El reto del periodismo: desenmascarar las “fake news”

5 Agosto 2019.

Foto: Pixabay.

Tomado de: Elsalvador.com

El ejercicio del periodismo y sus variadas ramas es un baluarte de la libertad y la democracia en todo sistema político republicano y representativo, sobre todo por su valentía y fuerza moral para sobreponerse a las censuras y dictaduras.

Es, ante todo, una herramienta de comunicación esencial para informar e informarse de lo que sucede, profundizar en la necesidad de mayor investigación y formar criterios en la opinión pública.
La reciente celebración del Día del Periodista salvadoreño, que se realiza desde hace 50 años por decreto de la Asamblea Legislativa cada 31 de julio, es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la libertad de expresión y prensa en nuestro país.

Raúl del Pozo, periodista y escritor español, expresa que el periodismo “se quema enseguida, no vale más que para envolver el bocadillo de mañana”.

“Del periodismo no vale lo que has escrito, sino lo que vas a escribir”, remarca, para mostrar lo cambiante y ágil que la marcha de los acontecimientos y la versatilidad que deben tener los informadores para servir siempre los contenidos más actuales y verificados.

Los que los comunicadores escribimos para ustedes, amables audiencias, siempre lleva el ánimo de presentar lo novedoso, pero, sobre todo, que pueda ser de interés y utilidad públicos.

Pero todo esto puede sonar lírico si no tomamos en cuenta que los periodistas se convierten en la noticia en países como Nicaragua, donde han perecido varios, o muchos han tenido que salir exiliados desde el incremento de la represión en abril de 2018. Medios de comunicación han tenido que cerrar sus ediciones por la presión que ejercer el régimen, amenazas y encarcelamientos.

Necesitamos más de un periodismo a profundidad, irreverente, informativo y excepcional que en nuestros países latinoamericanos es aún incipiente, pero muy necesario y saludable. La responsabilidad, el criticar, argumentar con hechos reales siempre es fundamental.

Hay una nuevas formas de hacer periodismo con las tecnologías entrantes, que no pueden estar divorciadas de la imperiosa labor de informar, pero con responsabilidad y verdad.

Los medios de comunicación serán siempre herramientas necesarias para toda la sociedad, para la historia sociopolítica de este país, defendiendo siempre la democracia y libertad. El reto es vencer el anti-periodismo de la fake news y sus difusores, sobre todo, que la colectividad aprenda a ver la diferencia para que sepa rechazar esa clase de distractores y sirvientes de la oscuridad y la confusión.

Para conocer más sobre la historia del periodismo salvadoreño podemos visitar las hemerotecas en la Biblioteca Nacional o en otros centros de documentación y podremos darnos cuenta de la trayectoria, los sacrificios, las vidas segadas y la relevancia que los medios escritos han tenido para la ciudadanía en momentos cruciales.
Esta una ocasión propicia para felicitar a nuestros amigos periodistas y animarlos a que sigan adelante.