Bogotá, 11 de marzo_ RAM_ “Nos llena de alegría estar justo hoy acá en el Meta, uno de los lugares que visitará el Papa Francisco. Esta visita será una oportunidad para superar la polarización, los odios, el rencor, que tanto daño nos ha hecho al país. Es un momento de unirnos por la paz”, dijo el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo durante la inauguración de dos Centros de Integración Ciudadana en este departamento.
Estas obras fueron inauguradas en San Carlos de Guaroa y en Cubarral, cada una tuvo una inversión de 735 millones de pesos.
Los CIC son escenarios cubiertos en donde se ofrecen programas lúdicos, culturales y deportivos para el buen uso del tiempo libre de los niños, jóvenes y adultos, con el fin de mejorar las relaciones entre sus habitantes y prevenirlos delitos.
Durante el segundo mandato del Presidente Santos el ministerio del Interior ha invertido en Meta 14 mil 693 millones de pesos en 13 Centros de Integración Ciudadana, dos Centros Administrativos Municipales, un proyecto de movilidad para la fuerza pública y el sistema de videovigilancia para la ciudad de Villavicencio.
Perentoriamente el Presidente invitó al Fiscal a poner fin a la desinformación en que mantiene al país: “o acuse, o cierre” el tema de sus dos ex ministras en torno a un supuesto otrosí, al contrato de la carretera Ocaña-Gamarra. “Razones a Bolívar para que las entienda Santander”.
La Fiscalía parece jugar a la desinformación. ¿Qué persigue con esta práctica? Averígüelo Vargas.
El caso Odebrecht sirve ahora para todo. Para buscar apreciaciones, para alimentar las redes, para desacreditar, para buscar escondites, para las próximas elecciones, para tapar lo que no convenga.
Miremos lo del millón de dólares que supuestamente habrían ingresado a la gerencia de la campaña Santos en el 2014. Primero se utilizó para buscar “remontar fraudulentamente el marcador”, como ocurrió con el partido entre PSG y Barcelona. Dos dudosos penaltis y se empataba ¿u olvidaba? lo ocurrido con la goleada de los 4.6 millones de la campaña uribista de Zuluaga.
Primero se habló de dos pesados maletines que con dinero Bula entregó a Giraldo, en un hotel de la 85, para que se los llevara a Prieto. Luego, que no fue así, rectificó el propio Bula. Después, que en Brasil, la revista Veja, tenía otra versión sobre la vía que había tomado esa plata. Cada minuto aparecían versiones contradictorias. La última punta de la piola, hizo aparecer esos dólares en Panamá, y temerariamente se inculpó a la campaña de Santos de haberlos utilizado para pagar la más estruendosamente costosa encuesta de la historia. Pero ha sido tan monstruosa la manipulación, que dicho sondeo ahora, parece haber sido utilizado por todas las campañas de esa época. Es decir, que la cosa volvió a quedar en tablas, pero ya el daño está hecho.
Simultáneamente se conoce la suspensión de la candidatura de Zuluaga – ¿Acaso renuncia?- ante el caso Odebrecht, y su cada vez más minimizada imagen, por sus contendores Duque, las calzonarias de Ordóñez, Trujillo y las amenazantes versiones de una vicepresidencia de Uribe, para llegar por esa vía al poder.
El rio está revuelto. De Odebrecht parece depender la próxima presidencia de Colombia. Y la Fiscalía, con la desinformación parece colaborar y atizar. O que acuse o que cierre, le dijo el Presidente. ¿Acusará, cerrará?
BLANCO: Yully Mora, la joven, inteligente y dinámica Mujer Cafam. La pescadora de ilusiones que dignifica a una sociedad que no tenía rumbo, ni futuro.
NEGRO: El “brazo” armado que apareció en las filas de los hinchas del Deportivo Cali. Y nada pasa…
Fernando Carrillo reseñó que la empresa brasileña incluso conformó una unidad interna para controlar el pago de sobornos en diferentes países de América Latina.
En los próximos días se conocerán nuevas decisiones de fondo de la Procuraduría General en las investigaciones que se adelantan por las irregularidades en la entrega de contratos viales a la empresa brasileña Odebrecht. El Ministerio Público ya identificó a un grupo de funcionarios públicos que habrían tenido participación y conocimiento en la entrega de millonarios contratos de obras públicas en el país.
Para el procurador General, Fernando Carrillo Flórez dicha empresa es una “multinacional del crimen organizado” puesto que las pruebas recolectadas hasta el momento y la información que han entregado organismos internacionales han revelado que Odebrecht incluso conformó un departamento interno para controlar el pago de millonarios contratos viales en diferentes países de América Latina.
“Tenían un departamento dedicado a los sobornos, y como empresa criminal debemos buscar la muerte jurídica de esa empresa”, precisó Carrillo Flórez. En este sentido manifestó que todos los organismos deben fortalecer sus controles con el fin de evitar que este tipo de casos se presenten nuevamente.
Considera que en el caso de Odebrecht no se pueden hablar de casos aislados, o de solamente “dos ejecutivos aislados, o dos manzanas podridas”. Es evidente, recalcó, que todos tenían conocimiento de estas actividades ilegales. “Debemos combatirla con herramientas jurídicas y perseguir la responsabilidad penal para llevar a la muerte jurídica a estas empresas”.
Sin embargo, estas herramientas no existen actualmente en Colombia. “Si hay crimen organizado internacional hay que acudir a todas las herramientas de la cooperación internacional para combatir la corrupción. Este no es un problema local únicamente, de ver como aplicamos un conjunto de leyes a los corruptos en el ámbito nacional”, señaló el jefe del órgano de control disciplinario.
