Crculo de Periodistas de Bogot
Gacetas de Colombia exalto la vida y obra del periodista Raúl Gutiérrez

En la novena edición de los Galardones Gacetas de Colombia, se exaltó la vida y obra del Ex Secretario General del Círculo de Periodistas de Bogotá, Raúl Gutiérrez.

A los ganadores de estos premios se les entrega una estatuilla en forma de bailarina, la cual simboliza disciplina, coordinación, ritmo, equilibrio, movimientos, estabilidad, pulcritud y sincronización.

Gutiérrez tiene una larga carrera en el ámbito periodístico. Fue redactor político en el Noticiero 24 Horas y Caracol, corresponsal de Televisa México, Editor de Noticolor T.V., codirector de El Congreso en Marcha T.V. y director de Radio Periódico Democracia y el Noticiero Nuevo Continente. En 1984 fue galardonado con el Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar” al mejor trabajo radial.

El acto de premiación se realizó el miércoles 15 de noviembre, en el teatro Patria en Bogotá, donde el socio del CPB Raúl Gutiérrez, recibió el reconocimiento por su trabajo periodístico.

Listos los diseños de Transmilenio por Av. 68 y Ciudad de Cali

Imagen tomada del IDU

Según el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) las troncales de Transmilenio que circularían por la avenida Ciudad de Cali y la 68 tendrían juntas una extensión aproximada de 45 kilómetros divididas en 52 estaciones.

El proyecto que tiene los diseños listos desde septiembre, espera poder ser licitado en el 2019 y se especula con su construcción final a mediados del 2022.  “Estamos hablando de que en julio y agosto (de 2019) arrancamos la construcción de las dos avenidas«, afirmó Yaneth Mantilla, directora del IDU.

La troncal de la avenida Ciudad de Cali sería la más grande, con una longitud de 28 kilómetros, la cual trazaría un camino desde Soacha, hasta la calle 170 en el norte de la ciudad.  Mientras que en la 68 tendría una longitud cercana a los 17 kilómetros, partiendo desde la autopista sur, para finalizar en la carrera séptima con calle 100.

De acuerdo con el IDU la ejecución de esta obra, permitirá renovar de manera simultánea 781.080 metros cuadrados de espacio público y facilitará las conexiones peatonales con la Alameda El Porvenir y los humedales Tibanica y Juan Amarillo, además de acortar los viajes por la avenida 68 en un 50%.

Los estudios y diseños de estas dos nuevas líneas del Transmilenio costarán $19.622 millones y están a cargo del Consorcio Troncales Bogotá.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB

 

Señales de la Niña asoman en el Pacífico

El enfriamiento de las aguas del Pacífico muestran una probabilidad entre el 65 y el 75% de consolidación del fenómeno de la Niña, según la agencia ambiental norteamericana NOAA. Aunque no es determinante el pronóstico, IDEAM anuncia monitoreo permanente y Minambiente formula recomendaciones preventivas.

BOGOTÁ D.C.- Durante las últimas semanas las aguas del Océano Pacífico Tropical, continúan mostrando una condición de “enfriamiento” en el centro y oriente de la cuenca, situación que se evidencia desde comienzos de septiembre del presente año.

El análisis del promedio de las anomalías de la temperatura superficial del mar en el último mes, muestran valores cercanos a -1.0°C desde el centro hacia el oriente del Pacífico tropical.

Adicional a ello, las aguas subsuperficiales (entre 0 y 150 metros), se han mantenido también “frías”, lo que apoya y hace prever que persista la condición de anomalías negativas.

Históricamente se ha asociado la posible ocurrencia de un evento Niña, a la persistencia de anomalías negativas de la temperatura superficial del mar. Sin embargo, dentro de la comunidad científica internacional, es claro que para el desarrollo de dicho evento, debe haber un acoplamiento entre el océano y la atmósfera.

En el contexto referido y más asociado a la persistencia del “enfriamiento”, hoy la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, agencia científica del Departamento de Comercio de los Estados Unidos, ha emitido un “Aviso” de posible ocurrencia de un fenómeno La Niña, con una probabilidad entre el 65 y el 75%, la cual se proyecta de momento de intensidad débil.

No obstante dicha proyección, es importante recalcar el acoplamiento océano-atmósfera, como un elemento definitivo para la consolidación efectiva del evento.

En el caso particular de Colombia, es importante mencionar que las precipitaciones que se presentaron en el país durante los últimos meses (septiembre y octubre) han sido en general ligeramente deficitarias, pues solo hasta el final de octubre de 2017 se han reactivado las lluias normales para la época, ya que estacionalmente atravesamos por la segunda temporada de lluvias en gran parte del país.

La tendencia, según el IDEAM, «nos invitan a realizar un constante seguimiento sobre la posible consolidación del evento; de igual forma, debe considerarse fenómenos de tiempo-clima de menor escala en el tiempo, los cuales en un momento dado apoyan o inhiben un poco, el efecto climático de una Niña para nuestro país».

La entidad gubernamental anunció que seguirá monitoreando los indicadores océano-atmosféricas en el Pacífico tropical, advirtiendo oportunamente lo que pueda esperarse en términos de la alteración de la lluvia para los próximos meses, tanto a las entidades del Sistema Nacional Ambiental, como a las del Sistema Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, así como a los diferentes sectores productivos del país, a fin de que se adelanten todas las actividades necesarias en términos de prevención.

Recomendaciones del Minambiente

Por su parte, el Ministerio de Ambiente hizo un llamado a las autoridades ambientales, a los entes territoriales, a las Corporaciones Autónomas Regionales, gobernadores, alcaldes y a la comunidad, para activar los planes de contingencia que permitan responder a la temporada de lluvias. “De enero a la fecha se han presentado 2.336 eventos relacionados con deslizamientos, con avalanchas. Acabamos de tener el evento en Corinto y nos solidarizamos con la población, pero insistimos en el que se tomen las medidas pertinentes”, dijo Murillo Urrutia y recordó la importancia de revisar permanentemente los informes del Ideam.

A través del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (ideam) se han venido presentando al país los informes y alertas para que se puedan tomar medidas. “Esta información es especialmente importante para activar los consejos de gestión del riesgo municipales y departamentales porque esta temporada de lluvias va a continuar hasta la primera o segunda semana de diciembre, de acuerdo con el Ideam”, explicó el Ministro de Ambiente.

Dentro de las recomendaciones paras Entes Territoriales y Consejos Territoriales figuran acciones como poner en marcha acciones de preparación, prevención y respuesta de manera inmediata, así como activar los planes de contingencia frente a la temporada de lluvias a nivel departamental y territorial.

Además, se recomienda designar puntos focales para reporte de afectaciones y mecanismos de coordinación con sectores, CAR y UNGRD; establecer en conjunto con la autoridad ambiental sistemas sencillos de alerta temprana en los cuales pueda tener participación la comunidad frente a activación de inundaciones, avalanchas o movimientos en masa. De igual manera se invita a desarrollar acciones como: jornadas de limpieza en los puntos considerados críticos; promoción de acciones de sensibilización y preparación frente a riesgos con las comunidades para su posible actuación en caso de activarse un evento; diseñar un plan de comunicación pública y mecanismos para difusión comunitaria y territorial; realizar los mantenimientos de las vías principales y caminos veredales en cuanto a desagües y canalización de aguas.

Tomada: REVISTA ECOGUIA 

Esta opinión es responsabilidad única del autor, y no compromete al Círculo de Periodistas de Bogotá.
Se invertirán 118.000 millones de pesos en arreglar puentes peatonales en Bogotá

Foto tomada de Publumetro

El Programa para la Conservación de Puentes creado por el Instituto de Desarrollo Urbano, IDU, tiene como objetivo arreglar 168 puentes peatonales en la ciudad, ya que, la gran mayoría sufren de láminas levantadas, huecos y rayones en la estructura.  

