José Ignacio Bel y José Ramón Pin, autores de «Cuando las ostras necesitan orejas», afirman durante su presentación que no existe división entre la comunicación interna y externa
“Existe una única comunicación corporativa que adopta diferentes canales y formatos en función de sus mensajes y destinatarios, pero partiendo siempre de una actitud de escucha hacia dentro y fuera de la organización”, han afirmado José Ramón Pin y José Ignacio Bel en la presentación de su último libro, Cuando las ostras necesitan orejas, que forma parte de los actos organizados en los 100 días previos a la apertura del nuevo campus de la Universidad de Navarra en Madrid, prevista para el 4 de octubre.
Para los autores, la comunicación corporativa es “un derecho del ciudadano”. En opinión de José Ignacio Bel, jurista y doctor en Comunicación, la comunicación realizada por empresas y organizaciones “se inserta en el derecho a la información de los ciudadanos, lo que hace que la transparencia sea no solo deseable sino necesaria en todas las secciones de la organización”.
La figura del director de comunicación ha centrado buena parte de la intervención de los autores. Para Pin, el dircom “debe ser capaz de influir en la opinión manifestada en redes sociales, pues esta se convertirá en opinión publicada en medios y finalmente, en opinión pública”. Asimismo, el director de comunicación, que es según Pin y Bel cada vez más relevante en los consejos de administración, ha de velar para que la estrategia comunicativa forme parte de la estrategia corporativa. En palabras del profesor Pin, “un dircom debe saber prever crisis, ha de conocer a la perfección las estrategias de la competencia y saber evaluar riesgos reputacionales para poder reportar al CEO de la compañía de tú a tú”.
Nota tomada de Universidad de Navarra.