Para esto se deben “perseguir los bolsillos de los corruptos” exigiendo las declaraciones de renta y rastreando sus bienes y patrimonio. La Procuraduría General busca establecer la participación de funcionarios de los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez y Juan Manuel Santos en el recibimiento y entrega de los sobornos para garantizar los contratos de la Ruta del Sol II y la vía Ocaña-Gamarra, entre otros.
Las altas velocidades son mortales, y todos tenemos que saberlo. Atropellar a alguien a 80 km/h equivale a empujarlo desde un noveno piso.
Por: Guillermo Camacho Cabrera.
Socio del CPB.
La Secretaría Distrital de Movilidad, la Cámara de Comercio de Bogotá y la Fundación Despacio invitaron la última semana de febrero a un grupo de periodistas a participar en un encuentro para hablar sobre seguridad vial. El nombre del taller fue muy llamativo: ¿cómo salvar vidas siendo periodista? Y el centro del aprendizaje fue la velocidad.
Reflexionamos en conjunto con periodistas y no periodistas entre quienes estaba el Ingeniero Andrés Archila, subsecretario de política sectorial de la Secretaría de Movilidad de Bogotá, acerca del rol del periodista en la información referente a la seguridad vial.
Se analizaron, junto con el equipo de la Fundación Bloomberg Philanthropies y la Fundación Despacio, liderado por Carlos Felipe Pardo experto en temas de movilidad y transporte, noticias publicadas en los últimos días en diarios y noticieros de televisión.
Algunas de las conclusiones a las que llegamos fueron:
Es necesario cambiar el enfoque de la información y hablar también de los victimarios, ya que gran parte de las noticias se centran en las víctimas y también atribuyen a ellas las causas de los siniestros viales. Los victimarios también tienen historias de vida y responsabilidad en la seguridad vial.
Se requiere que la información referente a seguridad vial incluya un mayor número de datos cualitativos y cuantitativos que orienten a las audiencias frente a los temas tratados.
Se debe cambiar la estructura de la información que presentan periodistas y medios referente a seguridad vial. Buscar nuevas formas de contar los hechos y lo que sucede alrededor del tema.
Hay que profundizar, desde el quehacer periodístico, en la intencionalidad del periodista al publicar una nota o información referente al tema de seguridad vial o de siniestralidad vial. ¿Qué busca? ¿Qué pretende? ¿Quiere acaso cambiar la realidad del problema?
Es relevante mencionar la legislación existente en las notas o informaciones publicadas sobre seguridad vial.
Hay que buscar mensajes pedagógicos en cada información presentada y ser más sutiles en las formas de comunicar hechos de muertes violentas por siniestros viales, pues hay aspectos más importantes que la sangre.
Por su parte la Directora de Seguridad Vial y Comportamiento del Tránsito de Bogotá, Ingeniera Claudia Díaz, expresó en su saludo que “no queremos perder ninguna vida mientras la gente esté en las calles”, como premisa de la política de seguridad vial de la ciudad.
Otros aprendizajes de la jornada están relacionados con el principal factor de riesgo asociado con los siniestros viales.
De acuerdo con el estudio realizado por la Universidad Johns Hopkins en 2015 en Bogotá, el principal factor de riesgo es la velocidad inapropiada de los conductores de la ciudad, que supera los límites establecidos por la Resolución 1384 de 2010. Esta adopta el método para establecer los límites de velocidad en las carreteras nacionales, departamentales, distritales y municipales de Colombia.
Las velocidades en vías urbanas en Colombia, de acuerdo con la Resolución 1384/10, no podrán sobrepasar los 80 Km/h. Los vehículos de servicio público, de carga y transporte escolar no podrán sobrepasar los 60 km/h, en tanto que las velocidades en zonas escolares y residenciales serán hasta de 30 km/h.
Sin embargo, 39% de los conductores de la ciudad (4 de cada 10), no acata los límites de velocidad establecidos.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OEDC), el impacto de la velocidad en los siniestros viales es comparable con caer desde la altura de un edificio.
Atropellar a una persona a 80 Km/h equivale a empujarla desde un noveno piso. Hacerlo a 65Km/h, es igual que empujarla al vacío desde un sexto piso.
Si un peatón es atropellado por un vehículo a 50 Km/h es como si lo empujaran desde el cuarto piso de un edificio. Atropellarlo a 30 Km/h equivale a lanzarlo desde un segundo piso. Por supuesto, la probabilidad de sobrevivir para un peatón, ciclista o motociclista disminuye entre mayor sea la velocidad del vehículo que impacta.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, asegura en su reporte global de seguridad vial 2015 que reducir el promedio de velocidad en 5% reduce en 30% el número de víctimas fatales en siniestros viales.
Vale la pena anotar que en el mundo los usuarios vulnerables de las vías representan 49% de las víctimas fatales por siniestralidad vial (23% motociclistas, 22% peatones, 4% ciclistas). Para el caso específico de Colombia, estas cifras cambian dramáticamente: 92% de las víctimas fatales de siniestros viales son usuarios vulnerables (29% motociclistas, 53% peatones, 10% ciclistas).
La percepción de rapidez también debe ser evaluada por los conductores, especialmente en ciudades como Bogotá o ciudades intermedias de más de 600.000 habitantes.
De acuerdo con la Fundación Despacio, acelerar en un cambio de semáforo a verde durante un recorrido en la ciudad ahorra en promedio tan solo 2 minutos en el viaje total a los conductores debido a que los vehículos deben detenerse en el próximo cambio de semáforo a amarillo y rojo.
Así, de acuerdo con la medición hecha en el corredor de la Avenida Boyacá en hora pico, el ahorro en tiempo es ínfimo comparado con el riesgo que significa subir la velocidad y poner en riesgo la vida propia y la de otros actores viales.
