Ante el llamado formulado desde el Concejo, la Secretaría de Ambiente respondió que no hay razones para emitir alertas, teniendo en cuenta que, en materia de contaminación, la ciudad está por debajo de los índices nacionales.
A pesar del llamado que desde el Concejo de Bogotá se hizo al Distrito para que declare la alerta por la calidad del aire en Bogotá –en particular, por el material particulado que concentran las localidades de Kennedy y Puente Aranda– este lunes la Secretaría Distrital de Ambiente respondió que no existen razones para emitir alertas por la contaminación atmosférica en la capital. (Lea: Piden al Distrito declarar alerta en Bogotá por contaminación del aire)
Según argumentó el jefe de esa cartera, Francisco Cruz, a diferencia de otras ciudades como Medellín, Bogotá no se encuentra totalmente rodeada de montañas, lo que permite que el material particulado –emitido tanto por vehículos como por fábricas– circule y no se concentre. Esta condición, explicó el funcionario, evita que agentes contaminantes como las partículas de tamaño menor a 10 micras (pm10) y de menos de 2,5, lleguen a niveles perjudiciales para la salud.
“En Bogotá no hay razones para declarar la alerta roja por contaminación del aire. Decretar esta medida en la capital implicaría una parálisis de la ciudad (…) Las mediciones no dan para emitir una alerta, estamos por debajo de los índices nacionales y estamos intensificando los controles”, expresó Cruz.
Previamente, con estudios en mano del Ideam y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el concejal Jairo Cardozo (Movimiento Mira) alertó por la calidad del aire en la capital del país, especialmente en Kennedy y Puente Aranda. Uno de tales informes determinó que la localidad de Kennedy es la zona más contaminada por material particulado en todo el país, y Medellín y Bogotá, las capitales más críticas, Ante ello, Cardozo elevó un llamado a la Administración Distrital para que se declaren las alertas a las que haya lugar, orientadas a adoptar medidas urgentes, destinar recursos y adoptar los correctivos necesarios para proteger la salud de los bogotanos.
“En 2015, se sobrepasaron los niveles de pm10 en las estaciones de Carvajal-Sevillana, de Kennedy, y de Puente Aranda, detectándose valores promedios anuales que sobrepasaron los recomendados por la OMS (20 Mg/m3). En Bogotá, se presentaron momentos con concentraciones en la categoría ‘dañina a la salud para grupos sensibles’. Ante ello, ¿por qué no se ha declarado alerta naranja en la ciudad, por lo menos en estas localidades críticas?”, reclamó el cabildante.
En respuesta, la Secretaría de Ambiente indicó que, aunque las estaciones de monitoreo de Kennedy, Carvajal-Sevillana y Puente Aranda han reportado episodios en los cuales “se aumentan transitoriamente las concentraciones de pm10 y pm2,5” (producto del alto flujo vehicular) estas partículas se dispersan rápidamente debido a las condiciones geográficas de Bogotá.
Agregó que –en coordinación con la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR)– intensificará los operativos de control a vehículos de carga, particulares y transporte intermunicipal, en puntos estratégicos, como las terminales de transporte y las cinco entradas y salidas de la capital.
“Las dos autoridades ambientales, en su compromiso con el medio ambiente, vienen realizando un monitoreo permanente de la calidad del aire, evaluando parámetros de alto interés para la ciudad como son las partículas de tamaño inferior a 10 microgramos (pm10), las de tamaño inferior a 2.5 microgramos (pm2,5) y el ozono troposférico (O3). Los resultados, arrojados en las últimas semanas, indican que estos contaminantes se mantienen por debajo de los límites permisibles”, señaló la Administración Distrital.
De acuerdo con el secretario de Ambiente, han intensificado los seguimientos para identificar empresas, fábricas e industrias que están generando emisiones atmosféricas, con el fin de garantizar una óptima calidad del aire para Bogotá. Ello permitió que el año pasado se ordenara el cierre de 14 empresas por contaminar el aire. En 2017 han sido sancionadas tres compañías y hay otras en la mira por afectar la salud de los capitalinos.
Cruz recordó que Bogotá cuenta con 13 estaciones y una unidad móvil que monitorean, las 24 horas, el material particulado emitido, tanto por las fuentes fijas como móviles, garantizando un control constante de los niveles de contaminación del aire. “Los reportes de los últimos días, arrojan valores de concentración diarios que no superan los niveles permitidos por la norma”, declaró la Administración.
No obstante, para evitar una eventual emergencia, el Distrito elevó un llamado para que las personas utilicen cada vez más la bicicleta como medio de transporte sostenible, se movilicen a pie, en transporte público o compartan recorridos en carro particular.
Tomado de:El Espectador.com