Filosofía del CPB
Los fundadores del CPB establecieron el deber de, “Mantener como canon fundamental la libre expresión del pensamiento y defender por todos los medios las normas constitucionales y legales que garantizan la libertad de prensa, como razón de ser y principio esencial de nuestras instituciones democráticas; fomentar la unión y el apoyo mutuo entre sus socios y estrechar los vínculos de con vivencia y solidaridad profesional entre los periodistas.
Luchar por el mejoramiento económico, cultural y social de sus afiliados; velar por la estricta observancia de la ética profesional; procurar el acercamiento de patrones y trabajadores sobre bases de justicia, de respeto mutuo y subordinación a la ley” Quienes integramos el CPB hoy tenemos claro que lo anterior conlleva a nuestro compromiso de honor de transmitirle la verdad a la opinión pública y a respetar la vida privada de sus integrantes.
Nos debemos a la sociedad y estamos comprometidos con la defensa de su derecho a estar bien informada, y con sus libertades, especialmente las de la prensa, de información, de expresión y de acción. Aún a pesar de los riesgos que amenazan el ejercicio de nuestra profesión, y entendiendo con claridad que “la libertad de expresión es un derecho de la sociedad, y no un regalo de los gobernantes”, juramos ejercer un periodismo independiente, libre y responsable, regulado por nuestro código de ética profesional.
Nuestros grandes compromisos son la defensa de la democracia, los derechos humanos, la paz, la justicia, el desarrollo social, la unión, la solidaridad y el bienestar de nuestros socios, y de todos los profesionales de la información. Uno de peores enemigos de nuestra profesión, es el silencio, y nuestra más sagrada responsabilidad la verdad; la cual llevamos en nuestra voz y en nuestras manos, a través de los micrófonos, los computadores, el Internet, las cámaras de fotografía y de televisión. Nuestra finalidad última es nuestra propia libertad, ejercida para servir bien a la opinión pública y a Colombia.