Circulo de Periodistas de Bogota
Presidente Santos anuncia medidas por asesinatos de líderes sociales

Foto: Juan Pablo Bello / EFE /El presidente Juan Manuel Santos.


Habrá consejos de seguridad en los municipios más afectados. Fiscalía iniciará investigaciones.


El presidente Juan Manuel Santos anunció este martes las medidas por la serie de asesinatos hacia líderes sociales
que se han presentado en los últimos meses.

Según el mandatario, estos hechos muestran la fragilidad del cese del fuego con las Farc y la necesidad de implementar el acuerdo de paz.

 

«Esta incertidumbre va aumentando los riesgos y por eso la urgencia de tomar las decisiones. Es urgente pasar a la siguiente fase: el agrupamiento de las Farc en las zonas veredales de transición. ¿Para qué? para garantizar el cese del fuego y dar también las garantías a todos los ciudadanos», precisó Santos.

 

El Presidente afirmó que ordenó intensificar la implementación de las medidas del cese del fuego, en especial, en las zonas más afectadas por el conflicto. 

«La Fiscalía está acelerando su labor investigativa para esclarecer cada uno de los casos y determinar quiénes fueron los responsables», indicó Santos. 

Así mismo, Santos anunció que le pidió la Unidad de Protección de Personas que se reúna para examinar la situación de seguridad y para priorizar los esquemas para ver quiénes realmente tienen riesgo.

Además, miembros del Gobierno y la Fiscalía se reunirán semanalmente en consejos de seguridad en los municipios que están siendo más afectados.

«Es importante que se reúnan estos consejos con los respectivos alcaldes para hacer seguimiento a la situación», precisó Santos.

Agregó que convocará a una reunión de seguridad con los Gobernadores de los departamentos más afectados como Cauca, Nariño, Caquetá, Meta y Norte de Santander.

Las declaraciones de Santos se da tras una reunión con el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien además encabeza la comisión de alto nivel encargada de analizar la crisis por estos asesinatos, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, representantes de la Policía, entre otros.

El hecho violento más reciente contra un líder social en el Cauca se registró en la noche del 19 de octubre en Corinto. Ese día, desconocidos tocaron la puerta de la casa de Esnéider González, integrante de la Asociación de Víctimas Arte, Paz y Vida (Arpasavi), y cuando él abrió le dispararon a quemarropa y huyeron con rumbo desconocido. González logró resistir ante las heridas y se recuperó en una clínica de Cali.

(Además: Preocupación por líderes sociales asesinados en Meta y Caquetá)

Tres días antes, el 16 de octubre, en el municipio de La Sierra, sur del departamento, a plena luz del día, sicarios ultimaron a Yímer Chávez Rivera, integrante de la Organización para el Desarrollo Urbano y Campesino (Ordeurca).

Para diversos sectores sociales, estos asesinatos podrían torpedear la implementación del acuerdo de paz alcanzado con las Farc el pasado 12 de noviembre.

Tomado de: ELTIEMPO.COM

Investigadores chinos descubren un virus que detiene el crecimiento del cáncer

Un grupo de científicos chinos ha descubierto un virus conocido como M1 que impide el crecimiento de células cancerosas sin perjudicar a las normales, lo cual abre la posibilidad de desarrollar tratamientos contra el cáncer en el futuro.

La agencia de noticias china Xinhua informó que un grupo de científicos de ese país descubrieron un virus conocido como M1 después de extraerlo de unos mosquitos tropicales de la provincia insular de Hainan, en el sur de China. Los hallazgos indican que el M1 impide la expansión de las células cancerosas sin causar daño a las sanas. El equipo de investigadores estuvo encabezado por Yan Guangmei, profesor de la Facultad de Medicina en la Universidad de Sun Yat-Sen.

Las primeras pruebas en animales en las que se aplicó el M1 indican que el virus funciona de manera exitosa sobre las células cancerosas que afectan al hígado, colon, vejiga y recto, agrega la agencia.

Los hallazgos obtenidos por la investigación fueron publicados en la edición del mes de octubre de la revista ‘Proceedings of the National Academy of Science of the United States of America’ (‘actas de la Academia Nacional de Ciencias de EE.UU.’).

El cáncer se ha convertido en una de las principales amenazas para la salud en China debido al acelerado deterioro del medio ambiente y los estilos de vida poco saludables, lo cual provoca que cada año mueran de esa enfermedad alrededor de 2,5 millones de personas —lo que equivale a la población total de Kuwait— y se detecten 3,5 millones de nuevos casos.

Tomado de: RT SEPA MÁS

¿Hasta cuándo vamos a seguir mendigando la salud en Colombia?

Foto: Archivo particular

En Colombia, los servicios de salud no se están contratando por calidad, sino por tarifa.

Los casos de un adulto de Medellín y un niño de Cartagena son una muestra de la triste realidad.

Por:  JUAN GOSSAÍN |

Aquí estoy, otra vez, con mi cantaleta sobre el sistema colombiano de salud. Ustedes perdonen, pero es que la situación, lejos de mejorar, se pone cada día peor.

De grandes ciudades, pueblos perdidos y caminos vecinales me llegan cartas manuscritas, mensajes electrónicos o simples recados de boca en boca, a través de ‘radio bemba’, como dicen en el Caribe. La gente, desamparada, busca con desesperación que alguien le ayude. Y mi obligación moral consiste en oírlos, porque, como ya he dicho mil veces, un periodista no es más que la voz de los que no tienen voz.

A manera de pequeño ejemplo, y para que ustedes midan el tamaño que ha cogido este problema, entresaqué dos de los muchos casos que me llegan: el de un adulto de Medellín y un niño de Cartagena. Son paradigmas. Apenas un par de muestras de la triste realidad que se repite diariamente a todo lo ancho y largo de Colombia. Y a lo profundo, también.

El niño sordo

Tiene la mala suerte de ser un buen estudiante. Así como lo oyen. Pero él no puede oírlo porque nació sordo.
Se llama José Gabriel, tiene nueve años y vive con su madre y sus tres hermanitas en un barrio popular de Cartagena. Cuando apenas había cumplido cuatro meses, le descubrieron que tenía una deficiencia auditiva y que, con el paso del tiempo, se quedaría completamente sordo. Como su madre había tenido el cuidado de afiliarlo a una empresa prestadora de salud, las famosas EPS, le pusieron un implante coclear. Dicho en términos sencillos, se trata de un pequeño dispositivo electrónico que se instala en la cabeza, a través de una cirugía, para que los sordos puedan escuchar.

Con grandes esfuerzos, y una disciplina admirable, José Gabriel se convirtió en un excelente estudiante al que le encantaban la actividad escolar, la compañía de sus amigos, las clases de historia, los juegos y recreos.

