20 Junio 2019.
“Es claro. Estamos pasando por una polarización del país, que nos divide, con determinaciones judiciales que desconciertan a los ciudadanos y con graves consecuencias que no se han medido”, dijo el ex presidente de la Corte Constitucional José Gregorio Hernández Galindo, en Encuentro realizado en la sede del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) con la junta directiva del gremio.
“La más reciente polarización comenzó con la realización de un plebiscito que le hizo mucho daño al país. El presidente Santos no estaba obligado a convocarlo y a pesar de hacer una reforma con Ley Estatutaria para bajar el umbral al 13 por ciento, con una pregunta muy controversial, el “No” ganó y luego se han visto las consecuencias”, argumentó el jurista.
“Se pensó que firmar un documento era encontrar la paz y no se analizaron otros temas como la existencia del ELN, las disidencias de las FARC y venderle al mundo el mensaje de que así se lograba la paz, lo que originó lo que está pasando en el país”, comentó Hernández, quien también es catedrático universitario y autor de varios libros de Derecho Constitucional, Ciencia Política y Derechos Humanos.“Voté por el NO en el plebiscito, porque no estaba de acuerdo con muchos de los puntos tratados en el documento de 297 páginas, que casi nadie se leyó, que debí leer como abogado y como profesor universitario. Considero que para un proceso de paz no había necesidad de cambiar el sistema de administración de justicia ni las normas que establece la Constitución”, afirmó.
Sobre la JEP
Al ser consultado sobre los deseos de algunas personas de terminar con la JEP, manifestó que en estos momentos es muy difícil acabarla mediante un referendo. “Se requiere reunir más de un millón 300 mil firmas, mandarlas avalar, luego presentar un proyecto de ley al Congreso, donde no se ve que haya una mayoría para acatar el proceso y puede terminar en una gaveta”, explicó.
“Lo que sucede es que con el caso de Santrich se dieron muchos tumbos jurídicos, tanto de la JEP como de la misma Corte Suprema de Justicia y eso desorienta a los colombianos. La JEP estuvo mal concebida y por lo tanto todo el sistema jurídico derivado de allí queda defectuoso y crea confusión”.
“Unos empleados de la JEP captados mientras recibían dineros para beneficiar a un exguerrillero, luego un documento que se envía a los Estados Unidos y que termina en Panamá. Después la respuesta de la Justicia de ese país diciendo que no tenía por qué enviar pruebas. Es un desgaste que deja mala impresión entre los ciudadanos”.
“El sistema de justicia transicional que el Congreso aprobó e introdujo en la Constitución como desarrollo del Acuerdo Final de Paz, firmado por Juan Manuel Santos con las Farc, creó un sistema laxo, confuso, burocratizado y mal organizado, que se ha prestado incluso para la corrupción. La selección de los magistrados la hicieron, entre otros personajes, un español y hasta una farmaceuta, fueron posesionados de afán, sin que existieran normas legales de procedimiento aplicables a los asuntos de su competencia y sin una ley estatutaria que organizara esa forma especial de administración de justicia”.
Al ser preguntado por el CPB sobre el choque de trenes de las Cortes, la propuesta de algunos acerca de eliminar varias de ellas y dejar una sola, reconoció que en estos momentos no gozan de buena imagen ante el país. “Allí hay excelentes magistrados, pero se han tomado determinaciones que se contradicen y le hacen daño a Colombia, como la aprobación del consumo de drogas en parques y avenidas, porque contradice el acto legislativo 2 del 2009, del artículo 49 de la Constitución que penaliza el consumo o la dosis mínima de estupefacientes y establece acciones preventivas y de rehabilitación para los drogadictos”.De otra parte, “nunca pensamos que llegaríamos a tener el llamado Cartel de la Toga”. Eso es una deshonra para las Cortes y los malabares que han hecho algunos magistrados para sostenerse en sus puestos violando las básicas normas de funcionamiento”.
“Se vio mal que a unos magistrados les quitaran las visas para ir los Estados Unidos y luego que ellos fueran a suplicar que se las dejaran. Eso no tiene explicación”, dijo el jurista.