El proyecto tendrá un costo aproximado de 118.000 millones de pesos y según el IDU, el Programa de Conservación de Puentes, debe atravesar por dos procesos de licitación uno para la conservación, mantenimiento y rehabilitación de los puentes y otro para la actualización de diseño de cinco puentes en la ciudad. Por el momento ninguno de los procesos de contratación tiene un contratista encargado y la fecha límite para asignarle uno, es el 15 de diciembre.

El IDU alega que, los puentes peatonales deben soportar el peso de entre 7 y 12 millones de personas al año, durante las horas pico.  Por tal motivo, se propone invertir 85 millones de pesos en el manejo del tráfico.  

“La intervención, conocida como Programa para la Conservación de Puentes, tardará unos 10 meses, a partir de la segunda quincena de diciembre del 2017, y se realizará en otros 147 puentes de Bogotá, en avenidas como la 26 y Américas”, explicó el IDU. 

Redacción Pedro Beltrán Harker, pasante CPB

El presupuesto de la Alcaldía de Bogotá para el 2018 será de 20,8 billones de pesos
Imagen tomada de revista Dinero

La Secretaria de Hacienda Distrital reveló que el presupuesto con el que contará la capital colombiana para el 2018, será de 20,8 billones de pesos, lo que significa un incremento de 14,2% especto al año anterior.

De acuerdo con el plan de desarrollo presentado ante el Concejo de Bogotá, el 85% de los recursos obtenidos serán utilizados en inversión estatal. Según la información preliminar entregada por parte de la Administración de Bogotá, los sectores que tendrán las mayores inversiones serán educación, con 3,9 billones de pesos; Integración Social, con 1,1 billones de pesos y, salud, con 2,5 billones.

“Los sectores que tendrán mayores inversiones en 2018, dada la magnitud de los proyectos contemplados en el Plan Distrital de Desarrollo de la nueva Bogotá, son principalmente los de carácter social como educación, salud e integración social, seguidos por movilidad”, destacó la Secretaria de Hacienda, Beatriz Arbeláez.

Por otra parte, se informó que en el sector de movilidad se invertirán cerca de 6.2 billones de pesos, tanto en troncales de Transmilenio, como en la primera línea del metro.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB

La lucha contra el cáncer de mama

El pasado lunes 30 de octubre, la Subred, Centro de la Secretaria de Salud y la Fundación Ámese, en una labor humanitaria ofrecieron orientación de profesionales, serenata y además una donación de pelucas en el que 20 mujeres con cáncer acogieron confianza y fortaleza para sus vidas, que muchas veces pierden por el efecto de los tratamientos, además de retomar sus actividades sociales con mayor seguridad.

El proyecto que desarrollan estas dos entidades, consta de la estimulación para las mujeres que padecen de cáncer de mama y que ofrecen grupos de apoyo orientados a mantener a las pacientes en  una actitud proactiva hacia su enfermedad y disposición de su tratamiento, los cuales cuentan con acompañamiento psicológico y social. Los grupos de apoyo se realizan  en Bogotá  en la Clínica  del Country, Hospital San Blass, Instituto Nacional de Cancerología y el Albergue de mujeres del INC.

Con motivo de estas celebraciones del mes de cáncer de mama, las organizaciones y fundaciones que trabajan constantemente en la lucha de prevención de esta enfermedad, se vistieron de rosa esta semana.

Un encuentro que se desarrolla por segunda vez, y que sirve para recordar a aquellas mujeres que han perdido la batalla contra una enfermedad de la que anualmente en Colombia se detectan 7.627 nuevos casos, de los cuales 2.226 tienen consecuencias fatales, pero también para celebrar la vida de ese 76.1 por ciento de las afectadas que después de haber sido diagnosticadas, siguen luchando.

Dentro de este contexto en la localidad de San Cristóbal, se destacó el certamen realizado en la Unidad de Servicios de Salud San Blass, en el que  participó un grupo de enfermeras, médicos y especialistas que orientan y trabajan para el cuidado y tratamiento de las pacientes. Una de las especialistas fue Luz Yaneth Diaz, Líder del programa Círculo del Diagnóstico de Cáncer de Mama, quien señaló que el centro está trabajando en la sensibilización y lucha. Además acogen a las mujeres más vulnerables del país para que reciban los tratamientos de forma oportuna como: autoexamen, cita con su especialista y mamografía.

Los miembros de las diferentes organizaciones hicieron una invitación a las mujeres para que acudan a los centros más cercanos donde podrán recibir acompañamiento, diagnóstico y acceso oportuno a sus tratamientos.

El área de comunicaciones del CPB hizo presencia en este encuentro como una manifestación de respaldo e iniciativa al programa de lucha contra el cáncer de mama, vea los testimonios de pacientes y entrevistas en el siguiente link.

Por: Alexandra Pinzón y Pedro Beltran, CPB

Noveno simulacro distrital de evacuación

Desde las 10:00 am del miércoles 25 de octubre, se realizará en Bogotá el 9° simulacro de evacuación Distrital organizado por la Alcaldía mayor y el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IDIGER).

Según el acuerdo 341 de 2008 del Concejo de Bogotá, el cual modifica el artículo 1° del acuerdo 30 del 2001, se pactó que todos los años, desde el 2009, se ejecute en el mes de octubre, el simulacro de evacuación Distrital.  

“ARTÍCULO PRIMERO. – Modificado por el art. 1, Acuerdo Distrital 341 de 2008. El nuevo texto es el siguiente: Se establece el día de la prevención de desastres y emergencias en el Distrito Capital, para el segundo miércoles de octubre de cada año, involucrando en dicho día, de manera simultánea la participación de todas las entidades centralizadas y descentralizadas que dependen del Distrito, quienes con anticipación presentarán los trabajos ejecutados dentro del año y las propuestas para futuras actividades, e invitando a participar a todas las organizaciones comunitarias y privadas de la ciudad, así como las entidades de orden nacional con sede en la ciudad.

Anualmente, durante el mes de octubre, la Administración Distrital realizará en Bogotá un simulacro de actuación en caso de un evento de calamidad pública de gran magnitud con la participación de todos los habitantes de la ciudad.”

La finalidad de esta actividad, es tener a la comunidad prevenida en caso de una catástrofe natural, por tal motivo, este simulacro enseña a los ciudadanos las rutas de evacuación y los puntos de encuentro, ayuda a medir y mejorar los tiempos de desplazamiento, coordina y ordena los diferentes grupos que salen a la vez, además de probar y familiarizar a las personas con el sistema de alarma.

Las compañías, empresas, instituciones y demás entidades que deseen hacer partícipe a su comunidad de este simulacro, simplemente deben registrarse en www.idiger.gov.co.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB.

Charla de la Comisión de Ética del CPB en el UNINPAHU

El pasado viernes 6 de octubre se llevó a cabo en el auditorio Linares de la Fundación Universitaria UNINPAHU, la primera de una serie de charlas que se tienen programadas ofrezca el Círculo de Periodistas de Bogotá en este centro educativo.

El Encuentro estuvo a cargo de la Comisión de Ética, representada por los comisionados Ana María Álzate, Luis López y Jairo Pulgarin, quienes asistieron acompañados por la Presidenta del CPB, Gloria Vallejo. En un diálogo abierto con los estudiantes  de la Facultad de Comunicación, Información y Lenguaje de la UNINPAHU, hablaron sobre la importancia de la ética en el periodismo.

Además de aportarle al crecimiento profesional de los alumnos de Comunicación, el objetivo de este foro, fue el de reactivar un convenio existente entre las dos entidades desde los años 90´s.

 Luis López, miembro del comité de ética, inició su charla con la presentación de la Comisión de Disciplina del CPB, ilustrando que se creó por disposición de los estatutos del gremio. Además de explicarle a los estudiantes cómo son elegidos los miembros, habló sobre la forma en la que ésta procede cuando llega un caso.