Los conductores de motocicleta tienen, entonces, la vida en sus manos, ya que con ellas aceleran la moto. Los conductores de vehículos de cuatro ruedas y más tienen su vida y la de los demás en los pies, pues con ellos oprimen el acelerador.
Lo importante es que la conexión desde el cerebro sea lo suficientemente racional como para transitar a mejores velocidades, sin poner en riesgo la vida propia y la de los demás.
El máximo jerarca de la iglesia católica estará en Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena. El representante diplomático del Vaticano en Colombia destacó lo inusual de que el papa visite por tantos días un solo país, un hecho que demuestra la importancia de el papa Francisco le da al viaje a Colombia.
El nuncio apostólico en Colombia, monseñor Ettore Balestrero, confirmó este viernes que el papa Francisco, máximo jerarca de la iglesia católica, visitará Colombia del 6 al 10 de septiembre de 2017.
El anuncio fue hecho en una rueda de prensa realizada en las instalaciones de la Conferencia Episcopal, en donde también se informó que el papa Francisco estará durante esos cuatro días en Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena.
“El Papa quiere venir al encuentro de los colombianos, viene por quienes están en las ciudades y por los que viven en el campo y tienen una cultura y unas necesidades diferentes; por los ricos y por los pobres; por los jóvenes y por los ancianos”, dijo Balestrero, quien es el representante diplomático del Vaticano en Colombia.
El funcionario señaló, además, que “el viaje tendrá como único destino a Colombia y durará 4 días enteros: un período muy consistente, si lo comparamos con la duración ordinaria de los viajes pontificios”. Considera que es muy raro que un papa visite durante tantos días un solo país y que el hecho demuestra la importancia que este le da a este viaje a Colombia.
El pasado fin de semana, el diario italiano La Stampa dio luces del momento de la llegada del sumo pontífice. Según ese medio de comunicación, la visita del papa se daría en el segundo semestre del año, al parecer, entre septiembre y octubre de 2017. (Lea: El Papa Francisco vendría a Colombia entre septiembre y octubre)
Este mismo jueves, Francisco avanzó en una entrevista con el semanario alemán «Die Zeit» que en su programa de viajes de este año está visitar Colombia, India y Bangladesh, además de ir a Fátima (Portugal). “Están todavía en el programa India, Blangladesh y Colombia, un día en Fátima, en Portugal y, por lo que sé, está pendiente un viaje de estudios a Egipto», señala el papa.
Francisco apunta estos detalles al ser preguntado sobre si piensa viajar a Alemania en 2017, aceptando la invitación que la han trasladado las iglesias católica y evangélica, el presidente del país, Joachim Gauck, y la canciller, Angela Merkel, para conmemorar el llamado Año Lutero, con motivo del 500 aniversario de la reforma protestante.
«Va a ser difícil este año, hay tantos viajes planeados», apunta el papa.
Papa Francisco visitará Colombia el 6 de septiembre Foto: Archivo SEMANA
Después de 31 años el máximo líder de la iglesia Católica visitará el país. Por cuatro días el Sumo Pontífice recorrerá Bogotá, Medellín, Villavicencio y Cartagena.
Desde ese 2 de julio de 1986, cuando Juan Pablo II descendió del boeing 747, Colombia no ha visto a un Papa pisar su tierra. Por eso desde que se empezó a especular que Francisco visitaría Colombia la expectativa fue alta.
Este viernes, y después de mucha espera, el nuncio Apostólico Ettore Balestrero, en compañía del presidente Juan Manuel Santos anunció en la Conferencia Episcopal de Colombia que el Papa vendrá del 6 al 10 de septiembre de este año y estará presente en Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena.
“El Papa quiere venir al encuentro de los colombianos, viene por quienes están en las ciudades y por los que viven en el campo y tienen una cultura y unas necesidades diferentes; por los ricos y por los pobres; por los jóvenes y por los ancianos”, manifestó el diplomático.
El presidente Santos aseguró que el Santo Padre viene a apoyar a los colombianos en la construcción de la paz. «Llega a Colombia en un momento único de nuestra nación para invitarnos, como siempre lo ha hecho, a la unión, a la reconciliación, al perdón y, sobre todo, al encuentro», dijo.
El Papa había prometido visitar el país en varias oportunidades. En julio de 2016 lo anunció durante un almuerzo que mantuvo con 12 jóvenes en la ciudad polaca de Cracovia. En ese entonces no especificó fecha alguna pero aseguró que Colombia estaba en su agenda del 2017.
El país vivió un periodo de profunda incertidumbre después del plebiscito y el Papa desde la distancia oró por la paz. “Les pido una oración especial por esa tierra maravillosa para que, con la colaboración de todos, se pueda llegar finalmente a la paz, tan deseada y necesaria para una digna convivencia humana”, expresó el Sumo Pontífice.
La sola presencia de Francisco no podía garantizar que desaparecieran la desconfianza mutua entre Santos y Uribe, ni mucho menos sus profundas diferencias sobre el proceso de paz con las FARC. El expresidente, con la apresurada salida del Senado “a ver si alcanzaba a llegar a la cita”, dejó en claro que no hubo trabajo previo, ni negociaciones de las que suelen hacerse antes de una cumbre. Pretender que en reuniones de media hora se solucionarían discrepancias tan difíciles de reconciliar era casi una ingenuidad.
Sin embargo, aunque la milagrosa reconciliación de los líderes políticos no ocurrió, tras el triunfo del No en el plebiscito en La Habana se discutieron más de 400 propuestas provenientes de quienes alegaban que el acuerdo entre las FARC y el Gobierno tenía fallas y puntos por mejorar.
Ahora que el acuerdo de paz con la guerrilla más vieja del continente logró pasar al otro lado y se firmó en el Teatro Colón, el Papa visitará un país en el que los que antes cargaban un fusil se preparan para la vida civil.