Pero su doloroso camino hacia el calvario comenzó hace más de un año. Todavía lleva la cruz a cuestas.

Como suele suceder con esa clase de aparatos, después de siete años de uso las piezas externas del implante se fueron gastando, deteriorando, sucumbiendo a la humedad del ambiente. Eso es normal. Lo anormal, en cambio, es la historia que empezó a continuación.

De Herodes a Pilatos

Su madre, que se llama Zenith Benítez, fue hasta las oficinas de la Nueva EPS y allí le dieron una cita con la doctora especialista, que examinó al niño y, de inmediato, ordenó por escrito que se procediera a renovarle el implante electrónico.

En la EPS nunca cumplieron la orden médica. Como si fuera poco, también le suspendieron al niño las terapias de rehabilitación que venía recibiendo. El segundo médico que atendió a José Gabriel le dijo a la madre, con una franqueza demoledora, “que él no se atrevía a ordenar la renovación del aparato porque eso es muy caro y se ganaba un problema con la EPS. Me aconsejó que mejor hablara con ellos directamente”.

Zenith lo hizo, pero entonces le respondieron con un peloteo: le dijeron que el doctor era el único que podía dar esa orden y el doctor decía que era la EPS. La estaban zarandeando de Herodes a Pilatos y de Pilatos a Herodes, pero ella no se dio por vencida y volvió adonde el médico. Lo hizo dos, tres, cuatro veces más. Nunca le dieron la nueva orden por escrito.

Espera y desesperanza

Fue entonces cuando la madre, que es una mujer luchadora y resuelta, resolvió contarle la historia completa al diario cartagenero El Universal.

Una vez aparecida la noticia, de la EPS la llamaron para decirle que debía viajar de inmediato con su hijo a Barranquilla, donde los estaban esperando para resolverles el problema. Ambos volvieron a sonreír, se pusieron sus mejores atuendos y marcharon contentos. Al llegar a Barranquilla, les dijeron de manera brutal: “Ustedes no tienen cita aquí”. Y se negaron a atenderlos.

Al regresar a Cartagena, Zenith fue a las oficinas de la EPS, encaró a la propia administradora de la empresa y le hizo esta pregunta:

–Usted no es madre, ¿verdad?

Ahora tengo oportunidad de hablar con ella y me cuenta que hace un mes le llegó un mensaje a su celular, en el que la EPS le mandaba decir que ya habían aprobado el nuevo implante. Que aguardara instrucciones.

–A partir de ese momento –dice– dejaron de contestar mis llamadas. Todavía estamos esperando el aparato.

Un mar de lágrimas

El niño no ha podido volver al colegio desde enero. Su madre, estremecida, con una mezcla de indignación y de dolor, me describe la escena que ocurre en su casa desde entonces, cada mañana, de lunes a viernes, cuando despunta el día.

José Gabriel es el primero que se levanta. Se baña, se viste por sus propios medios, agarra el bolso de estudiante, cargado de cuadernos y lápices, como si fuera una ceremonia sagrada para asistir a la escuela, y se sienta en la puerta de la calle. Cuando sus hermanas salen, rumbo al colegio, empieza a llorar en silencio, viéndolas alejarse.

–Al principio yo me sentaba a su lado para consolarlo– confiesa la madre–. Pero ahora somos dos los que nos sentamos a llorar…

En Medellín

Ocurrió hace cuatro meses, el viernes 22 de julio, cuando eran las tres de la tarde. Mientras José Gabriel y su mamá andaban por Cartagena tocando de puerta en puerta, en busca de una solución para la sordera, en Medellín el señor Carlos Pizarro Díaz, que también estaba al día con su seguro de salud, fue internado en la antigua Clínica Saludcoop de la 80. Estaba a punto de cumplir 74 años.

Allí le diagnosticaron cálculos en la vesícula y le aplicaron medicamentos para eso. Aunque parezca insólito, los responsables de la clínica se excusaron diciendo que no disponían de los elementos quirúrgicos necesarios para operarlo.

Pasaron tres días más. Solo el lunes 25 descubrieron que, en realidad, se trataba de un ataque agudo que le reventó el apéndice. Entonces lo llevaron al quirófano, de urgencia, pero ya la peritonitis había avanzado tanto que le afectó los órganos internos: el hígado, los pulmones, el intestino.

Como si al pobre señor Pizarro le faltaran más desgracias, en la sala de cirugía agarró una severa invasión de bacterias. En medio de tantos infortunios, murió el 9 de agosto.

Demanda y costos

Su hermano Gonzalo Pizarro me escribe para explicar que, ante esos hechos, la familia resolvió entablar una demanda penal “porque consideramos que hubo negligencia profesional desde el momento de su ingreso, ya que no fue diagnosticado ni tratado correctamente: no era la vesícula, era una apendicitis que se volvió peritonitis, y cuando por fin lo atendieron, ya era demasiado tarde”.

Como ustedes lo saben, porque se ha informado ampliamente, el Estado colombiano intervino a Saludcoop por malos manejos. Desde ese día, la EPS completa, incluyendo sus clínicas, está en poder del Gobierno. Entonces salgo a buscar gente que conozca el tema para que me explique qué es lo que está pasando.

–La verdad es que en Colombia los servicios de salud no se están contratando por calidad, sino por tarifa. Es decir: a la baja –me responde uno de ellos–. No gana el mejor, sino el que cobre más barato.

En ese momento hago una pregunta que parece obvia: ¿y no hay autoridades que midan y califiquen la calidad de los servicios?

–Ay, mijito –me contesta otro, con un tono burlón, como si yo fuera el idiota más ingenuo del mundo–. El principal objetivo de nuestro sistema de salud no es el paciente, sino el dinero. Eso lo deciden la cantidad de intereses económicos que hay en el tema.

Sin controles

Por aterradora que sea, la verdad es esa: los controles a la calidad de los servicios de salud no están operando. Y no solo en el ámbito nacional sino, incluso, en las regiones.

En cada municipio o departamento, las leyes les confieren a las secretarías de salud las mismas facultades de inspección y vigilancia que tiene la Superintendencia de Salud en todo el país. Nada de eso se está cumpliendo.

Las propias EPS tampoco controlan la calidad ni la seguridad de los servicios que ellas mismas contratan. Solo los precios. Todo eso significa, simplemente, que contratan siempre lo más barato. Y, en consecuencia, el nivel de atención al paciente sigue bajando.

Sin embargo, el Estado y las EPS se llenan la boca diciendo que, en este momento, hay 46’210.000 colombianos afiliados al sistema de salud.

