Por: Martha Díaz*
Se habla de la violencia contra la mujer, cuando el término es utilizado para referirse a cualquier tipo de maltrato físico, psicológico o verbal en contra de ellas, pero también hace referencia a temas como la discriminación y el menosprecio, llegando hasta su punto máximo, cuando se observa la violencia física.
El mundo también se enfrenta al tráfico de mujeres que se presenta en varios países y hoy las que sufren diferentes tipos de violencia, terminan afectadas por cantidad de problemas de salud y es cuando disminuye significativamente su capacidad de participar en la vida pública.
Colombia no se queda atrás
En Colombia la violencia contra la mujer se ha incrementado durante los últimos años, resultando en un mayor número de denuncias y asimismo esta situación termina en un incremento en la impunidad de crímenes relacionados con ellas.
El Centro de Referencia Nacional sobre Violencia señaló que entre Enero y Febrero de 2015, 126 mujeres han sido víctimas de homicidio y 2.631 acudieron al Instituto de Medicina Legal, para ser valoradas por un presunto delito sexual.
Este año, según cifras del Instituto Colombiano de Medicina Legal, se registran cada día, en promedio, 117 casos de violencia de pareja contra la mujer. Hasta agosto pasado se habían registrado más de 29.000 casos en el país. En el 2015 el promedio fue de 112 por día, lo que significa que los casos han venido aumentando.
La Defensoría del Pueblo advirtió recientemente que las mujeres siguen siendo víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado. Según este organismo humanitario, las agresiones contra la población femenina en este contexto persisten: hay 12.740 mujeres víctimas de este flagelo (560 niñas y adolescentes), señala el último reporte del Registro Único Nacional de Víctimas.
Según la Fiscalía General de la Nación, ocho de cada diez mujeres se niegan a denunciar por miedo. Se reciben 14 denuncias cada hora y la violencia familiar se incrementó en un 20.4%. Este año se han recibido 99.805 denuncias por violencia familiar. Cada hora se reciben 14 denuncias
Todavía es elevado el número de mujeres que no se atreven a denunciar a su pareja, porque tienen miedo de perder a la persona que lleva el sustento económico a la casa.
Pero existen otros tipos de violencia que en muchos casos son invisibles o rutinarios y que tienen relación directa con la atención que se brinda a las mujeres en los centros hospitalarios.
La Violencia Obstétrica: Otra violación de los derechos humanos
Muchas son las mujeres a las que no se les permite decidir sobre sus cuerpos durante el trabajo de parto, parto y postparto, y se sienten vulneradas por la atención brindada por el personal de salud y las instituciones hospitalarias, señaló la Dra. Ivonne Díaz, Presidente de la Federación Colombiana de Ginecología y Obstetricia, FECOLSOG.
Esta clase de violencia se expresa en el trato deshumanizado hacia la mujer embarazada, porque en los hospitales se ven múltiples manifestaciones que resultan amenazantes en el contexto de la atención de la salud sexual, embarazo, parto y post parto.
En el Día Internacional de la Violencia contra la Mujer, la Presidente de FECOLSOG señala que los servicios de salud, deben brindar una atención de calidad, respetuosa y atenta a los derechos humanos y esto implica eliminar los malos tratos propiciados en algunos casos de manera sistemática hacia las mujeres que hacen uso de los servicios.
Por un parto más humanizado
Señaló la Dra. Ivonne, que en Colombia se debe garantizar el derecho de las mujeres a contar con toda la información relacionada con sus tratamientos, así como el derecho a recibir por parte del personal de salud el mejor trato posible, teniendo en cuenta las limitaciones de los servicios de salud sexual y reproductiva, garantizando la igualdad del acceso y la calidad de la atención, independientemente de la procedencia socioeconómica o cultural de la paciente.
El Gobierno deben garantizar estos derechos a través de políticas y programas para mejorar la atención en salud de las mujeres, incorporando la perspectiva de género, los derechos humanos y la atención culturalmente adecuada antes, durante y después del parto, a todas las políticas públicas y programas que afecten a la salud de las mujeres en el país, dijo la Dra. Ivonne Díaz.
Muchas son las mujeres a las que no se les permite decidir sobre sus cuerpos durante el trabajo de parto, parto y postparto, y se sienten vulneradas por la atención brindada por el personal de salud y las instituciones hospitalarias.
En esta fecha especial, FECOLSOG aboga por un trato más humanizado del parto en las mujeres colombianas, para que acudan a los servicios de salud con la tranquilidad de que van a recibir una atención humana por parte de todo el personal médico.
De igual manera FECOLSOG trabajará intensamente en el acompañamiento, asesoría y creación de lineamientos que sean adoptados por las diferentes instituciones hospitalarias del país, para garantizar una atención más humanizada del parto.
El Comité de Medicina Materno Fetal de FECOLSOG ha iniciado una intensa campaña orientada a disminuir el número de cesáreas en las pacientes colombianas, permitiendo que sea la paciente quien decida sobre el futuro de su bebé.
De igual manera la Presidenta de FECOLSOG anuncia que se iniciará un proceso de entrenamiento en el territorio nacional en métodos de planificación de larga duración LARCS, para fortalecer los programas de educación a la comunidad y se mantendrá la política de disminución de la mortalidad, a través de talleres de emergencia obstétrica, orientados a salvar vidas.
FECOLSOG mediante conferencias, talleres, medios de comunicación y ayudas visuales, desarrollará una intensa campaña en todo el país contra la violencia obstétrica que se presenta en la mujer, y que afecta su calidad de vida.
Martha Díaz, socia del CPB