El apoyo del Papa Francisco a Colombia y sobre todo al proceso de paz ha sido muy importante. Cabe recordar que el Sumo Pontífice no es solo el máximo representante de la fe católica, también es uno de los latinoamericanos más influyentes, como lo señaló la revista Time.
Además, para el Papa tenían pensando una tarea muy importante: participar en la elección del Tribunal Especial de Paz. Sin embargo, el Vaticano dio un paso al costado por considerar que «sería más apropiado que dicha tarea sea confiada a otras instancias».
Su Santidad ahora vendrá como «mensajero del amor y de la fe. Es forjador de puentes y no de muros. Y eso –puentes, amor y fe– es lo que más necesitamos en Colombia», explicó el presidente Juan Manuel Santos
El Presidente de la República, Juan Manuel Santos , William Giraldo, presidente del CPB y la presidenta del jurado del Premio CPB , María Elvira Arango. Foto CPB
Discurso pronunciado por William Giraldo Ceballos, Presidente del Círculo de Periodistas de Bogotá, en la proclamación y entrega del Premio Nacional de Periodismo CPB 2017.
El panorama del periodismo colombiano podría ser mejor, si al timón se encontraran hoy don Enrique Santos Castillo y don Guillermo Cano Isaza a quienes rendimos homenaje en esta ocasión.
Don Enrique, con el “lápiz mágico” que conocieron sus periodistas centraba la objetividad de las noticias y suprimía adjetivos y párrafos enteros que le sobraran a la veracidad y credibilidad informativa de El Tiempo.
Cerca de 60 años de una jefatura de redacción ejerciendo el periodismo sin escribir noticias ni columnas para no distraer su rigurosa aplicación de la política editorial del diario.
Y a su lado la heroica independencia que le costó la vida hace 30 años, don Guillermo Cano Isaza, quien junto a don Enrique Santos Castillo suscribió el acta de fundación del Círculo de Periodistas de Bogotá en 1945.
La “Libreta de Apuntes” de don Guillermo seguramente se ocuparía hoy del sarampión informativo que, propagado desde las redes sociales, está afectando la credibilidad de los medios periodísticos.
Estamos celebrando el Día del Periodista en medio de inocultables motivos de inquietud gremial.
Esta afirmación no es nueva ni es propia: la prensa ya no es el cuarto poder. Fue reemplazado por el poder financiero que la compró.
Por eso, en parte, en Colombia hay una relativa libertad de prensa.
La publicidad, fundamental para el sostenimiento económico de los medios de comunicación, está concentrada.
Por esa concentración se han venido cerrando medios locales y también quedaron reducidos a pensar con el estomago los reporteros, particularmente en los medios de ciudades intermedias o capitales departamentales.
Un trabajo condicionado al poder político de la comarca. Y en otros casos, a las pistolas que silencian denuncias periodísticas sobre la corrupción local.
De esa manera, pisoteando principios, en muchos lugares del territorio colombiano se ejerce un periodismo adulador, comprometido con el poder local, un periodismo envilecido..
Ejercer el periodismo independiente tampoco tiene cabida y particularmente, en los despachos oficiales.
Al periodista independiente, el que ofrece sus investigaciones a los medios, no se le atiende directamente.
El modernismo informativo, Internet, la multimedia, las redes sociales, rivalizan de mala manera con el periodismo.
Alguien dijo que con un celular o una computadora para acceder a las redes sociales, cualquiera puede ser periodista. Y el cuento se regó como pólvora y lo infectó todo. En los medios se reproducen textos y afirmaciones de las redes como si fueran verdades.
Abundan dirigentes disfrazados de periodistas fabricando falsas noticias en redes sociales y que muchas veces son publicadas en los medios.
El reto para el periodismo es seguir haciendo periodismo. El periodismo consiste en buscar la información, elegir lo que interesa a la gente, indagar, verificar y procesar la noticia.
La credibilidad, la objetividad y la veracidad para el ejercicio periodístico parecen mandadas a recoger: En las primeras lecciones de periodismo se enseñaba que noticia es cuando un hombre muerde a un perro. La semana pasada un noticiero de televisión abrió su emisión del medio día con la noticia de un perro que mordió a un hombre en Medellín.
Hay que preguntarse si será entonces necesario repensar el concepto de la noticia y qué se entiende ahora por periodismo?
Las circunstancias demandan un rescate de la mano de un código de ética para los medios y para los periodistas en el que primen el interés público preciso y confiable; la imparcialidad que respete la diversidad social; independencia frente a los intentos corporativos, políticos y de otros tipos que busquen influir las decisiones editoriales; Integridad para que no haya engaños en la información; y Respeto a la dignidad de las personas y para evitar el sensacionalismo.
Finalmente, señor Presidente, hace cinco años saludamos en el CPB las brisas de paz que llegaban de La Habana.
Hoy la paz está caminando del campo a las ciudades. Es la noticia que los colombianos esperaron durante más de 50 años.
A la paz, que en las primeras semanas redujo las muertes y las mutilaciones de guerra en Colombia, no le queda bien la envidia política. Afuera, sin envidia, en donde el interés por la paz y el factor humanitario son la medida del progreso, se aplaude y respalda la gestión del Presidente Juan Manuel Santos y el baile de la reconciliación entre los antiguos enemigos, acompasados fraternalmente.
Por todas estas razones, reviste la mayor importancia la difícil tarea cumplida por el prejurado y el jurado calificador integrados por reconocidos periodistas, quienes con ponderado juicio decidieron que la paz y el buen periodismo fueran los protagonistas en esta versión del Premio Nacional de Periodismo del Círculo de Periodistas de Bogotá, CPB.