“Se reparte entre los miembros por orden alfabético, se presenta la proposición de resolución la cual se estudia y se aprueba. Esos pronunciamientos se dan a conocer a la Junta Directiva del Círculo de Periodistas de Bogotá, luego a los socios y posteriormente, si es necesario, a los medios de comunicación”.

 La presentación de López, tuvo como principal objetivo exponer la ética desde su origen, estructura y funcionamiento, basándose en dos ideas básicas que tiene sobre la ética, ya que, según él, no se trata de un tema teórico, sino una actitud frente a la vida.

“Se es ético o no se es, igual con los periodistas, la ética no se aprende, se vive”, afirmó durante su presentación.

Los estudiantes le consultaron sobre los casos que trataba el Comité de Ética del CPB, preguntándole sobre las repercusiones y trascendencia que tenía para la persona que cometía la falta, a lo que López respondió que la mayor consecuencia es el hecho de que el caso se divulgue socialmente.

Para concluir citó a Javier Darío Restrepo cuando afirma: “El periodista debe ser ante todo buena persona, con todo lo que esto incluye”

Por su parte Ana María Álzate, al responder una pregunta de los asistentes, se refirió al pronunciamiento que hizo el CPB, acerca del trabajo de Vicky Dávila respecto a ‘La Comunidad del Anillo’. En este comunicado, se exaltó la valentía de la periodista y se reconoció la importancia de su trabajo para las investigaciones posteriores sobre dicho caso, aun así, se llegó a la conclusión de que se excedió en sus publicaciones, ya que se divulgaron vídeos íntimos con contenidos bastantes sensibles, que hacen parte de la privacidad de los protagonistas.     

Además, Ana María expreso su preocupación por “las actitudes no muy correctas en el ámbito laboral de los periodistas” y concluyó asegurando que “se debe recuperar el oficio mediante una perspectiva del profesional muy riguroso y un sentido de ética muy elevado”.

Uno de los estudiantes, preguntó sobre la opinión que tenían acerca del enfrentamiento entre el Senador de la república Álvaro Uribe Vélez, con el periodista y columnista de la revista Semana, Daniel Samper Ospina, a lo que la presidenta del Círculo de Periodistas de Bogotá, Gloria Vallejo, le contó que la agremiación hizo un pronunciamiento oficial en aquella ocasión, descalificando las acusaciones del ex mandatario.

Comentó que en el comunicado el CPB descalificó y rechazó de forma contundente los señalamientos hechos por el ex presidente Uribe, cuando tildó al periodista Daniel Samper Ospina de violador de niños. Porque si bien después el senador tuvo que reconocer que había cometido un error y retractarse sobre lo dicho, fue inapropiado y temerario el señalamiento, debido a que, dada la embestidura y reconocimiento del ex mandatario, con cerca de medio país que lo sigue, se ponía en riesgo no solo el honor del periodista sino su integridad física. 

El pronunciamiento del CPB de igual forma hizo un llamado al uso responsable de las redes sociales, que en muchos casos se han desbordo en el uso del lenguaje soez, matoneo y señalamiento sin fundamento, produciendo un ambiente de temor y persecución. “Cuando el país se prepara para entrar en la contienda política, es de suma importancia que la deliberación pública esté basada en las ideas, en el respeto a las posiciones divergentes y no a la polarización y señalamiento, como herramienta para doblegar al que opina diferente”, dijo Vallejo.

Encuentre aquí el comunicado completo.

Adicionalmente, la presidenta le presentó y dejó a los asistentes un catálogo de once puntos, sobre la ética periodística de Javier Darío Restrepo, el cual es una forma de actualizar la conducta moral con la labor contemporánea de los periodistas, ya que es un acercamiento de la ética hacia las herramientas tecnológicas y digitales que el periodismo actual conlleva.

El conversatorio fue bastante productivo y enriquecedor tanto para los estudiantes como para los representantes del CPB. “Fue un encuentro productivo con el UNINPAHU, el cual responde a un convenio que se reactivó con ese centro educativo y que va a contribuir con un fortalecimiento conceptual, tanto de lo que nos puede ofrecer la universidad sobre teoría y nuevos avances educativos, como de parte nuestra, al aportarles desde la experiencia, alternativas y enseñanzas que ayuden a su desarrollo profesional”.

Estuvo presente el decano de la facultad, Miguel Gómez y alrededor de 50 alumnos. “La idea es continuar ofreciendo este tipo de conferencias dentro de los espacios de la universidad”, dijo Viviana Esguerra, profesora catedrática de Comunicación de la UNINPAHU.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB

 

MipCom 2017 tendrá presencia colombiana
Imagen tomada de mediabank.tv

La feria de contenidos digitales más importante del mundo, Marché International des Programmes de Communication (MipCom), contará con la presencia de delegaciones de empresas y compradores nacionales, quienes serán apoyados por el Ministerio Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Tics) y Procolombia.

El evento tendrá lugar del 16 al 19 de octubre en Cannes, Francia, y Colombia será representada por 17 compañías que simbolizan la calidad y el talento nacional en el ámbito empresarial y que buscan fomentar el aumento de oportunidades de negocios en el país.

Específicamente las empresas colombianas serán: Zincotools, Metro Televisión Ltda., Team Toon Studios, Estudios Marañacos, Provideop TV, Imcomsa, Idea TV S.A.S, Salabi S.A.S., Ads móvil, Prime Time Media, Grupo Área Visual y Compañía, La Mar Media Lab, Producciones GNR, La Diana S.A.S, Digitzfilm, Creativo S.A.S. y Televideo S.A.S.  Las cuales trabajan en los sectores de contenidos digitales, servicios de doblaje y subtítulos, servicios de preproducción, producción y postproducción, series y contenidos para niños y para plataformas web y móvil.

El Ministro de las TICS, David Luna, se mostró bastante emocionado por este acontecimiento: “Apoyar a las empresas nacionales en este tipo de eventos permite dar a conocer la calidad de nuestros productos y servicios digitales. La alianza con Procolombia nos brinda la posibilidad de acompañar a los empresarios en todo su proceso de internacionalización e impulsar nuestro ecosistema digital”.

Entre el 2012 y el 2016 se invirtieron cerca de ocho millones dólares en apoyar el trabajo de más de 1.300 compañías que se desenvuelven en los sectores tecnologías de información y contenidos digitales.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB

Siembra de árboles para recuperar cerros de Bogotá

El martes 2 de febrero del 2016, Bogotá perdía alrededor de 157 hectáreas de flora, debido a uno de los incendios más devastadores de la historia capitalina. Bosque nativo, pino y eucalipto son solo algunas de las especies que quedaron prácticamente arrasados del sector ‘La Cascada’ en los cerros orientales.

Desde ese momento el Jardín Botánico inició un proyecto de recuperación forestal que, el jueves 12 de octubre del año en curso, reunió a más de 150 voluntarios, quienes, trabajando de forma conjunta con el ejército y la policía nacional, iniciaron desde las ocho de la mañana una maratónica ‘sembratón’.

Tominejero, guaque, arranyán blanco, pagoda y mano de oso, entre otras, fueron plantadas con el objetivo de devolverle la vida a los cerros capitalinos.

Según Claudia Pinzón, coordinadora de la línea de restauración del Jardín Botánico “Por suerte el incendio, que duró tres días, no afectó el suelo de la montaña, que se ubica en lo que consideramos la falda del cerro El Aguanoso. Por eso hemos podido sembrar”.

La jornada, que promedio la plantación de un árbol por minuto, fue la segunda que el Distrito hizo en el sector; en noviembre del año pasado, cerca de 3.400 plántulas, trasladadas desde el vivero del parque La Florida, fueron sembradas por encima de la vegetación quemada.

Pinzón fue enfática en resaltar el buen trabajo de restauración que se ha llevado desde el momento del incendio hasta la fecha, y aseguró que pronto el parche que dejó el incendio desaparecerá y que, aunque la montaña se sana por sí misma, no se le ha dejado sola en este proceso, lo que ha acelerado la reforestación del lugar.

Redacción Pedro Beltran Harker, pasante CPB.

