¿Cuándo se fundó Bogotá?

6 agosto 2020 –

Por: Secretaría General – Alcaldía Mayor de Bogotá – 

La historia oficial dice que la fundación de la capital ocurrió el 6 de agosto de 1538, cuando Gonzalo Jiménez de Quesada instauró un campamento militar al que llamaron Nuestra Señora de la Esperanza, sitio que en la actualidad se conoce como el Chorro de Quevedo. El segundo momento fue la fundación jurídica que se dio el 27 de abril de 1539, cuando se cumplió con todos los requerimientos burocráticos exigidos por los mandos españoles para el reconocimiento de una ciudad.

La cierto es que el 6 de agosto de 1538 es la fecha oficial de la fundación de la ciudad porque fue  el día en que el reino de los muiscas fue ocupado en nombre del emperador Carlos V de España.

Después de someter a los nativos y tomar sus tesoros, Gonzalo Jiménez de Quesada decidió fundar la villa de Santafé de Bogotá. Para ello, dos de sus hombres escogieron a Thybzaquillo (Teusaquillo), sitio de recreo al que se retiraba el Zipa en invierno, cuando arreciaban las lluvias y el agua ocupaba parte de la sabana. El lugar tenía abundante agua de los riachuelos Vicachá (San Francisco) y San Agustín (conocida también como Manzanares) y además existía piedra, arena, leña y un clima sano.

Los españoles construyeron doce bohíos, que simbolizaban los doce apóstoles, y una Iglesia, que inauguraron el 6 de agosto de 1538, cuando los católicos celebraban la Transfiguración del Redentor.

La ceremonia fue relatada por el historiador colombiano Pedro M. Ibañez (1854 – 1919): “Quesada se apeó del caballo, arrancó algunas hierbas, dijo en alta voz que tornaba posesión formal de estas tierras para que fuesen dominio del emperador Carlos I, en cuyo nombre fundaba la villa de Santafé de Bogotá. Luego desenvainó la espada, dio con ella tres cuchilladas en el suelo, montó a caballo y retó a singular combate a cualquiera que contradijese el acto de la fundación de la nueva villa que protestó sostener hasta con su vida, y ordenó que se extendiese instrumento público ante el Escribano del ejército”.

Tiempo después se hizo el trazado de la ciudad como parte del proceso de fundación. Se decide entonces hacer el trazado de una manzana entre los ríos San Agustín y San Francisco y se trazó la ciudad en cuadrículas, en cuyo centro quedó la plaza mayor; luego se dispusieron las demás manzanas y se determinaron los solares que se entregaban a la gente principal.

Luis Horacio López Domínguez, antropólogo, miembro de la Academia de Historia de Bogotá y académico secretario de la Academia Colombiana de Historia, asegura que Jiménez de Quesada hizo una fundación sin los formalismos de ley que exigía el rey.  Pero, en 1539, cuando llegaron Sebastián de Belalcázar por el sur y Nicolás de Federmán por el oriente, realizaron el ritual formal.

El historiador Germán Mejía Pavony, uno de los más respetados historiadores del país, asegura que no tiene mucho sentido decir que la ciudad se fundó en el parque Santander porque ese sitio estaba fuera de la protección militar.  Es decir, señala, que hacia 1538, el campamento de Jiménez de Quesada sí estuvo en algún sitio de lo que hoy es el centro histórico, y por tradición se habla de una primera fundación en ese sector, pero a ciencia cierta hasta ahora no se sabe qué pasó el 6 de agosto de 1538 porque el acta de esa época se quemó en alguno de los incendios que acabaron con la documentación de la ciudad; uno en 1786 y otro en 1900.

Como si fuera poco, en el siglo XVIII, la fiesta de Bogotá se celebraba el 20 de julio, que era el día en el que el alcalde le rendía cuentas al Cabildo.

Lo que sí es cierto, sostiene Mejía, es que la fundación legal, el acto jurídico que le da vida a la fundación de lo que hoy se conoce como Bogotá, fue el 27 de abril de 1539, que es cuando se crea el Cabildo, firma que se hizo en algún sitio desconocido. Además, como para agregarle más picante al asunto, la ratificación de la fundación fue en 1541.

Pero sostiene que lo realmente importante no es fundar, sino el acto de poblar el territorio, es decir, de construir ciudad. Y eso fue lo que hicieron en últimas los españoles.