Mauricio Gómez (centro) recibió recientemente el premio Guillermo Cano, del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB), por su labor como cronista e investigador.
Dos recientes premios destacan a periodistas que llevan este apellido sin tener parentesco.
Por: MYRIAM BAUTISTA G. |
Hace unas semanas, el nombre de Mauricio Gómez saltó a las primeras páginas de los periódicos porque fue señalado por sus colegas del Círculo de Periodistas de Bogotá como el profesional merecedor del galardón al Mérito Periodístico Guillermo Cano.
Un premio aplaudido por unanimidad. No podía ser de manera diferente. Se trata de un periodista serio y comprometido hasta los tuétanos con su profesión. Lleva en los medios nacionales más de treinta años, unas veces en la dirección y otras como reportero, pero siempre de cabeza, exprimiendo los temas que se le atraviesan.Uno de los cargos por los que más se le recuerda es el de director del excelente noticiero de televisión 24 horas, en los años ochenta del siglo pasado. En la actualidad, Mauricio Gómez, es reportero, investigador y presentador de serios y documentados informes para el noticiero de televisión CM&, los que denuncian y prueban hechos de corrupción, malversación de fondos o situaciones anómalas, y no logran nada, como el periodista expresó dolido en una reciente entrevista aparecida en este periódico a María Isabel Rueda. También dirige, con buen tino, el interesante magazín de crónicas GPS, que se puede ver todas las noches, de las 7:30 a las 8, por el Canal Uno de la televisión. Mauricio es hijo del asesinado político conservador Álvaro Gómez, que heredó de su padre, Laureano Gómez, el periódico El Siglo, en donde Mauricio comenzó su profesión de periodista, que combina con la de pintor.
También hace algunos días el periódico El País de España informó en su primera página que en los premios de periodismo Rey de España que conceden cada año la Efe, agencia de noticias española, y la Agencia Española de Cooperación Internacional, una periodista colombiana, de RCN, era la ganadora por Mejor Informe de Televisión, en la categoría Periodismo Ambiental y Desarrollo Sostenible. Se trataba de la periodista manizaleña Patricia Gómez, quien repite en este importante reconocimiento internacional. Ya en 1995, junto a Héctor Fabio Cardona y Jorge Enrique Botero, quienes trabajaban en el desaparecido Noticiero buenos días Colombia, fueron escogidos como los mejores en televisión por un informe que daba cuenta de los primeros desplazamientos que se producían en la zona de Tierra Alta, Córdoba, y de la aparición de los nefastos grupos armados paramilitares. La historia, los testimonios y la valerosa reportería de Patricia Gómez, junto al trabajo de análisis de contexto de los periodistas Cardona y Botero, fueron reconocidos por un jurado de colegas internacionales que no dudó en darles el premio por encima de decenas de concursantes de toda el área de América Latina y de España.
Patricia Gómez comenzó su carrera profesional en la cadena radial Todelar, pasó luego como corresponsal de Caracol Radio en Nueva York y ha trabajado en distintos noticieros como jefa de redacción, subdirectora y directora.
En esta oportunidad, Patricia Gómez, Sabina Nicolls y Liliana Bernal fueron premiadas por el informe ‘Plomo: veneno invisible’, en el cual se muestran los problemas que causa la exposición a este metal en la zona de Malambo, Atlántico, así como los tentáculos empresariales detrás de este negocio. Les llevó más de cinco meses de trabajo.
Patricia Gómez y sus compañeras recibirán el premio a finales de este mes, en una ceremonia que se llevará a cabo en el Palacio de la Zarzuela, en Madrid, y que será presidida por el rey de España y su esposa.
Parecía mera coincidencia que estos dos comunicadores premiados tuvieran el mismo apellido. Sin embargo, la lista de Gómez periodistas es larga, nutrida y muy reconocida. Mauricio y Patricia no son los únicos Gómez galardonados.
Ignacio Gómez, bogotano y subdirector del informativo Noticias Uno, ha ganado muchos reconocimientos por sus profundas y temerarias investigaciones no solo en televisión, sino en los años ochenta en el periódico El Espectador.
Ha sido amenazado en distintas oportunidades, por lo que ha tenido que salir del país. También su casa ha sido asaltada para robar información que acopiaba en desarrollo de esos trabajos en los que indaga con meticulosidad y desenreda madejas enmarañadas.
Gloria Cecilia Gómez, antioqueña de nacimiento pero bogotana por adopción, ha trabajado en distintos medios y se especializó en los años 80 en redacción económica en el Noticiero 24 horas. En los últimos años ha sido versátil, inteligente y amena conductora de la franja mañanera en Citytv, así como conductora en programas de entrevistas en los que descubre, con gran sentido del humor, facetas ocultas de personajes públicos. Suma varios premios en su trayectoria.
Beatriz Gómez, manizaleña, fue seria y recursiva presentadora de noticieros de televisión, así como directora y conductora de programas de opinión. Varias veces ganó el premio India Catalina a la mejor presentadora de televisión.
Jairo Gómez trabaja en el Canal del Senado y escribe una columna, muy vista y comentada, en Semana.com. Su trayectoria es larga y nutrida, como que estuvo varios años en Caracol Radio, en el Noticiero de las Siete, fue director del Canal Capital y de la emisora de radio de la Universidad Nacional. También ha recibido premios por su trabajo.
Gustavo Gómez comenzó con el pie derecho como reportero raso en Caracol Radio con Darío Arizmendi. En poco tiempo fue ganando audiencia por sus respetuosos, inteligentes y empáticos comentarios con fuente y oyentes. Poco a poco escaló hasta convertirse en coequipero del veterano Darío y hoy es el director y conductor de La luciérnaga. Ya forma parte de las ligas mayores.