Así llegó Javier Darío Restrepo a la idea de la ética

En la Universidad Central de Ibagué, se dio inicio a la Cátedra de ética periodística Javier Darío Restrepo, con un acto de exaltación al director del Consultorio Ético de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), con la conferencia titulada “Cómo llegué a una idea de la ética”, cuyo texto compartimos aquí.

“La ética es una invitación a la excelencia y parte de la certidumbre de que como seres humanos y como profesionales, nacimos para ser excelentes”, afirma Restrepo.

Se espera que la participación de estudiantes, docentes, periodistas, directores de medios y comunidad en general, propicie una reflexión permanente sobre las relaciones entre la ética, la comunicación y el periodismo para el desarrollo de una cultura de paz y una democracia participativa.

Cómo llegué a una idea de la ética

Mi primer contacto en serio con la ética ocurrió cuando hice parte de una comisión del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) que tenía la misión de preparar un proyecto de código de ética. La disputa entre dos grupos de socios del Círculo: los que defendían la conductas de periodistas que recibían doble salario: de las empresas en que trabajaban y otro de parte de los congresistas con el argumento de que los sueldos eran escasos y no satisfacían el derecho  de sobrevivir dignamente;  y los que censuraban esa dependencia como indigna y dañina para la credibilidad de los periodistas, todo había culminado con la exigencia de un código de ética para la institución que en aquel momento celebraba sus treinta años de existencia.

Digo que ese trabajo de corredactor del código de ética fue mi primer contacto en serio porque hasta entonces mis relaciones con la ética habían sido las de estudiante de filosofía o las de profesor de la materia con muchas referencias librescas y contenidos teóricos pero sin contacto con la realidad. De esos tiempos conservo una conferencia que leí en unas jornadas de actualización celebradas en distintas capitales adonde  se desplazó un grupo de conferencistas de la capital. Al revisar recientemente esa conferencia la rechacé con cierto rubor; eran páginas que entraban en contradicción con la experiencia adquirida a partir de la redacción del código del CPB.

La ética: un modo de vivir

1.- La experiencia que siguió es la que quiero compartir con ustedes. Un día al leer en la introducción de Ética para náufragos, del profesor español José Antonio Marina: “ hay una ética de supervivencia, una ética de felicidad y una ética de la dignidad” caí en la cuenta de que los libros de ética deberían ser manuales de supervivencia, algo completamente distinto de esos libros museos de prohibiciones en que se han convertido los exposiciones sobre ética.

La redacción del código de ética para periodistas argentinos fue una reveladora experiencia. Finalizábamos un taller con un trabajo práctico sugerido por ellos: la redacción de un proyecto de código. Cuando en la sesión final lo leyeron, les propuse una segunda redacción de esos artículos en positivo y eliminar las cláusulas negativas. Cambiaron el tono y la redacción de ese código. Habían entrado en  conflicto dos visiones de lo ético: la que  lo mira como una exposición de deberes y de prohibiciones y la que, por el contrario construye un modelo de vida buena. Al respecto, subrayé la expresión de Marta Nussbaum: “ la idea de vida buena se refiere a un conjunto enumerable de cualidades interna y externas que definen un modelo deseable de personas humanas”.  Esta fue una importante corrección: la ética no es un catálogo de prohibiciones, es el descubrimiento  de un modelo ideal, capaz de entusiasmar y convencer para construir la propia vida.

Pero con esta fórmula no quedó resuelto el problema puesto que podría preguntarse: ¿para qué la construcción de ese modelo?. ¿Acaso para ser éticamente correctos? Y ser correcto es lo mínimo. Escribía Ortega y Gasset “la moral no es una performance suplementaria y lujosa que el hombre añade a su ser para obtener un premio, es el mismo ser del hombre”.

En efecto, no basta ser correcto, la ética es mucho más ambiciosa. Alguna vez hice un ejercicio académico: en vista de las muy variadas respuestas que se dan sobre la etimología de ética y moral, propuse a un grupo de periodistas reunirlas y analizarlas. Y comenzamos por averiguar el significado de la palabra griega Ethos y de Mos, la palabra latina. Al final encontramos que Ethos es lo real y Mos, que da lugar a morada, o lugar donde uno vive, son significados que no parecen tener relación con ética y moral.

La confusión  crecía al encontrar otros usos: suelo firme, raíz de donde brotan los actos humanos; modo de ser, disposiciones del hombre en la vida, formas de vivir que se adquieren, segunda naturaleza que se  adquiere por hábito, talante. Uno repasa todos estos significados que, aunque diferentes, tienen un elemento común, revelador de la naturaleza de lo ético, que es un trabajo personal que uno se impone para obtener una personalidad, un talante, un modo de ser, una segunda piel que se adquiere viviendo.

Después de este ejercicio llegué a la conclusión: 1.-Tenemos una idea de la ética demasiado insignificante. 2.- Ese lugar común nos aleja del verdadero significado de lo que Aristóteles enseña al definir la ética como “ obediencia a la naturaleza”.

Cuando tuve esto claro, concluí que apenas comenzaba mi búsqueda de las riquezas de la ética.

La ética no se enseña, se comparte

2.- Me invitan desde distintas partes a dictar conferencias como esta o talleres sobre ética médica, o periodística, o de las comunicaciones como uno que hice para obispos de Brasil; preparo un texto o un esquema, los entretengo con mi rollo de teorías y ejemplos prácticos, pero yo sé, quizás las audiencias también, que la ética no se enseña como sí ocurre con el inglés, las matemáticas, la alta cocina, la historia, el crochet o el yoga. ¿Por qué la ética no?

Encuentro una clave para responder en Aristóteles en su tratado de ética para Nicómaco  en donde define la ética como un saber práctico. No la ve

como la ciencia de lo correcto y lo incorrecto, que es otra definición en uso, sino como saber práctico que te permite distinguir lo bueno de lo malo, no mediante la aplicación de fórmulas o modelos, sino mediante la activación de la sensibilidad ética.

No estamos, pues, ante una fórmula que, aplicada te da certezas, sino ante una sensibilidad que reacciona ante lo bueno aprobándolo y adoptándolo y contra lo malo, rechazándolo y previniendo para evitarlo.

Busco una realidad equivalente que me permita desplegar un ejemplo que haga comprensibles estas afirmaciones, y me sale al encuentro la experiencia del amor.

No es asunto de química como con ingenuidad o idiotez se explica, como si todo se pudiera reducir a una fórmula; hay mucho más que eso, solo que excede, y en mucho, los razonamientos, como sucede con todo lo que tiene que ver con la vida.

Así es lo ético, no cabe en los esquemas mentales, toda categoría le resulta estrecha porque, como la vida, se reinventa todos los días. En el Consultorio ético de la Fundación Gabriel García Márquez para el nuevo periodismo se ha vuelto frecuente y repetitiva la pregunta: ¿hay una nueva ética para lo digital? Antes se preguntaba sobre la ética para la radio, o la televisión, o la publicidad, como si la ética fuera uno de esos vestidos diseñados según la estación o el acto social.

En cada caso la respuesta ha sido, con distintos matices, la misma: la ética es una actitud, por tanto se lleva por dentro y no está hecha, es un hacerse, no es de poner y quitar, es una segunda naturaleza que cada uno crea con sus respuestas ante la vida, tanto más o menos acertadas si obedece a ese potencial enorme de la naturaleza. Como ven es lo menos cercano a una fórmula preestablecida.

Investigadores del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar se propusieron estudiar los efectos que había producido en un grupo de niños, su paso por la guerrilla, y comprobaron, con adolorido asombro, que de su sensibilidad había desaparecido cualquier clase de reacción ante el bien o el mal. A fuerza de obedecer sin reflexión, pero con un miedo siempre renovado, las órdenes de sus jefes, su sensibilidad ética había desaparecido, reemplazada por una fidelidad canina, esa que vuelve dóciles a los animales después de un entrenamiento de castigos y estímulos combinados, en el que desaparecía cualquier estímulo racional o moral.