Es verdad. Es casi el país entero. Es el 96 por ciento de la población, nada menos. Pero es que el problema no es de cantidad, sino de calidad. No es tanto afiliarlos, sino atenderlos. Y atenderlos bien. Por lo menos a tiempo.

Epílogo

–Casos como este debe haber por cientos –me dice una experta cuando revisamos la hoja clínica del señor Pizarro–. Personas llenas de vida entran a cirugías elementales y salen muertas.

Lo más triste de estas historias es eso: que no se trata de casos excepcionales o aislados. Ni mucho menos. Quién sabe cuántos niños como José Gabriel andan por ahí, en calles y caminos, en barrios y escuelas, mendigando un servicio médico al cual tienen todo el derecho, porque para eso están pagando su afiliación. No es un favor, es un derecho. Y quién sabe cuántos adultos más, como Carlos Pizarro Díaz, han muerto por culpa de la indolencia, que causa peores estragos que el cáncer.

JUAN GOSSAÍN
Especial para EL TIEMPO

A Macayepo retornó la esperanza
Las comunidades de los Montes de María, que han padecido la guerra en carne propia, se relacionan ahora en la convivencia y la reconciliación.
Unidad de Tierras

Se entregaron 60 sentencias de restitución

En los Montes de María, zona duramente golpeada por el conflicto, se respira optimismo.

Por:Lorena Arboleda Zárate/ @lorenaarboleda8 

o soy un buen colombiano que quiero mucho a mi tierra, quiero que acabe la guerra y no mueran más mis paisanos”. Con estas recitadas palabras, uno de los pobladores del corregimiento de Macayepo, jurisdicción de El Carmen de Bolívar, sur de Bolívar, clama con su canto que el conflicto armado pase a la historia. Pero los rastros de la violencia no se pueden borrar por más acuerdo de paz que haya. Apenas a unos metros de donde él declama hay un árbol junto al cual, años atrás, los grupos armados perpetraron masacres selectivas.

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Aunque la situación es diferente hoy, las cenizas permanecen y, tal vez por eso, lo primero que se apresuran a defender sus habitantes son las tierras fértiles que les han permitido sobrevivir en medio de los innegables contrastes entre riqueza y pobreza que hay en todo el departamento de Bolívar, empezando por Cartagena, su capital.

Ayer, justamente, la Unidad de Tierras del Ministerio de Agriculturaestuvo en Macayepo entregando 60 sentencias a líderes de las comunidades que conforman los Montes de María y que resultaron favorecidas con la política de restitución. Son terrenos que, aunque suyos, tuvieron que abandonar por cuenta de la guerra y la presencia intimidante de las Farc, el Eln y el bloque Héroes de los Montes de María de las Autodefensas.

De hecho, este último actor contribuyó a azotar con más violencia una región que ya suma más de medio centenar de masacres. En octubre del año 2000, 15 campesinos fueron asesinados en Macayepo y, debido al temor, varios pobladores se vieron obligados a desplazarse de sus tierras. Incluso, un exsenador, Álvaro García Romero, estuvo involucrado en los hechos como uno de los autores intelectuales de la masacre y hoy está condenado a 40 años de prisión.

Ciertamente, negar la ausencia del Estado en la zona es pretender tapar el sol con un dedo, como lo ratificó a El Espectador el director de la Unidad de Restitución de Tierras, Ricardo Sabogal. Así que “se debe llegar con desarrollo rural, y eso significa entregar proyectos productivos, vivienda digna y vías de acceso para que la gente pueda sacar sus productos”, dijo ante unos 300 campesinos reunidos en la cancha de fútbol del corregimiento, recordando que el reciente acuerdo de paz logrado con las Farc en La Habana obliga a poner los ojos sobre el campo, una lucha que desde hace décadas viene reclamando con marchas la región de Montes de María.

Por eso, la inversión en proyectos productivos en Bolívar por parte de la Unidad de Tierras asciende a más de $5.000 millones, para atender las solicitudes de 238 familias asentadas en 19 municipios del departamento (siete en Montes de María y 12 en la zona norte). El Carmen de Bolívar, por ejemplo, es el segundo municipio del país con mayor número de solicitudes de restitución, después del registro que se tiene de los municipios de Antioquia como primer departamento solicitante en Colombia.

Sin embargo, de acuerdo con Julio César Bolaño, que ha sido víctima directa de la guerra, todavía quedan varias cosas pendientes. Empezando por hacer efectivo el primer punto de la agenda de negociaciones de paz: la reforma agraria integral. “Todavía no sé si le creo al proceso de paz, porque quiero que nos den más libertad sobre el campo”, dice. Libertad que, pese a todo, no se dejó arrebatar hace varios años cuando la guerrilla (no sabe si las Farc o el Eln) asesinó a dos de sus 10 hijos, uno de 19 y el otro de 21 años.

Aunque por recomendación de la Cruz Roja, cuenta, accedió a abandonar sus tierras e irse a Sincelejo, decidió regresar. “Yo soy un hombre de campo y no podía quedarme quieto”. Ahora siembra arroz, yuca, ñame y maíz. En estas tierras fértiles también se produce plátano, aguacate y ají. “Mi tierra es esta, y si me toca morir, que muera acá”, apunta Bolaño, convencido de que hoy la forma de relacionarse con la comunidad es más tranquila.

En Alta Montaña, de la que hacen parte los corregimientos de Macayepo, Hondible, Jojacinto, Lázaro, Tierra Grata, Loma Central y Saltones de Mesa, ya se contabilizan 200 hectáreas restituidas en 60 predios, como parte de un primer acuerdo que se logró en 2013, luego de que la comunidad se manifestara para exigir al Estado la atención integral a las víctimas del conflicto armado.

Testigo de ello es Luz Marina Quintana, también víctima. Por cuenta de la guerra, tuvo que aceptar la ausencia de su marido, importante líder en Montes de María, por lo que fue tildado de guerrillero por el Ejército. “Ellos venían todos los días a preguntar por mi esposo. Al final, se dieron cuenta de que no estaba en la casa y dejaron de venir. Pero la gente me decía que me fuera porque me iban a matar”, cuenta con un tono algo más optimista, luego de recibir el título que confirma que es la dueña de 18 hectáreas en el corregimiento de Lázaro. Ya no extraña a su marido, que hoy está en Cundinamarca. Sólo espera que, con lo que producen sus tierras, pueda ayudar al menor de sus hijos, que vive en Bogotá, para que acabe sus estudios de derecho.