Fernando Gómez ha sido columnista de arte, encargado de la sección cultural en diferentes medios y en la actualidad es director de la revista de entrevistas Bocas y de Donjuán, ambas de este periódico. Su creatividad, ingenio, arrojo y disciplina destacan entre sus cualidades personales y profesionales. Ha recibido varios premios Simón Bolívar.
Y ahí no paran los Gómez. La antioqueña Ana Mercedes Gómez fue durante años directora de El Colombiano, el periódico más importante de la región antioqueña, del que ella y su familia son propietarios.
El bogotano Hernando Gómez Buendía fue el creador y actual editor del leído portal de internet Razón Pública. Ha sido columnista de importantes medios escritos y analista político y económico sobresaliente.
Escritores y poetas
Y para no quedarnos en este inventario de los Gómez solo con los nombres de aquellos que trabajan en el mundo periodístico, no se podría hablar de quienes llevan este apellido sin mencionar a uno de los más importantes escritores colombianos, el antioqueño Francisco Gómez, más conocido como Efe Gómez. Este año se cumplen 150 años de su nacimiento. Con una obra pequeña ha trascendido como uno de los más notables escritores de comienzos del siglo pasado y uno de los más destacados integrantes de la bohemia de la capital antioqueña de los años treinta.
Efe Gómez se caracterizó por escribir cuentos en los que desarrolló conflictos psicológicos y dramáticos de sus personajes. Su única novela, Mi gente, sigue leyéndose y cuenta con una nutrida y selecta colectividad de seguidores, que reeditan sus cuentos y se encargan de darlo a conocer.
Y si de seguidores se trata, ninguno como el poeta Raúl Gómez Jattin, que tiene a su alrededor un fuerte grupo de admiradores que lo recitan día de por medio y admiran su poesía por encima de la de cualquiera de las decenas de poetas nacionales. Vale la pena transcribir dos de sus más leídas definiciones sobre su persona y su poesía, transcritas en la cubierta del libro de Heriberto Fiorillo Arde Raúl. “Estuve loco en el buen y mal sentido de la palabra. En el mal sentido, porque la locura no pudo impedir que me llevaran a las clínicas siquiátricas; en el buen sentido, porque la locura me permitió ser artista. La locura deja llegar a niveles de profundización del alma humana. Es una forma de ser en fantasía. Lo dije de otro modo: No estaba en la locura. Estaba en la metáfora, de manera consciente (…). Desde niño soñé tener una existencia dedicada al arte, ser escritor y hombre de teatro, y lo conseguí a costa de mi propia vida. La he inmolado ante el altar de la belleza. El que quiera ser poeta tiene que estar dispuesto a sacrificar su existencia. La poesía es algo más que un destino literario y le exigirá todo a cambio de un grano de placer”.
Y como para que los Gómez, cuyo inventario no se acaba aquí porque faltan datos de otros municipios, se ufanen aún más de que por sus venas fluye no solo sangre periodística, literaria, poética sino también musical, cómo no citar a la pianista Teresita Gómez, que acaba de celebrar 60 años tocando con maestría el piano en los escenarios de los más importantes teatros nacionales y algunos internacionales, con un bello y emocionante concierto en el Teatro Colón de Bogotá.
La tasa de desempleo bajó una décima y quedó en el 4,7 % en febrero. La estadística había alcanzado un máximo de 10% en 2009, después de la crisis financiera
La tasa de desempleo se redujo a 4,7% en un mes en el que la economía creó un total de 235.000 nuevos empleos, informó hoy el Departamento de Trabajo.
En su informe, el Gobierno revisó al alza la cifra de nuevos empleos generados en enero desde el cálculo inicial de 227.000 a 238.000.
El año pasado la economía promedió cerca de 190.000 nuevos trabajos por mes. La economía está mostrando otros signos de fortaleza: la confianza de los consumidores y las empresas es alta y las acciones están en niveles récord.
El crecimiento de los salarios siguió mostrando signos de progreso después de persistir a un ritmo lento por años hasta 2016. Los sueldos crecieron un 2,8% en febrero en comparación con hace un año.
Estas sólidas cifras despejan el camino para que la Reserva Federal eleve las tasas de interés la próxima semana. Líderes de la Fed, como la presidente Janet Yellen, dijo que una subida de tasas en marzo sería apropiada si la economía se mantiene en el buen camino.
Los afiches habrían sido contratados con la compañía Impressa Group Corp.
Fiscalía indaga por un contrato de 400 mil dólares pagados en Panamá. Esta es la historia.
Las autoridades acaban de abrir una nueva línea de investigación dentro de los supuestos pagos que la multinacional Odebrecht habría realizado a campañas presidenciales en Colombia.
Además de que se revise si se cancelaron gastos del estratega ‘Duda’ Mendonça para la campaña de Óscar Iván Zuluaga en el 2014, y una encuesta para, según la Fiscalía, intentar acercarse al gobierno del presidente Juan Manuel Santos (también del 2014), que la multinacional contrató por un millón de dólares con la sociedad panameña Paddington, vinculada a la reconocida firma de publicidad Sancho BBDO, hay un nuevo rastro.
Se trata del supuesto pago de 400 mil dólares que habría realizado Odebrecht para afiches relacionados con la campaña a la presidencia de Santos en el 2010.
La Fiscalía trata de establecer si son ciertas las versiones según las cuales los afiches fueron contratados con la compañía Impressa Group Corp, constituida en Panamá a nombre de María Fernanda Valencia Falquez y Felix Otto Rodríguez Plata.
De hecho, desde principios de semana, el propio fiscal Néstor Humberto Martínez anunció que ya fueron citados a diligencia Rodríguez y Valencia. Esta última fue candidata a la Cámara de Representantes por el Partido de la U en el 2010. Luego fue directora de Artesanías de Colombia.