Este escandaloso caso provee una pista  para nuestra búsqueda: en los estímulos externos, en el clima espiritual que rodea a las personas, aparecen factores que propician o que desestimulan el crecimiento ético de las personas. Tal es el hecho que permite concluir que la ética crece- deliberadamente omito decir que se aprende- crece en el ambiente propicio del hogar. Los padres, llegan a ser así, los primeros formadores de la ética de sus hijos.

Incurriré una vez más en la repetición de una historia que suelo contar y que le oí a un indio aymara en La Paz. Almorzábamos en un restaurante indio y hablábamos sobre el tema cuando me dijo: mi más temprana experiencia con la ética me la dio mi padre, indio aymara, analfabeta y agricultor, cuando nos enseñó su idea de  la justicia:  justicia es que si somos ocho en la casa, haya 8 panes en la mesa; si hay seis o diez eso no es justo. Nunca he olvidado esa primera lección de ética. Yo tampoco la he olvidado porque ratifica la percepción de que ser ético no es asunto de conocimiento sino de la sabiduría.

Esta es una palabra emparentada con otra: el sabor, esa calidad atribuida a comidas o bebidas, porque la sabiduría como los sabores les da, a la vida, a las actitudes, al talante de las personas, una cierta definición y singularidad que, como la figura, la piel, el color o la apostura, señalan un modo de ser. Lo saben los catadores de vinos, de café o de platos exóticos, el sabor se extiende por todo el alimento o la bebida,  y se percibe a través de los sentidos; la sabiduría, producto de la experiencia, abarca y singulariza todas las manifestaciones de la persona.

Si sucede así con la ética es porque esta es la sabiduría de vivir, que se aquilata con la experiencia; la ética lejos de ser una teoría, una fórmula o discurso, o sermón, es el producto que deja una larga experiencia y se transmite  mediante la comunicación de experiencias, no con palabras.

Expresa o implícitamente los profesores perciben el mensaje de sus estudiantes: ¿eso que dice usted, es posible? ¿Usted lo hace? Y si no, ¿qué valor tiene lo que dice?

El recurso más utilizado en las universidades para hablar de este tema al estudiantado, es el estudio de los códigos de ética del periodismo, o de la medicina, o del derecho etc, según el caso, con el peligro  de reducir la ética a una práctica reglamentada que, como todo lo que se rige por normas, códigos o reglamentos,  acaba en la búsqueda y adopción de lo mínimo de una materia cuyo espíritu es la búsqueda y adopción de los máximos.

Cuando uno se rige, por ejemplo, por un código de tránsito, se limita a cumplir con la letra que pide lo mínimo y hace caso omiso de la norma si no hay agente o cámara de vigilancia a la vista. La norma es una orden que te imponen desde fuera y coactivamente, pero que no cuenta con tu consentimiento libre. Pero la ética es otra cosa: no se puede imponer desde afuera, porque uno es ético por decisión propia y no para unas situaciones, sino para todo el conjunto de la vida y porque le da la gana. En expresión precisa Kant dice que la ética nos convierte en legisladores de nosotros mismos, no en súbditos de los autores de códigos, o de los maestros de ética.

Un ideal

3.- Más de una vez en el curso de conferencias o talleres los colegas me han calificado de idealista. “Muy bonito lo que dices, pero imposible” me han dicho.  Y debo admitirlo, soy un irreductible optimista e idealista. Estoy convencido de que la ética nunca propone cosas fáciles, generalmente va más allá de los  límites corrientes y entra en el campo de lo posible pero aún inexistente. El humano es un ser rodeado de posibles que se convierten en reales merced a la acción humana. Antes de que una atleta rusa rompiera con su salto en garrocha la marca de los 5 metros, llegar a los 5.10 era un ideal que no había sido alcanzado. Cuando ella lo logró, el mundo aplaudió porque había hecho real lo que solo era posible pero irreal. La ética mantiene como un ideal lo que es posible pero aún no logrado: “híbridos  de realidad y de posibilidad” escribe el filósofo Marina. Y en una bella expresión agrega: “la realidad entera queda  en suspenso a la espera de que el ser humano acabe de darla a la luz, porque las cosas no son lo que son: son lo que son y lo que pueden ser”.

Sucede así con el deseo humano de felicidad; todos queremos serlo, pero ¿cómo? Hay un proyecto ético para lograrlo; decía Séneca: “Todos quieren serlo, lo difícil es saber lo que hace feliz la vida”. Es una posibilidad que la ética revela como real y como uno de sus resultados. Y así como puede hacerse real ese posible, ocurre con el ideal de la perfección. Los persas antiguos  estaban seguros de que el buen guerrero debía saber disparar flechas y no mentir. Era su ideal de perfección. Los grandes campeones, los científicos deslumbrantes, los escritores de genio un día creyeron que ese ideal era posible; no fue algo impuesto por nadie; se lo imponían a sí mismos y en uso de su libertad asumieron ese compromiso consigo mismos.

El citado filósofo Marina reúne tres reveladores ejemplos que ilustran esta idea del humano que, al hacer real lo posible, se superan a sí mismos. Porque de eso se trata: de ir más allá de nuestros propios límites.

Decía Nietzche por la voz de Zaratustra: “Ahora me veo a mí mismo por debajo de mí”  tal era su visión del hombre capaz de superarse a sí mismo; Séneca, a su vez elogia a los esforzados hombres que en sí propios hallaron el ímpetu para subirse en sus propios hombros;  idea que tomaría san Buenaventura: “cualquiera fracasa si no se encarama sobre sí mismo”.

La persona ética no se transa por menos. Lejos de una mediocridad resignada, la vida ética es superación constante porque se encuentra inmersa en el mundo de lo posible. El hombre, en efecto, es una estructura inconclusa, advierte Aranguren (Etica) quien agrega lapidariamente: por eso es libre. Y este fue otro hallazgo que enriqueció mi conocimiento sobre la ética.

Libertad y ética

4.- No podría precisar si fue en Argentina o en México; lo que recuerdo es que fue durante un taller en que me había propuesto orientar nuestras tareas hacia el fortalecimiento de la identidad profesional. Me decía que el resultado tendría que ser muy claro sobre el orgullo de ser periodista, muy distante de la vanidosa apostura de quien sabe tener entre sus manos un enorme poder del que hace uso caprichoso; muy distinto del que llega a ver que maneja la materia prima de la libertad. Nosotros  no le damos libertad a la gente, pero sí ponemos en sus manos la materia prima de la libertad: la información.

Es la información indispensable para quienes toman decisiones, que es el caso, por ejemplo del elector, que solo hará una elección libre si está bien informado sobre candidatos y programas. Al darle esa información aportamos la materia prima para su libertad de decidir. Otra es la idea que se tiene de la profesión cuando se entiende que ese es el  papel de la información periodística: habilitar para decidir en libertad.

Cuando esta idea se incorpora a la conciencia de la identidad profesional, esta se hace más fuerte y arroja una claridad al sentido de la dignidad personal y profesional del periodista.

Esta relación de la libertad y del ser periodista complementa y fortalece la conciencia de seres libres que ya había marcado nuestra relación con lo ético. Esta es una relación que tiene que formarse como actitud fundamental.

En efecto, la actitud ante la ética es una cuando se la entiende como una actitud heterónoma, o sea ajena a la persona, procedente de una autoridad externa; otra es  la que se adopta cuando, según el criterio kantiano se la descubre como un ejercicio autónomo que nos convierte en legisladores de nosotros mismos.