Con el apoyo que le dio la Unidad de Tierras recibió algunas cosas para cultivar: herramientas, cerca eléctrica y panel solar. Lo que saca lo vende a orillas de la carretera por un precio muy económico y, cuando puede, le envía entre $30.000 y $50.000 a su hijo. “Ahora puedo dormir. Antes me daba miedo por lo que les pudiera pasar a mis hijos, pero las cosas han cambiado”, cuenta Quintana, recordando momentos en los que los habitantes de Macayepo y Lázaro se habían impuesto fronteras imaginarias. A los primeros los señalaban de ser paramilitares y a los segundos de guerrilleros. Ahora todos conviven en la reconciliación.

Tomado de El Espectador.com

 

La urgencia de la implementación
Comunidades del Pacífico insistieron en la necesidad de que se implementen los acuerdos de paz con las Farc.

Cristian Garavito

 

ONU dice que grupos posparamilitarismo están ocupando espacios de las Farc

Representantes de comunidades del Pacífico hicieron un llamado al Gobierno para que comience cuanto antes la implementación del acuerdo de paz suscrito con las Farc y se eviten situaciones que pongan en riesgo su seguridad.

Por Marcela Osorio Granados/@marcelaosorio24

Tras suscribir finalmente un nuevo acuerdo de paz que incluyera varias de las propuestas e inquietudes de los sectores de oposición, el Gobierno debe concentrar ahora sus esfuerzos en lograr su refrendación para dar inicio cuanto antes a la implementación de lo pactado en La Habana con las Farc. Y sobre el tema hay urgencia. No sólo porque el cese el fuego bilateral y definitivo es frágil —como lo han sostenido en múltiples ocasiones los plenipotenciarios del Gobierno y como quedó demostrado en parte con el incidente de este miércoles en el sur de Bolívar—, sino también porque en los territorios comienzan a verse los riesgos y las consecuencias de la falta de acción.

Así lo dejó claro ayer el representante de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, Todd Howland, quien aseguró que la principal preocupación del organismo es lo que está sucediendo en términos de seguridad en las zonas de las que han salido las Farc —por cuenta del cese de hostilidades y el preagrupamiento—, a donde están llegando diferentes organizaciones criminales que se disputan las economías ilícitas.

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“Estamos observando en terreno que hay muchos grupos criminales posparamilitarismo que están entrando de varias partes del país. Hay un problema real que existe hoy en día en razón de un incremento de violencia en diferentes regiones, por falta de implementar los acuerdos de manera integral. Las Farc están agrupándose y están dejando vacíos de poder sin que se hayan transformado las economías ilícitas. La no implementación de este acuerdo está generando costos reales para la gente que vive en estos territorios”, denunció Howland e insistió en que la ventana de oportunidades para transformar la realidad de las comunidades se está cerrando.

Durante una rueda de prensa que contó con la participación de representantes de diferentes comunidades del Pacífico, el representante de la ONU especificó además que su oficina ha identificado varias zonas específicas en las que este fenómeno se está dando con claridad, como en la zona que va desde Tumaco (Nariño) hasta Guapi (Cauca) y la que comprende el departamento de Chocó incluso hasta el Urabá y Tierralta (Córdoba). “Todas estas zonas tienen movimientos en razón de vacíos de poder. En varias partes donde las Farc tenían presencia, como en El Bagre o Remedios, ahora hay espacios de confusión sobre quién tiene el poder e influencia, y eso está generando factores de violencia. Estas áreas tienen una relación fuerte con economías ilícitas y ese es el problema de la falta de implementación de los acuerdos”, explicó.

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Para Leyner Palacios, representante del comité de víctimas de Bojayá, es evidente el estado de vulnerabilidad en el que se encuentra actualmente el proceso, por lo que se requieren decisiones urgentes. “Cada día que pasa es una amenaza. En Bojayá estamos expuestos a que se presenten situaciones como las del sur de Bolívar, e incluso otras mucho más graves, y eso es lo que queremos prevenir”, sostuvo.

Puede leer cómo el apoyo a la agricultura juega un papel muy importante en la recuperaciónd de Bojayá. 

El líder aseguró que las víctimas y comunidades de Chocó se sienten identificadas con el nuevo acuerdo alcanzado en La Habana e hizo un llamado a los sectores de oposición que votaron no en el plebiscito por la paz para que entiendan que, si bien esta paz no es perfecta, es la base para comenzar. “Somos conscientes de que no es un acuerdo perfecto. Nosotros mismos hicimos propuestas que quizá no fueron incluidas, pero esta es una negociación y no podemos pensar que nos van a satisfacer todo lo que queremos. Aquí tenemos la necesidad de superar el conflicto armado. Hay que entender el momento coyuntural y no se puede exponer a otra gente a que, por los caprichos y deseos de que nos incluyan cosas, tengan que vivir situaciones como las que ya hemos vivido”, resaltó.

En igual sentido se pronunció monseñor Juan Carlos Barreto, obispo de Quibdó, quien puso sobre la mesa la urgencia de que entren en vigencia los puntos acordados en La Habana entre los equipos de paz de Farc y Gobierno. “Creemos que la paz es posible, urgente y necesaria. Es mucho más humano y políticamente correcto que ese acuerdo sea implementado lo más pronto posible. Este territorio ha sido particularmente afectado tanto por el conflicto armado como por el conflicto social y la violencia urbana que se está viviendo en este momento. Hay que empezar a ver esta paz desde una perspectiva más amplia que requiere de la acción del Estado y la sociedad civil”, señaló el obispo.

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De ahí la importancia de que el proceso de construcción de paz surja desde los territorios y se nutra del trabajo entre lo local y lo nacional, como lo señaló Yuli Palacios, representante de la corporación Pacipaz. Para ella, la clave del éxito está en que se articulen todos los procesos con las comunidades, pues es claro que existe “un divorcio entre el liderazgo central con los procesos que se llevan a cabo en las comunidades. Por eso queremos pedirle al pueblo colombiano solidaridad con todas las comunidades que han sufrido los embates de la guerra para que todos nos podamos reconciliar realmente en este contexto de implementación de los acuerdos”.

Un llamado al que se unió Leyner Palacios, quien calificó de injusto que aquellos que no han vivido en carne propia los rigores de la guerra tomen decisiones trascendentales que afectan directamente a las poblaciones que por años han tenido que enfrentar las consecuencias del conflicto armado. Desde su punto de vista, el abandono y la discriminación histórica que ha vivido Chocó son tan patentes que se vieron reflejadas incluso en la misma jornada electoral del plebiscito por la paz.
“Nuestras víctimas decían que querían votar por el Sí, pero la gente no llegó a las urnas porque no había condiciones para acceder al derecho al voto. Nuestras comunidades no pudieron opinar porque en muchos casos los puestos de votación quedaban a tres días de camino. No es justo que una población que ve esto por televisión decida sobre una situación y una realidad que nosotros vivimos día a día. No podemos condenar a nuestros hijos a que sigan viviendo la guerra que nosotros padecimos”, concluyó Palacios.