Este viernes, ‘La W radio’ afirmó que Valencia había aceptado que su empresa sí tenía un contrato para la realización de esos afiches.
Según lo que confirmó Valencia, Odebrecht le mandó a hacer los afiches a Impressa Group Corp. El valor del contrato fue, en efecto, de 400 mil dólares e incluyó la realización de 2 millones de afiches.
Valencia le dijo a ‘La W radio’ que no encontró nada sospechoso en ese negocio porque para ellos era como si «los contratara cualquier empresa grande».
Hasta ahora se sabe que Impressa Group fue constituida en Ciudad de Panamá el 10 de junio de 2010, año en el que supuestamente Odebrecht hizo el pago para los afiches y cuando arrancó el tramo final de la contienda electoral. La empresa hace parte del paquete de compañías ‘offshore’ que abrió la polémica firma Mossack Fonseca.
Según registros en Panamá consultados por EL TIEMPO, la dirección que registró la empresa es la carrera 34 # 13-90 en Bogotá, que corresponde a una bodega en donde funciona desde 1982 la empresa Indagraf Impresores SAS, dedicada a actividades de impresión y a la fabricación de artículos de papel y cartón.
El fundador y representante legal de esta segunda firma también es Felix Otto Rodríguez, la fundó el 24 de junio de 1982. La firma en Panamá fue cerrada el 16 de julio del 2014, y la de Colombia sigue funcionando.
EL TIEMPO revisó las cuentas de campaña de Santos 2014, las únicas disponibles en el Consejo Nacional Electoral, y ninguna de estas dos empresas aparecen como proveedoras.
Valencia ya le mandó una carta al fiscal Martínez el 7 de marzo poniéndose a disposición de su despacho para aclarar cualquier episodio. Al respecto, lo que se quiere establecer es si hubo o no el pago por parte de la multinacional, si existe contrato de la transacción, si se elaboraron o no los afiches, y si funcionarios de la campaña de Santos estuvieron enterados de la supuesta elaboración de los mismos.
Jully Andrea Mora, premio Mujer Cafam 2017, es presidenta de la Asociación de Pescadores del corregimiento El Pedral. Daniel Alvarez.
Por: Maria Paula Rubiano
Desde los 15 años, Jully Andrea Mora tiene una misión: proteger al río Sogamoso, que corre a orillas de su casa en Puerto Wilches (Santander), y dignificar el trabajo de los pescadores en su departamento.
Cuando la central de generación de energía Hidrosogamoso comenzó a operar a orillas del río Sogamoso, los pescadores del corregimiento El Pedral, en Puerto Wilches (Santander), juraron que el río que compartían con la hidroeléctrica se había cansado y que jamás verían peces de nuevo. Jully Andrea Mora, en ese entonces de 20 años, decidió que había que hacer algo para recuperar el río.
Como presidenta de la Asociación de Pescadores del corregimiento El Pedral (Asoped) y como gestora cultural de la Asociación de Pescadores Artesanales y Agricultores del Magdalena Medio, tocó las puertas de Hidrosogamoso y logró concertar con ellos un plan para descontaminar el río.
El plan consistía en educación ambiental con la comunidad, jornadas de formación con los niños y barridas sanitarias para limpiar el río y sus puertos. No fue fácil. Jully Mora recuerda que la gente tenía la creencia arraigada de que el río todo se lo lleva. Recuerda que a veces no les abrían la puerta al grupo de cuatro o cinco pescadores que, de casa en casa, iban explicando lo importante que era no echar la basura al río.
“Había quienes nos tiraban la puerta en la cara, quienes nos hacían esperar 20 minutos en la puerta. En algunas casas nos decían ‘ay, ya sabemos a qué vienen, a hablarnos de las basuras del río’. Y a nosotros no nos importaba, les volvíamos a repetir”, cuenta. Al final la gente entendió, dice. Y eso, sumado a que “tanto el pescador como el pescado se habían adaptado al nuevo río”, permitió que la vida del pueblo siguiera con el curso apacible de otros años.
Por ese esfuerzo, Jully Andrea Mora fue premiada como la Mujer Cafam 2017. El reconocimiento se le otorgó, además, por su esfuerzo para incluir a las mujeres en las actividades pesqueras que proveen el sustento alimenticio a los 2.000 habitantes del corregimiento donde ella nació hace 22 años.
De hecho, a pesar de estar bañados por el río Sogamoso y estar separados por 40 minutos en carro de la desembocadura del mismo en el Magdalena, la relación de las mujeres con el río es mucho más distante que la de los hombres. Jully Mora dice que desde que tiene memoria, sus cinco hermanos se bañaron en el río y salieron con sus padres a faenas de pesca. Ella y sus tres hermanas, en cambio, debían resignarse a mirarlo desde la orilla.
Luego cumplió 12 años y el caudal del río bajó tanto que el agua llegaba cristalina. Su papá la dejó sumergirse. Caminó hasta la mitad de la cuenca, algo impensable en otras épocas. Ese es su primer recuerdo del río. “Son esos recuerdos bonitos que te hacen amar tu historia”.
En su discurso de aceptación del premio dijo que ser gente de río es como haber sido bendecido. Al preguntarle por qué, explica que para ella es una bendición “poder estar tan cerca de lo natural, saber que tienes un recurso que hoy en día se está acabando y que hay un afán por recuperarlo. Es una bendición saber que, sin importar el momento, el pescador siempre podrá decir: ‘al menos para comer’”.
Su interés por el río fue tan evidente que a los 15 años una líder de la comunidad llamada Yorlen Martínez, empezó a invitarla a las reuniones de la Asociación de Pescadores del Corregimiento El Pedral (Asoped). Sobre todo, la impresionaron las historias de los pescadores más viejos. “Sea con sol, con lluvia, con insectos o sin ellos, el pescador está ahí, firme, haciendo su labor”, dice.
