Foto: EFE
El presidente Juan Manuel Santos (c) durante su visita al campamento que recibirá a los guerrilleros de las Farc
El Presidente visitó el centro de Mesetas (Meta) y habló con miembros del secretariado de las Farc.
Por: POLÍTICA |
Los retrasos en el montaje y adecuación de las zonas veredales de transición y normalización que servirán de antesala para que los guerrilleros de las Farc pasen a la vida civil no deben cambiar el cronograma de dejación de armas, dijo el jueves el presidente Juan Manuel Santos, desde Mesetas (Meta), en donde operará uno de esos centros.
En el acuerdo de paz de La Habana, el Gobierno y las Farc convinieron un itinerario para la dejación de las armas que irá hasta junio de este año, pero que va de la mano con la fase de concentración de los excombatientes en las zonas veredales.
El punto de partida para iniciar estas acciones fue el llamado Día D, que fue el pasado primero de diciembre. A partir de ese momento comenzaron a correr los tiempos.
Como el montaje y adecuación de las 19 zonas veredales y de los 7 puntos de concentración han sufrido retrasos, desde las filas de las Farc se comenzaron a hacer observaciones sobre el riesgo de que también los tiempos para la dejación de las armas sufrieran cambios.
El jueves, el presidente Santos les salió al paso a esas versiones y dijo que luego de dialogar con miembros del secretariado de las Farc se acordó que “vamos a tratar de cumplir los cronogramas de dejación de armas”, pero también los compromisos con la logística para la concentración de los excombatientes.
Las Farc, según lo acordado, tendrán que haber entregado la totalidad de las armas para comienzos de mayo. La ONU tendrá luego un mes para tener a buen recaudo la totalidad de ellas.
Problemas por resolver
Al mismo tiempo que presentó un balance sobre el avance de la adecuación de los lugares donde los exguerrilleros estarán durante el proceso de dejación de armas, el presidente Santos también admitió que ha habido dificultades, pero se comprometió a poner todo su empeño para superarlas.
Dijo, por ejemplo, que para llegar a todos esos sitios hay que intervenir 346 kilometros en vías, pero que los ingenieros militares ya han habilitado 88 kilómetros.
Reveló que hallaron 77 hectáreas de cultivos ilícitos dentro de las zonas, pero que ya fueron destruidos en su totalidad.
El Presidente se comprometió a acelerar la entrega de todos los materiales para que los miembros de las Farc ayuden en la construcción de estos campamentos.
También informó sobre la ayuda que la tropa de las Farc está recibiendo en materia de alimentación y salud.
En la actualidad, el Gobierno suministra alimentación diaria a 5.900 integrantes de las Farc, en todo el país. A propósito, el Presidente dijo que el valor de la ración de alimento por cada guerrillero, cada día, es de 16.000 pesos, y no de 87.000 pesos, como dijeron algunos críticos.
Hasta ahora, 2.500 miembros de esta organización ya han sido afiliados al sistema subsidiado de salud y las autoridades están a la espera de la información de los restantes para su vinculación.
Santos habló desde la vereda La Guajira, en el municipio de Mesetas (Meta), la zona veredal que registra un mayor avance. De hecho, anunció la llegada de 650 miembros de las Farc a ese lugar en cuestión de días.
POLÍTICA