Es distinto, en efecto, recibir órdenes de alguien, o darse órdenes a sí mismo. La ética que se fórmula como el cumplimiento de un código ético que alguien ha redactado sin consultarnos tiene una débil consistencia; la misma de un código de tránsito o un reglamento de trabajo, que se cumplen por presión y con vigilancia externa y se incumplen sin escrúpulos cuando no hay la presión ni la vigilancia. En cambio, “darse órdenes y observarlas es el fundamento de la libertad”

Piaget fundamente su planteamiento educativo cuando comprueba la existencia de dos tipos de relación social: la sumisión a una autoridad externa y la cooperación entre iguales que supone la adopción de unos principios y normas  como decisiones propias. En vez de la conducta del sometido se genera el talante de la prensa libre y del razonamiento moral. Cuando esto sucede y es la  libertad el motor de acción, uno es ético no por imposición sino por decisión. En términos familiares, esto es ser ético porque a uno le da la gana. Esta doble relación entre ética y libertad es otro de los hallazgos que quería compartir con ustedes.

Los códigos

5.- Como les relaté  al principio mi acercamiento serio a lo ético ocurrió con la comisión redactora del proyecto de código del CPB. Pero ideas como  las que he expuesto concluyeron en un replanteamiento sobre el papel de estos códigos en la conciencia ética de los periodistas. Mi trabajo semanal en el Consultorio ético  que aparece en la página web de lFundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo me ha dado la oportunidad de escuchar y estudiar las dudas éticas de periodistas de todo el continente. La mayoría de esas consultas tiene un mensaje implícito: qué dicen los códigos sobre  este caso. Existe una generalizada persuasión de que los códigos son la ética y que ser ético es someterse a los códigos. A  fuerza de estudiar y deliberar sobre  casos y conductas en el Consultorio y en los talleres, he llegado a la convicción de que son útiles como herramientas nemotécnicas que hacen recordar valores, principios y actitudes lo mismo que errores y falseados principios; con esa convicción he llegado a otra: los códigos reducen las dimensiones de lo ético, impiden el acceso a la verdadera naturaleza de lo ético y ocultan sus más ambiciosos objetivos.

Isaac Asimov, bien conocido por los lectores de sus obras de ciencia ficción, me sorprendió en alguna de sus publicaciones con un código ético para robots: el robot no puede hacer daño a los humanos; debe obedecer las órdenes;  debe proteger su propia existencia. Leyendo esos tres incisos debí reflexionar sobre el modo de sintetizarlos del autor y sobre la reveladora semejanza con los manuales de instrucciones para armar un mecano o cualquier aparato. Son órdenes que anulan o restringen la libertad, o sea lo contrario del espíritu de la ética cuyo componente esencial es la libertad, como hace un rato lo dije: uno es ético porque le da la gana. Descubrir  las implicaciones éticas de una acción supone la existencia y el impulso de esa gana: ser ético es estar activando la libertad en todo momento y actuar por propia iniciativa.

La ética, concluyo, va más allá de los códigos y reducir la ética a normas y artículos de un código es una forma de empobrecerla y de reducir el espíritu de lo ético .

El bien común, como clave

6.- El estudio de los casos propuestos por los colegas, que son fragmentos de su vida real, deja ver las claves éticas con las que se va haciendo la construcción de una segunda naturaleza, que viene a ser lo ético: un talante, un modo de ser, un estilo de vivir.

Sería interesante cuantificar los casos en que la práctica periodística tropieza con las exigencias y deberes del bien común.

Sin necesidad de esa cuantificación puedo asegurar que el ser ético del periodista incluye como uno de sus valores básicos el del respeto y servicio al bien común. A manera de ejemplo, ¿por qué darle prioridad a una crisis de servicios de salud sobre una impactante victoria en futbol? ¿Qué debe destacar el periodista: la corona de una reina de belleza o los daños ambientales que está produciendo la minería?

Entre dos informaciones: el escándalo de corrupción de un alto funcionario, o un acuerdo de paz, ¿usted qué escoge como información principal? ¿Qué es su periódico o noticiero: un negocio particular o un servicio público? Son consultas que se resuelven con la referencia al bien público y que mantienen latente la idea de que el periodista es, antes que cualquiera otra cosa,  un servidor público y que lo suyo es la defensa y promoción del bien público.

Es una clave, pero no solo eso. De esta referencia al bien común emerge un elemento esencial de la profesión y la naturaleza del papel del periodista y del periodismo en la sociedad; ese elemento permite configurar el ideal ético de la profesión, al tiempo que destaca lo que no debe ser el periodismo. Cuando se desactiva la práctica de un periodismo de servicio y se activa el potencial publicitario, o de relaciones públicas, aparece la deformación y degradación profesional.

La explicación de este fenómeno la encuentro en Aranguren: “La ética está subordinada a la política. La moralidad pertenece a la polis, las virtudes del individuo reproducen las de la política”. (31)

Habla este autor dela política como un servicio del bien común, por eso explica que lo ético se realiza en tres momentos: la familia, la sociedad y el Estado, afirmación que le permite concluir que ”el Estado aparece como la concreción final de la vida moral” (37) En efecto la ética social es una parte constitutiva: “por ser ética de la persona, la ética general le da alcance necesariamente a la ética social”. (38)

Teniendo  a la vista esta relación entre la ética y lo público creo haber descubierto otra clave de lo ético en la práctica periodística y un elemento fundamental para trazar el perfil de lo ético. En efecto, la ética aparece cuando en el horizonte personal emerge el otro.  La relación entre la ética y el otro me hizo avanzar en la comprensión de la ética. ¿Qué tienen que ver la ética y el otro?

El Otro

7.- Encontré en Ética para Amador de Fernando Savater una cautivante reflexión enredada en alguna de las jornadas de Robinson Crusoe, cuando ya habían pasado 20 años después de su naufragio y llegada a la isla.

La huellas de un humano, que encontró en la playa le provocaron un inmenso sobresalto. Recordó al instante la escena que había encontrado a través de la lente de su catalejo. En una playa lejana desembarcaban unos hombres que arrastraban consigo a dos prisioneros. Los arrojaron al suelo, encendieron una hoguera, les dieron muerte a cuchilladas y procedieron a sacar tajadas de carne de sus cuerpos. Aún chorreaban sangre cuando las pusieron a asar en el fogón.

¿Lo había soñado? ¿Era la realidad atroz que parecían comprobar estas huellas?  ¿Estarían a punto de llegar a su rancho estos caníbales?

Se detuvo entonces a pensar lo que correspondería hacer: ¿ir por su arma, seguir las huellas con todos sus sentidos alerta y con toda su experiencia de cazador como guía y eliminar la amenaza? ¿Y si eran varios? Dudó. Pero había otra posibilidad: se le apareció otra escena: seguir las huellas, no con un arma en la mano sino con una canasta llena de flores y frutas, encontrar al hombre y ofrecerle su canasta en señal de amistad. Ganaría tranquilidad y compañía.

Savater interrumpe el relato para reflexionar: en 20 años y por primera vez en su vida de náufrago Robinson enfrentaba un dilema ético: matar o amar. La ética había aparecido con la presencia del otro. La ética lo había sacado de su ensimismamiento, le había abierto los ojos para la contemplación  de la existencia, de los intereses, de las posibilidades del otro; le había planteado alternativas distintas de las que solo tenían el tamaño minúsculo de las que solo consultaban sus intereses. Había abandonado los confines de su yo y entrado en el amplísimo universo del nosotros.

Me he extendido en este relato porque me reveló el papel que el otro asume en la ética. Hice el ejercicio de leer algún código de ética y encontré que el objetivo y razón de ser de esas normas era el otro: el respeto a su intimidad,, el de su buen nombre, el deber de informarle y de dignificarle con la información; su derecho a la verdad, el cuidado por las consecuencias de la información, siempre el otro como presencia ubicua en la reflexión ética. Hablar, pues, de ética es hablar de mis deberes para con el otro y esto hasta el punto de que la sensibilidad ética equivale a la sensibilidad hacia el otro.

Agréguenle a las anteriores, la consideración sobre el lugar que ocupa el otro en la vida del periodista, que es un islote rodeado de otros por todas partes: el otro es a la vez el objetivo de nuestra información: investigamos, editamos y difundimos para él; el otro es nuestra fuente y es el tema de nuestras informaciones: las investigamos, les damos forma y las publicamos porque es nuestra manera de servirles. Con ellos y desde ellos evaluamos lo que hacemos, nada en nuestra actividad ocurre sin el otro.