Le dolió, además, escuchar los sueños de los pescadores, quienes, sin embargo, parecían ser invisibles para el país. Lo más difícil de ser pescador artesanal en este país, dice, es que no hay una sola ley que los proteja, los regule y les permita subsistir dignamente, ni que reconozca el papel que pueden llegar a ocupar en la producción sostenible de alimentos.
Dos años más tarde, cuando ya se había graduado del colegio y ya había terminado una técnica laboral por competencias en Seguridad de la Industria del Petróleo del ITP en Barrancabermeja, se unió de manera formal a Asoped. Tres meses más tarde, los hombres la escogieron como su presidenta.
“Fue un voto de confianza. Los pescadores la mayoría varones, son muy jóvenes. El pescador tiende a ser machista, cree que la mujer debe quedarse en la casa. Pero cuando las mujeres demostramos que teníamos ideas muy buenas y que merecíamos ser escuchadas, se logró el cambio”, explica.
Ese cargo fue el que le permitió convertirse en gestora cultural de la Asociación de Pescadores Artesanales y Agricultores del Magdalena Medio (Asopesamm), que actualmente trabaja con 1.200 pescadores de nueve asociaciones de Puerto Wilches (Santander). Jully Mora añade con orgullo que cinco de esas asociaciones cuentan con 25 mujeres líderes.
Dice que este es apenas el primer “granito de arena” que ella le aportará a su asociación. Espera continuar con las jornadas de descontaminación del río y con la educación para los niños y jóvenes del municipio sobre él –creó unas escuelas en donde los pescadores más viejos les transmiten su conocimiento a los menores–. Además, quiere capacitar a las mujeres que conviven con ella en asuntos como equidad de género y que conozcan los derechos que las protegen por ley.
No le teme al regreso de los exguerrilleros a la vida civil. Sabe que los nuevos campesinos podrían generar una sobreexplotación sobre el afluente, pero está convencida de que una vez más podrán “convertir una crisis en una oportunidad”. Está convencida de que la generosidad del río alcanza para todos. Y como no estarlo, si a ella se lo ha dado todo.
Los servicios propuestos entran a una fase de análisis liderada por expertos.
Reconstrucción mamaria con prótesis y el diazepam para preclampsia en el embarazo, entre ellos.
El Ministerio de Salud dio a conocer la lista de los primeros 10 servicios nominados para quedar excluidos de los beneficios del sistema de salud, de acuerdo con el proceso que estableció la ley estatutaria de la salud, que entró en vigencia el mes pasado.
Esta primera entrega (consúltela aquí) fue elaborada con elementos que cumplen con, al menos, uno de los principios de exclusión que, para el efecto, determinó la Ley Estatutaria de Salud (1751 de 2015): lo cosmético, lo que no tiene evidencia o aprobación de las autoridades y lo que estando en el país se ofrezca fuera del territorio nacional.
En el listado se encuentran algunos medicamentos como la teofilina, como método de tratamiento de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica; el diazepam y la fenitoina, para preeclampsia en el embarazo.
También están procedimientos como la reconstrucción mamaria con prótesis para pacientes que hayan recibido radioterapia postmastectomía, pues, según le dijo Olinda Gutiérrez, subdirectora de beneficios en aseguramiento del Ministerio de Salud –quien presentó la lista- a ‘RCN Radio’, puede causar complicaciones, según la evidencia.
Asimismo, terapias que no hacen parte del enfoque de análisis conductual aplicado (ABA, por sus siglas en Inglés), usado en niños y niñas con trastornos del espectro autista, como las intervenciones con agentes quelantes, con cámaras hiperbáricas, inyecciones de secretina, suplementos vitamínicos, estimulación magnética transcraneal, integración sensorial, las llamadas musicoterapia y aromaterapia y el o trabajo con animales como perros, delfines y caballos.
Cabe aclarar que los servicios propuestos para ser excluidos tienen vinculación directa a un tratamiento en específico. Es decir, el Diazepam, por ejemplo, quedaría excluido solo para los casos de hipertensión en el embarazo y no para la epilepsia y otros cuadros de tipo neurológico, su principal uso.
El próximo 31 de marzo vence el plazo para que todos los actores del sistema postulen los servicios que deben quedar sin cobertura. Luego, las nominaciones solo se podrán hacer dentro de dos periodos: en enero y febrero y en junio y julio de cada año.
Desde el Ministerio de Salud explican, no obstante, que estos componentes no están aún por fuera del sistema, sino que entran a un proceso público compuesto por cuatro fases, la primera de ellas la de nominaciones.
Luego viene la segunda fase, llamada por el Ministerio como “de análisis técnico científico”, que estará a cargo del Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud (IETS) y diversos expertos independientes de alto nivel, que podrán hacer las recomendaciones respectivas, compartidas previamente con un grupo de análisis conformado por asociaciones de profesionales de la salud, las federaciones de profesionales de la salud, la Academia Nacional de Medicina, la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina (Ascofame), las asociaciones de las EPS y las IPS y el Ministerio de Salud.
El proceso, si sigue adelante, entra en la tercera fase “de consulta a pacientes potencialmente afectados y a la ciudadanía”, en la que podrán intervenir, entre otras, las veedurías ciudadanas en salud y la Defensoría del Pueblo a fin de garantizar la transparencia.
La última fase es la de “remisión del concepto técnico científico y de la recomendación”. En esta el Ministerio de Salud recibirá los resultados del proceso y lo dicho por el grupo de análisis científico, que deberán publicarse en la web del mecanismo.
Mientras no quede en firme cualquier exclusión, las personas que requieran alguno de estos servicios pueden seguir recibiéndolos.