Tomado de El Espectador.com

 

Las lecciones que deja Trump

No puede ser que el rechazo a las élites en EE. UU. llevara a elegir a un magnate cuyo retrete es de oro; que el nuevo líder del obrero gringo sea un dueño de rascacielos que no paga impuestos; que el héroe del hombre común piensa recortar los programas de asistencia social y reducir los impuestos de los ricos; y que el presidente de la superpotencia mundial, con el mayor arsenal de armas nucleares, tenga la madurez de un mocoso que no tolera que le critiquen su peinado.

Por: Juan Carlos Botero

Por eso no entiendo que luego de ocho años de obstrucción y una conducta temeraria y antipatriótica, motivada por el racismo y el odio a Obama, el Partido Republicano no sólo no fuera castigado sino que fuera premiado en las urnas. Y tampoco entiendo que muchas mujeres y muchos latinos hayan votado por Trump. O sea, ¿qué tenía que hacer, o que más tenía que hacer ese tipo para que no votaran por él? Los insultó, amenazó, redujo a un estereotipo peligroso y vulgar, ¿y lo apoyaron? Como dijo Kundera: parecen aliados de sus propios sepultureros.

Aun así, lo peor es saber que la democracia, que siempre he considerado un valor absoluto, ha sufrido un guantazo de desprestigio, porque en menos de seis meses tres votaciones libres han atentado en contra de la cordura y el bien común, como pasó en Inglaterra con Brexit, en Colombia con el No, y en EE. UU. con Trump.

No obstante, quizás lo único bueno de estas elecciones es que refrescan cosas esenciales, las que no se deben olvidar. Por ejemplo: que jamás debemos aceptar lo inaceptable. Que las mujeres no son objetos y las charlas vulgares de camerinos no son bromas inofensivas, sino que toleran el abuso e incitan el atropello sexual. Que votar importa, y no votar es permitir que otros (con otros valores y principios) decidan tu vida. Que una cosa es tener el poder y otra es tener la razón. Que la verdad es frágil, y que los hechos verificables existen y no se pueden cambiar por opiniones disfrazadas de certezas. Que el racismo exige una lucha sin fin, que a lo mejor nunca se podrá erradicar, pero si no se combate siempre se podrá multiplicar. Que no es lo mismo una mujer culpable de un delito que una a la que le arrojan barro a manotadas para luego decir: Miren cómo es de sucia. Que si la madre de una niña vota por un misógino está validando la conducta en contra de la cual ella ha luchado toda su vida. Que el padre de un gay no puede apoyar a un homofóbico ni a su vicepresidente que desea penalizar el homosexualismo. Que taparse los ojos frente al calentamiento global no constituye una estrategia política. Que la democracia, en este tiempo de redes sociales sin control, es vulnerable a la mentira y a la demagogia más barata. Que una cosa es ganar una contienda electoral, y otra muy distinta es ganar un debate ético. Que defender la justicia enaltece y aplaudir el infundio envilece. Que es mejor demostrar grandeza en la derrota que pequeñez en la victoria. Que el futuro se puede construir con verdades o con engaños, y por eso es tan delicado. Que nada duele tanto como perder teniendo la razón, y nada es menos digno que ganar usando la infamia. Que con la democracia no se juega, porque los efectos pueden ser ruinosos. Que los triunfos, si no son morales no son triunfos. Y que los países, al igual que las personas, también se pueden suicidar.

Tomado de El Espectador.com

La hora de la verdad

Llegó la hora de las definiciones. Ya vamos a saber si es cierto que los líderes del No quieren la paz.

Por: Patricia Lara Salive

Ya el presidente y los negociadores escucharon al país (los voceros del No que se opusieron a algunos puntos del acuerdo pero que insistieron en que sí quieren la paz, los voceros del Sí, los empresarios, las víctimas, los militares, los pastores y hasta el exprocurador Ordóñez, que no se sabe en representación de quién actúa como jefe de fuerza política).

Ya las Farc entendieron que el país quería modificaciones, y mostraron realismo político y deseos de paz al aceptar hacer cambios en 56 de los 57 temas que les llevó el Gobierno.

Ya, en el nuevo acuerdo, se les dio gusto a todos, en casi todo: a las víctimas se les complació en que las Farc entreguen sus bienes para utilizarlos en su reparación; a los militares se les reiteró que si contribuyen con verdad y reparación pueden obtener beneficios incluyendo la excarcelación o la terminación de sus procesos por hechos relacionados con el conflicto; al expresidente Pastrana se le aceptó que los jueces de la justicia transicional sean nacionales, que los responsables de delitos graves sean recluidos en zonas con restricción de la movilidad, que el tiempo de duración de la Jurisdicción Especial para la Paz tenga un límite, que los de las Farc (y los demás) que se presenten ante la Justicia Especial de Paz entreguen toda la información relacionada con el narcotráfico, que en lo pactado haya protección plena de la propiedad privada y que el acuerdo no se incorpore al bloque de constitucionalidad; a la conservadora Martha Lucía Ramírez se le complació en que la financiación del partido que surja de las Farc sea igual a la de los demás partidos y en que la guerrilla no participe en la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad; a Ordóñez y a los pastores se les aceptó eliminar cualquier ambigüedad sobre ideología de género; y al senador Uribe se le dio gusto en muchas cosas: en reiterar que el gobierno puede fumigar los cultivos ilícitos, en tranquilizar a los empresarios con que no se va a afectar la agroindustria en el campo, ni se va a expropiar a los latifundistas por la vía del Fondo de Tierras, ni mediante el catastro se les van a aumentar los avalúos y, por consiguiente, los impuestos, ni van a ser víctimas de cacería de brujas por haberles pagado extorsiones a paramilitares o guerrilleros.

¡Si quieren más que les piquen caña!, como dice el dicho.

En lo que sí no se les pudo dar gusto fue en lo obvio, es decir, en lograr lo que ellos no consiguieron en sus 12 años de gobierno (cuatro de Pastrana y ocho de Uribe): que las Farc se rindieran, pagaran la pena tras las rejas y sus jefes desistieran de hacer política e ir al Congreso.

Los expresidentes no pueden poner como requisito que se incluya en el nuevo acuerdo lo que ellos no lograron hacer.

Por fortuna, se sabe que el diálogo de tres horas entre Santos y Uribe fluyó bien y que “fue el de dos hombres de Estado empeñados en buscar el bien del país. Uribe es otro ante la galería”, dijeron las fuentes. De hecho, el senador se comprometió a estudiar el texto y antes de ayer dijo que acepta participar en una sesión especial del Senado para que los miembros del Congreso expongan sus observaciones y se llegue a un consenso nacional sobre el acuerdo.

