mejor de ser periodista.
Vivir informado y saber cómo reacciona la gente ante los acontecimientos. Uno aprende a advertir qué es lo que está sintiendo el receptor. Lo ideal es que se asimilen las cosas y que, a pesar de los factores emotivos, no haya dudas sobre lo que uno transmite.
Una metida de pata.
No soy redactor económico y era la época de la campaña de Virgilio Barco Vargas. Él había hablado de ponerle valor agregado a la agricultura y lo que terminé diciendo era que se iba a poner un impuesto al valor agregado (IVA). Ese error me enseñó que uno tiene estar enterado de todo, pero, cuando hay temas que no se manejan, uno se prepara o se margina.
¿Qué le sobra al periodismo de hoy?
Cantidad. Privilegia el volumen de noticias sin medir consecuencias. Para mí es fundamental la calidad.
¿Qué le falta?
Investigar, persistir y, como decía Alfonso Palacio Herrera, no tragar entero. Todo se debe poner en duda para meter la nariz donde haga falta para conseguir información.