El cuidado

8.- Esa relación con el otro tiene un comienzo. Su primera manifestación es el cuidado. Preparaba una conferencia sobre ética médica cuando  me salió al encuentro en un texto la información de que el primer paso hacia la ética es el cuidado.

Leonardo Boff, el teólogo y filósofo brasileño ve el cuidado como “una actitud de relación amorosa, suave, amigable, protectora de la realidad personal, social y ambiental”.

Si alguno está pensando que mi idea del periodista es la de  una versión de la madre Teresa, quiero decirle que no está del todo equivocado. Tenemos en común con ella que no miramos a los demás para aprovecharnos de ellos, sino para servirles. Esto difiere escandalosamente del periodista a quien una catástrofe, o un crimen  le interesan como chiva y nada más.  Cuando se hace ese periodismo necesariamente será de mala calidad porque es incompleto y, por tanto, deshumanizado.

“ Cuidar es una forma de vivir, de ser, de expresarse, es una práctica ética y estética ante el mundo”,  escribía Regina Waldow. Es una forma de vivir más allá de lo natural y se convierte en una segunda naturaleza añadida a lo natural. Es un cuidado natural que dice: cuido de ti porque quiero hacerlo.

Todo esto me lleva  a preguntarme sobre lo que cambiaría, en la práctica diaria del periodismo si este fuera el enfoque y la motivación; la respuesta a esa pregunta es reveladora.

Si una de las formas del cuidado es que uno se pone en el lugar del otro para comprenderlo, ¿qué pasaría al entrevistar? En el otro vería incertidumbre, miedo, inseguridad, soledad o indefinición. Ver esto le dará a mis preguntas un tono, una intencionalidad, un aire distinto. Ponerse en el lugar del otro, si ese otro es la persona de quien se informa, o cuando ese otro es la persona a la que se informa, le daría a la información otro tono, otro contenido, otro enfoque porque es una información que protege, que ayuda, que sirve. Estará hecha desde el otro y con las formas que aconseja el cuidado.

Cuando entendí que el primer paso de la ética es el cuidado mi idea del periodismo cambió. Recordé lo que había oído de alguien, que toda obra  del hombre es humana si cuida de lo humano en el hombre. Y esa es la tarea que cumple uno como periodista cuando se pone en el lugar de otro, que es la calidad del que cuida. Es un primer paso que le da el tono a la ética.

En ética nadie es juez de nadie

9.- Me enseño mucho la cordial discusión que sostuve con colegas de Bolivia en La Paz. Estaban satisfechos y orgullosos del tribunal de ética que habían instalado y esperaban ideas y experiencias sobre  esos tribunales.

Los desconcerté al  manifestarles mi convicción de que un tribunal de ética es una contradicción en los términos. Puesto que la ética no puede ser impuesta por nadie porque es un ejercicio de la libertad, y por tanto decisión personal y autónoma, no cabe esa forma de presión externa que es un tribunal, les expliqué. Estos tribunales toman prestado el lenguaje de lo legal. En los tribunales se acusa, se condena, se absuelve, se sustancia, se obtienen pruebas y con los tribunales de ética se pretende que se sigan procesos paralelos, con lo que se desnaturaliza el proceso ético.

Mencioné antes la expresión de Kant cuando llama a la persona ética legisladora de sí misma y retomo esa frase para subrayar la autonomía de lo ético que nace de unas decisiones autónomas y personales.

No se trata de una opinión caprichosa y sujetiva, sino que nace de la lectura que cada uno hace  del mandato de su naturaleza.  La adopción de los códigos de ética crea el equívoco de que al cumplirlos se acata alguna autoridad institucional, ideológica, religiosa, política, cuando en realidad la ética es una obediencia a sí mismo, sea que ese sí mismo se entienda como la propia conciencia, el yo o la apropiación de una cultura.

Por tanto si lo ético es el resultado de una decisión personal y no de instancia externa alguna, soy yo quien legisla, soy quien adopta un compromiso y quien juzga sobre su cumplimiento. En ética no solo somos legisladores de nosotros mismos, también somos nuestros jueces.

Este es el fundamento de una frase que como mantra suelo repetir: en ética nadie es juez de nadie, salvo de sí mismo. Se ha convertido en sofisma de distracción la discusión sobre presuntas o reales violaciones de la ética por parte de los colegas periodistas. Son discusiones en las que generalmente se echa de menos la pregunta principal, ¿en los zapatos del colega acusado, qué hubiera hecho yo? ¿Habría adoptado la conducta de él? ¿Por qué? Cuando este es el enfoque de la discusión esta se vuelve aprendizaje y oportunidad de ver los propios errores y de aprender de ellos. Pero, sobre todo,  por la ética uno se vuelve en el conductor de su propia vida con los riesgos implicados en esa condición y deberes como el de la autocrítica llegan a ser parte del quehacer diario.

La utopía de ser excelente

10.- Dí otros pasos cuando, invitado por los colegas del foro de periodistas argentinos (FOPEA) para la presentación del código de ética que ellos habían redactado en los tres años que siguieron a un taller de ética, redacté el texto de una conferencia que sirviera de introducción a aquel código. Entonces abordé el tema de la ética como una utopía, que me condujo a la cima de estas reflexiones, en la que pude concluir que la ética es la respuesta a la vocación con que todos nacemos, de ser excelentes. Iré por partes puesto que estamos en la recta final de este camino.

¿Se llega alguna vez a la cima de lo ético? ¿Alguien podría decir en esta sala, yo soy ético?

Se plantearía el mismo problema si ustedes o yo dijéremos soy libre, o soy justo.

Ni la ética, ni la libertad, ni la justicia son realidades que están ahí, hechas y acabadas. Son dinamismos del espíritu que tienen mayor o menor actividad pero que nunca alcanzan una total plenitud.

Es más exacto afirmar que el ser humano está en proceso de ser ético, o libre o justo, cuando es ese el propósito de la vida. Por esa razón, porque impone en la vida una actividad que no admite pausas, porque su mandato en la conciencia es a la vez inalcanzable e irrenunciable, la ética es una utopía que no deja espacio para el descanso.

La ética cumple las funciones de las utopías, todas las que en el mundo han sido fuerzas de transformación.

La utopía nace de la insatisfacción ante lo real, se alimenta de la convicción de que todas las realidades pueden y deben ser cambiadas, es la fuerza movilizadora de los cambios.

Manheim habla de la utopía como un estado mental que trasciende la realidad y que va más allá de lo real. La utopía no es una isla, que fue el sentido que le dio Tomás Moro cuando unió las dos palabras griegas u, negación, y topos, lugar, o sea, lugar que no existe, porque tiene que ser creado.

Prescindan del lugar físico, y quédense con el estado mental y el resultado es que utopía es esa voluntad permanente de cambio, de mejoría, que alienta en los humanos a quienes moviliza la convicción de que nada es perfecto, de que la realidad, toda realidad, debe ser cambiada porque así lo imponen, primero la vocación humana a la excelencia y, segundo, su irrenunciable examen crítico de las realidades.

A esa insatisfacción de todas las horas se agrega la propuesta de lo que debería existir, que sobreviene cuando de lo real insatisfactorio se pasa a lo real posible, esa parte de la realidad que se mantiene invisible hasta que la acción humana la hace emerger.

Esta descripción de la utopía  proporciona el marco en que nace la ética. En su proceso todo comienza con la crítica de lo existente. No se puede ser ético y conformista. La persona ética es inconforme consigo misma y con lo que hace. Sometida a constante autocrítica, la persona ética encuentra que siempre hay fallas que enmendar, errores que reparar o rectificar, metas nuevas que alcanzar. Entiende, asimismo que la vida no es descanso, ni satisfacción por lo hecho. Esto explica la importancia de la autocrítica y del diálogo ético en que se comparan el ser y el deber ser de personas, profesiones o instituciones y se aceptan fallos y errores y se reemprende la tarea o búsqueda de la utopía.