Es que Uribe sabe que quedar de culpable de que se desbarate la paz es un estigma con el que ningún político sensato quisiera acabar sus días.

www.patricialarasalive.com

@patricialarasa

Tomado de El Espectador.com

¿Después de la paz qué?

Una vez superados los escollos que trajo el proceso de paz, todo aquello que implica un rotundo cambio tendrá más opciones que lo ofrecido por nuestro desvencijado mundo político.

¿Humo blanco? No he tenido el valor de leer las 310 páginas del nuevo acuerdo anunciado por el Gobierno. Creo, sí, que algunos sustanciales ajustes propuestos por los voceros del No, e incluso por representantes de las altas cortes y partidarios del Sí, fueron tomados en cuenta. Con la esperanza de alcanzar un real acuerdo nacional, Uribe espera que sus últimas observaciones sean atendidas. Y tiene razón, pues tras el resultado del plebiscito no bastaba un consenso Gobierno-Farc, anunciado con bombos y platillos en busca de un engañoso efecto internacional, sino un nuevo acuerdo aceptado por los vencedores del No. Desde luego, como bien lo ha dicho Jaime Castro, este no es un nuevo acuerdo, sino un nuevo texto del viejo acuerdo al que se le hicieron ajustes y precisiones sin cambios de fondo. Pero lo cierto es que no hay espacio político ni temporal para una nueva y larga negociación. Queda, además, por resolver cómo se va a refrendar y a implementar el nuevo acuerdo.

Doblada esta página, creo que lo que corresponde es mirar hacia adelante, hacia el incierto futuro que nos depara el 2017. Si tomáramos en cuenta los alentadores anuncios de Santos que día tras día recoge la prensa y la abrumadora propaganda oficial, estaríamos pisando el umbral de un nuevo país, el país de las maravillas. Todo es positivo. Baja el desempleo; la educación avanza al ritmo de Ser Pilo Paga; la salud supera, al fin, los tropiezos de siempre; miles de viviendas se construyen para los más pobres; la infraestructura en marcha está cambiando la fisonomía del país y la economía se repone de los bajones que ha sufrido. ¿Qué más se podría pedir?

Sin embargo, la mayoría de los colombianos no piensa lo mismo. La inseguridad hace cotidiana presencia en campos y ciudades. Pobreza y desempleo saltan a la luz en cada esquina. La temida reforma tributaria ensombrece aún más el panorama; el probable aumento del IVA al 19 % afectará, dígase lo que se diga, la canasta familiar. Y si a lo anterior le sumamos el desprestigio de la clase política y los escándalos de corrupción que se asocian a ella, es muy probable que en las elecciones del 2018 se produzca en los electores rasos un fenómeno similar al sucedido con el brexit en el Reino Unido, el plebiscito en Colombia y las elecciones presidenciales en los Estados Unidos.

Vamos a asistir a un carnaval de candidatos donde los nombres van a tener más protagonismo que los partidos. Los conservadores quizá serán llamados por sus directivas a votar por el candidato de la Unidad Nacional, que seguramente será Humberto de la Calle. Pero el conservador del común podrá sentirse más atraído por Marta Lucía Ramírez o por el exprocurador Alejandro Ordóñez. Mientras tanto, el Partido Liberal, bajo la influencia de Serpa y Samper, bien puede inclinarse por un candidato propio. Por supuesto, Germán Vargas Lleras será el rival con más opciones para llegar a la segunda vuelta. La izquierda, de su lado, se verá abocada a mover sus militantes a favor de Jorge Robledo o de Gustavo Petro. Es decir, entre un ideólogo ortodoxo y un populista fiel seguidor del chavismo.

Entre tanto, no se sabe quién será el aspirante del Centro Democrático ni cuál será la fórmula para elegirlo. Óscar Iván Zuluaga, Carlos Holmes Trujillo e Iván Duque Márquez se disputan el beneplácito de su partido. Finalmente, Sergio Fajardo aparece en este abanico electoral como el perfecto candidato independiente.

Por el momento, hasta las encuestas son inciertas. Una secreta aspiración de cambio, ajena a la clase política tradicional, es el motor que sigilosamente empuja al elector a jugar una inesperada carta.

Por eso, una vez superados los escollos que trajo el proceso de paz, todo aquello que implica un rotundo cambio tendrá finalmente más opciones que lo ofrecido por nuestro desvencijado mundo político.

Plinio Apuleyo Mendoza

Columnista de El tempo. 

El clima,esta noche en Colombia,según el Ideam

“Exámenes médicos dejan ver un mejor escenario posible”: Santos
El presidente Santos el martes cuando se refirió a los exámenes a los que fue sometido en Estados Unidos este jueves. Presidencia

El mandatario finalizó este jueves los exámenes a los que se estaba sometiendo en Estados Unidos.

El mandatario colombiano Juan Manuel Santos finalizó durante la tarde de este jueves los exámenes médicos que se estaba realizando en la ciudad de Washington en Estados Unidos.

El fin de los análisis era detectar cualquier indicio de cáncer en el presidente.

Examenes terminados. Resultados finales semana entrante. Gracias a Dios dejan ver mejor escenario posible.

Según publicó Santos, los resultados saldrán la próxima semana.

“Gracias a Dios dejan ver mejor escenario posible”, escribió el presidente en su cuenta de Twitter.

 

El mandatario se realizó una prueba de PSA, que sirve para medir los niveles de la proteína  antígeno prostático específico, producida por la glándula prostática.

Le podría interesar: ¿Qué es el PSA, indicador de posible regreso de cáncer en el presidente Santos?

Cabe recordar que Juan Manuel Santos fue sometido en el 2012 a una intervención en la que se le extirpó un tumor de la próstata.

Tomado de El Heraldo,de Barranquilla. 

Qué podría significar la presidencia de Donald Trump para Cuba
Una casa en La Habana. Durante la campaña presidencial, Donald Trump anunció que daría marcha atrás a algunas iniciativas que promueven los negocios con la isla. CreditRamon Espinosa/Associated Press
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MIAMI, Florida – Para Chad Olin parecía la oportunidad perfecta: las décadas de animadversión entre Estados Unidos y Cuba se desmoronaban, abriendo por fin una frontera en el Caribe para los estadounidenses con dólares.

Olin, un graduado de la Escuela de Negocios de Harvard, de 30 años, dejó su carrera en patrimonios privados para incursionar en el mercado turístico de Cuba. Inició una empresa que organiza viajes legales a Cuba para millennials: un negocio que se hizo posible porque el presidente Obama amplió los viajes a la isla y extendió las licencias para que los estadounidenses hagan negocios en la isla.

¿Y ahora qué?, se pregunta Olin.

Durante su campaña, el presidente electo Donald Trump prometió dar marcha atrás a la distensión hacia Cuba, arremetiendo contra las “concesiones” hechas a su gobierno comunista y sugiriendo la posibilidad de que una de las iniciativas de política exterior más distintivas de Obama pudiera derrumbarse.

“Sigo tratando de pensar en lo que esto significa para el negocio al que le dediqué los dos últimos años, construyendo algo que sería perfecto en un mercado abierto”, dijo Olin desde Miami. “Si regresamos a como eran las cosas antes, no sé si seguiré teniendo un negocio. Es un gran golpe”.

Cientos de miles de personas han aprovechado la decisión de Obama de ampliar los permisos para los viajes y disminuir otras restricciones relativas a Cuba. Ahora hay más estadounidenses y migrantes cubanos que viajan a la isla, con lo que han ayudado a que la cantidad de visitantes extranjeros en el país haya aumentado casi un 12 por ciento en la primera mitad de 2016, según informó este mes el gobierno cubano.

Más cubanos reciben paquetes y transferencias de dinero. Hay un Four Points Sheraton en La Habana, y tres hoteles más están por abrir. Airbnb renta habitaciones privadas, y American Airlines está por comenzar sus vuelos directos a la Habana.

Para ellos (como para Olin) la pregunta crucial sigue siendo si Trump, un magnate de los bienes raíces y desarrollador hotelero, será en el fondo un hombre de negocios que permitirá que las medidas de Obama sigan adelante, o si mantendrá la promesa que hizo a un importante sector de votantes del sur de Florida y dé marcha atrás a todo, desde las relaciones diplomáticas hasta el ron y los puros ilimitados que Obama recientemente permitió que lleguen desde Cuba.

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El malecón de La Habana la semana pasada. Las relaciones entre Estados Unidos y Cuba han sido cambiantes durante décadas, pues suelen depender de quién está en la Casa Blanca.CreditRamon Espinosa/Associated Press

Una movida así por parte de Trump subrayaría la naturaleza cambiante de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, que durante mucho tiempo han dependido de quien ocupe la Oficina Oval.

“Muchos grupos importantes de inversionistas europeos me han pedido que lleve la ‘Magia de Trump’ a Cuba”, escribió Trump en un editorial de 1999 en el Miami Herald, que apoyaba el embargo comercial contra Cuba.

“Mi inversión en Cuba subsidiaría directamente la opresión del pueblo cubano”, dijo entonces. “Pero primero pierdo esos millones que el respeto por mí mismo”.

En otras ocasiones Trump ha sido un tanto impreciso frente al asunto. Durante las primarias, una y otra vez dijo que pensaba que retomar las relaciones diplomáticas con Cuba estaba “bien”, pero añadió que los estadounidenses y los cubanos no obtenían lo suficiente a cambio de ello.

Sin embargo, conforme las elecciones se acercaban, Trump fue siendo menos equívoco.

En marzo, dijo a CNN que “probablemente” mantendría las relaciones diplomáticas con Cuba, pero que querría “mucho mejores tratos de los que hemos hecho”.

Luego, este otoño, Trump adoptó una postura más dura.

“Todas las concesiones que Barack Obama ha otorgado al régimen de Castro fueron por orden ejecutiva, lo que significa que el próximo presidente puede revertirlas, y es lo que haré a menos que el régimen de Castro satisfaga nuestras demandas”, afirmó Trump en un evento de campaña en Miami. “No mis demandas. Nuestras demandas”.

Su vicepresidente electo, el gobernador de Indiana, Mike Pence, reafirmó esa aseveración en Twitter, al señalar que Trump repelería las órdenes ejecutivas de Obama a menos que haya “verdadera libertad política y religiosa”.

Cuando un reportero le preguntó si sus comentarios significaban que rompería las relaciones diplomáticas con Cuba, Trump sugirió que podría hacerlo, y señaló que quizá no nombraría a un embajador para Cuba.

“El acuerdo que firmó el presidente Obama es muy débil”, afirmó. “No obtenemos nada. Los cubanos no obtienen nada, y yo haría lo que fuera necesario para conseguir un buen acuerdo”.

Robert L. Muse, un abogado de Washington especializado en la ley de comercio entre Estados Unidos y Cuba, dijo que Trump parecía creer que Washington únicamente ha establecido un solo trato con Cuba, cuando en realidad hay varios acuerdos, que van desde el correo directo hasta el manejo de derrames petroleros.

Trump podría tomarlos uno a uno, eliminar los que le disgusten y mantener los otros. Sin embargo, Muse dijo que el gobierno estadounidense podría ser responsable en términos financieros si afectara a las empresas que han actuado de buena fe.

Rescindir el mayor margen para viajar que Obama introdujo sería lo más trágico que Trump podría hacer, pero no creo que lo haga”, sostuvo Muse. “Ha invertido toda una vida en viajes, centros turísticos y servicios hoteleros, y se trata de una empresa mundial. Parece ir contra el sentido común.”

Algunos cubanos ven el discurso de derrota de Hillary Clinton desde una tienda de cigarros en el barrio Little Havana de Miami. CreditLynne Sladky/Associated Press

¿Qué más podría hacer Trump?

Cambiar las reglas para los viajes: El turismo hacia Cuba todavía es ilegal como parte del embargo, pero el presidente Bill Clinton fue el primero en permitir excursiones de “persona a persona” que dejaban a los viajeros ir si, por ejemplo, tenían propósitos educativos o religiosos. El presidente George W. Bush las echó por tierra, y luego Obama las amplió de manera que los viajeros ya no necesitaban un permiso especial primero.

Con Bush, un cubano-estadounidense podía visitar Cuba una vez cada tres años. Ahora es ilimitado.

Terminar con los viajes comerciales programados regularmente a Cuba: Cuba y Estados Unidos acordaron permitir hasta 90 viajes redondos diarios entre los dos países, según el Departamento de Transporte.

Southwest lanzó su servicio apenas el domingo pasado, y American Airlines tiene programado iniciar sus vuelos a La Habana el 28 de noviembre.

“Vamos muy adelantados y no podemos especular sobre posibles cambios a futuro”, dijo Martha Pantin, una vocera de American Airlines.

Echar por tierra la política “Pies mojados, pies secos”: Cuando decenas de miles de cubanos se lanzaron al mar en 1994, Clinton cambió la política para que cualquiera que fuera atrapado en el océano fuera regresado. Sin embargo, decenas de miles de cubanos siguen emigrando de todas formas a Estados Unidos, pues si tocan tierra ya pueden quedarse. Muchos han recorrido a pie el continente americano para alcanzar la frontera sur.