La ética es, pues, una utopía, es decir un dinamismo de insatisfacción y de búsqueda, de lo posible que espera el momento de ver la luz de lo real.

Leer un código de ética es internarse en el terreno de lo posible, es recibir la notificación de lo mucho que uno puede hacer y el llamado a realizarlo, a sabiendas de que nunca lo lograremos totalmente y de que la utopía se mantendrá como certeza de que los humanos siempre somos seres posibles.

Por último, amigos, la ética es una invitación a la excelencia y parte de la certidumbre de que como seres humanos y como profesionales, nacimos para ser excelentes.

La ética nos sitúa en niveles más altos que lo real, como expresión, no de otra realidad, sino de  la misma realidad pero llevada a esa alta potencialidad que es la excelencia personal o profesional.

Allí se señalan todas las posibilidades que le caben al ser humano; es la utopía del ser humano perfecto que han soñado los filósofos, o la del hombre nuevo, que es la cima de los sueños revolucionarios, se creyó verla en los santos y la iglesia celebra el hallazgo de su utopía en cada canonización; entre los griegos fue el héroe que cantó Homero., para los romanos la excelencia estuvo encarnada en el guerrero que regresaba vencedor, en el siglo de las luces fue el científico, para muchos lo fue el astronauta y en las olimpíadas mundiales ese ideal de excelencia se ve encarnado en los campeones aplaudidos en lo alto de los podios como representación de la pasión por la excelencia que mueve a todos los humanos.

En cada caso ha habido ese trabajo de corrección, pulimiento, consolidación y conquista de sí mismo que convierte a cada hombre en escultor de sí mismo, empeñado en hacer de sí una obra perfecta.

Como inspiración y motor de ese proceso opera la ética, esa inconformidad con lo mediocre y lo torpe, esa vocación para llegar al deber ser.

Por fin termino, admirando su paciencia. Si tanto Camus como García Márquez coincidieron en llamar al periodismo la más bella profesión del mundo es porque lograron reunir en una frase todo lo que con dificultad acabo de decirles como primera lección de su cátedra de ética del periodismo.

Documentación

José Antonio Marina: Etica para náufragos. Anagrama. Barcelona, séptima edición. 2006.

José Luis Aranguren: Etica, Altaya, Barcelona, 1994.

Fernando Savater: Etica para Amador, Ariel, décima reimporesión, Bogotá 1995

Victoria Camps: La imaginación ética:  Ariel, 1991,  Barcelona

Leonardo Boff: El cuidado necesario. Trotta, Madrid 2012.

Juliana Gonzalez: El ethos, destino del hombre, Fondo de Cultura Económica, México 1997.

Salvador Alsius: Etica i periodismo, Romanya/Vals Barcelona 1998.

Jack Fuller, Valores periodísticos: Sociedad interamericana de prensa. Miami, 1996.

Nota tomada de http://eticasegura.fnpi.org

Falleció Juan Mendoza Vega creador del periodismo científico

La Junta Directiva del Círculo de Periodistas de Bogotá, CPB, lamenta el fallecimiento del médico y periodista Juan Mendoza Vega y se une al luto que no solo embarga a su familia sino al periodismo  colombiano.

Mendoza Vega fue neurocirujano egresado de la Universidad Nacional de Colombia, y había nacido  hace 84 años en Chinácota, Norte de Santander.

Fue presidente de la Federación Latinoamericana de Sociedad de Neurocirugía (FLANC), de la Academia Nacional de Medicina y director del Instituto Neurológico de Colombia. Fue profesor de las facultades de Medicina de las universidades Nacional, Rosario y Javeriana. Al momento de su muerte se desempeñaba como presidente de la Fundación Derecho a Morir Dignamente, que promueve el derecho de los enfermos terminales a disponer libre y legalmente el momento de morir de manera tranquila, evitando las consecuencias dolorosas de la enfermedad. 

Como periodista, Mendoza Vega estuvo muy cerca de nuestra colectividad y en varias ocasiones  dio ideas para crear proyectos que tuvieran que ver con políticas especiales para la salud de los periodistas. Asimismo, durante más de 40 años mantuvo en El Espectador su columna “Medicina al día”, publicada hasta su retiro en 1998.

Al periodismo no llegó a hacer noticias, sino siendo noticia: estaba en primera línea durante la marcha estudiantil  de 1954,  que fue repelida a bala por el Ejército con un saldo de varios estudiantes muertos.  Por esta protesta perdió la beca que le había dado el gobierno departamental del Norte de Santander y entonces tuvo que buscar trabajo.  Un amigo le dijo que escribiera en EL Espectador y ocurrió la coincidencia de encontrarse de frente con su director Guillermo Cano, quien le dijo: “Traiga algo y si me gusta lo publico”. Efectivamente su artículo sobre la vida de los estudiantes pobres fue publicado el 5 de agosto de 1954.

Cano le siguió aceptando notas que se las pagaban una a una. Hasta que le propusieron que asumiera el turno de la noche, hasta la una de la madrugada. Lo que aceptó porque así pudo continuar en la Universidad Nacional sus estudios de medicina.  Segundo a segundo fue nutriéndose en carne propia y de manera directa del oficio periodístico hasta lograr ser un auténtico reportero. Una anécdota lo demuestra: durante el gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla, por  encargo de Guillermo Cano fue a averiguar por qué se estaban vendiendo juguetes de Navidad que habían sido donados por industriales alemanes para la campaña del aguinaldo del niño pobre.  Logró una primicia porque  se disfrazó de médico y se coló al sitio donde estaban vendiendo los juguetes. Cuando salió su crónica, el servicio de inteligencia  le pidió a El Espectador que informara quién había sido el autor del escándalo. La respuesta del director Guillermo Cano se convirtió en un ejemplo de lo que es la entereza y la ética periodísticas“la responsabilidad de escribir en El Espectador la comparte mancomunada y solidariamente todas y cada una de las personas –vivas o muertas- que han figurado a la cabeza del periódico desde su fundación”.

Con su columna médica en El Espectador le dio forma en Colombia a la difícil especialidad del periodismo científico. Lisbeth Fog Corradine, presidenta de la Asociación Colombiana de Periodismo Cientifico, dijo durante la presentación del libro Cuarenta años de periodismo médicode Mendoza Vega,  que él “representa esa simbiosis entre el científico y el periodista, fórmula ideal para divulgar la ciencia, difícil de encontrar porque cuando lo hacemos generalmente encontramos a dos personas, al investigador y al periodista, quienes trabajan generosamente en la preparación de un texto o de un guión”.

Una comunión investigador científico-periodista que Mendoza Vega logró hacerla digerible para el lector común y corriente. Lisbeth Fog Corradine señala que tras cuarenta años de periodismo médico “se ganó su espacio en los medios de comunicación por muchas razones (…), porque escribe como habla: de una manera sencilla, ágil, coordinada y organizada; va contando el cuento de la investigación realizada, del nuevo aparato adquirido por algún centro médico colombiano, del procedimiento quirúrgico, como si se tratara de eso, de un cuento bien contado. Es oportuno en sus temas, y directo en sus apreciaciones y además el lector encuentra denuncias explícitas sin temor alguno a ser expresadas o a sus posibles consecuencias; también encuentra escritos prudentes, pero con la vehemencia que caracteriza a su autor; dice las cosas con elegancia”.

En una entrevista reciente, Juan Mendoza Vega afirmó: “Llegué a la medicina por el periodismo”. Y en ambas fue notable.

Paz en su tumba le desea el CPB, a la vez que reivindica su condición de periodista integral, sensato y totalmente ajeno a ese nefasto apetito actual de mezclarle relaciones públicas y empresariales al oficio periodístico.

 

RENÉ PÉREZ

SECRETARÍA DE COMUNICACIONES