“Una de las maneras principales en que Trump considera la política exterior es a través del asunto de la migración”, dijo Phil Peters, experto en Cuba que ahora trabaja como consultor para empresas estadounidenses que buscan hacer negocios allá. “Cuando se trate de Cuba, verá un país de donde viene mucha migración ilegal hacia Estados Unidos”.

Cambiar las reglas que permiten a empresas como Airbnb y Marriott trabajar en Cuba: Puede hacerlo. Sin embargo, si es un desarrollador de corazón, ¿lo hará?

John. S. Kavulich, presidente del Consejo Económico y Comercial de EE. UU.–Cuba, afirmó que en la década de los noventa la empresa de Trump lo consultó acerca de la logística de los negocios en Cuba. Newsweek informó que los hoteles y casinos de Trump pagaron por lo menos 68.000 dólares a una empresa de consultoría a finales de 1998 para que fuera a Cuba en nombre de la compañía, violando el embargo comercial de Estados Unidos.

Mauricio Claver-Carone, fundador de un comité de acción política que apoya el embargo comercial, afirmó que Trump parecía realmente conmovido por algunas historias de violaciones a los derechos humanos en Cuba, por lo que “hizo un compromiso” con la comunidad cubano-estadounidense que quizá cumpla.

Lo más seguro es que rechace las órdenes “en franca falta de coincidencia con las leyes de EE. UU.”, señaló Claver-Caron, como permitir inversiones con empresas que dirige el ejército cubano (la industria hotelera cubana es operada por las fuerzas armadas).

Trump también podría anular una iniciativa realizada a finales de octubre que amplió el grupo de autoridades cubanas que pueden recibir efectivo y realizar transacciones bancarias con estadounidenses, dijo.

El equipo de transición de Trump y sus voceros de campaña no respondieron a una solicitud de comentarios.

Sin embargo, en Cuba muchas personas entrevistadas dijeron que los cambios que hizo Obama no habían llegado aún a las personas. Algunas sintieron que la expansión de oportunidades comerciales había ayudado al gobierno de Castro, no al pueblo, por lo que en general estaban contentos con la idea de que Trump sea presidente.

Roberto Peñalber, de 34 años, dijo que muchos cubanos se sentían forzados a huir durante el gobierno de Obama, pues temían que rescindiera el trato preferencial de migración para los cubanos.

“Ahora ya no tenemos que preocuparnos por eso”, dijo. “Quizá Trump pueda hacer mejores tratos que Hillary. Ella es más comunista que él. Esa puede ser la razón por la que Estados Unidos votó por Trump”.

Tomado de The New York Times

 

ELN es el mayor obstáculo de su propia paz
Manifestación por la liberación de los secuestrados por el ELN en Cali, Colombia el 27 de mayo de 2016.

Mientras Colombia intenta salvar el Nuevo Acuerdo de Paz con las FARC, el proceso con el ELN no arranca, debido a que esta guerrilla es incapaz de controlar a sus milicias. Pero no todo está perdido.

El Gobierno de Colombia y el ELN iban a iniciar negociaciones el 27 de octubre en Quito, pero el proceso quedó en suspenso ante la negativa del ELN a liberar al excongresista Odín Sánchez Montes de Oca, quien se entregó voluntariamente a esta guerrilla hace ocho meses y medio en intercambio por su hermano secuestrado, gravemente enfermo.

El presidente Juan Manuel Santos dejó en claro que las negociaciones no empezarán hasta que Sánchez no sea liberado, como había sido prometido antes de anunciar la apertura de la mesa en Ecuador.

Su hermano, el exgobernador del departamento del Chocó, Patrocinio Sánchez, pidió este 16 de noviembre en la radio colombiana FM «no olvidar que su hermano está en cautiverio por tratar de salvarle la vida”. Según la familia Sánchez, «el Frente Resistencia Cimarrón del ELN está dilatando la liberación del excongresista porque desobedecen órdenes y directrices del comando central”.

¿Veintiún heridos contra un secuestrado?

He aquí una de las diferencias entre las guerrillas del ELN y las FARC. Mientras estas últimas tienen (aún) una estructura militar vertical que garantiza, y facilita el mando, desde la jefatura a los combatientes rasos, el ELN es una organización horizontal de células más o menos sueltas y casi autónomas.

Otro grave hecho enturbia los esfuerzos de paz. En la ciudad de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, hubo este 16 de noviembre un atentado con explosivos contra un camión de la Policía Nacional, que dejó heridos a 17 agentes y 4 civiles.

Según el ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, «el ELN es el probable autor del atentado”. Villegas aduce que el atentado fue cometido por una facción del ELN, «como respuesta a la dura acción de las autoridades contra las mafias del contrabando, del cual se lucra esta guerrilla en la frontera con Venezuela”.

La línea roja entre Gobierno y ELN

El Gobierno colombiano sabe muy bien que sobre los procesos de paz siempre pende una sarta de riesgos: provocaciones, zancadillas, intromisiones e incumplimientos. Pero no toda amenaza puede tumbar el cometido de hacer la paz. La retención de Odín Sánchez es la línea roja en este caso. «Una vez sea liberado empezaremos a negociar”, ha advertido el presidente Santos.

Ahora se vislumbra una esperanza de que se suelte el nudo. Según el jefe de la delegación de paz con ELN, Juan Camilo Restrepo, en Caracol Colombia, «una comisión humanitaria, compuesta por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), prelados y guerrilleros del ELN, está lista para recibir a Odín Sánchez”.

La Iglesia Católica conformó una Comisión, dirigida por Monseñor Darío de Jesús Monsalve e integrada por obispos donde tiene presencia el ELN y que estará mediando para agilizar el inicio de la fase pública de negociaciones, acompañando permanentemente los diálogos de paz.

Por parte de Bogotá la disposición se mantiene. El último trino de Juan Camilo Restrepo lo corrobora: «El Gobierno mantiene su mejor voluntad para que podamos instalar mesa de negociación con ELN en Quito a la mayor brevedad”.

¿Por qué el ELN podrá ahora liberar a Odín Sánchez y no lo hizo antes del 27 de octubre, cuando debía instalarse la mesa de diálogo? La lógica del ELN no compagina con ninguna explicación racional. Este proceso amenaza ser tan tortuoso que amenaza con acabar con los deseos de muchos de sellar por la vía del diálogo el conflicto colombiano. El ELN siempre ha sido el mayor obstáculo para sí mismo.

Tomado de DW,en español