Todo un camino por recorrer

Empresarios, periodistas y líderes gremiales reconocieron, en emotivos mensajes, la gran labor adelantada por Luis Miguel de Bedout, presidente de EL COLOMBIANO, quien deja su cargo luego de 36 años de trabajo. Dedicar más tiempo a su familia y la educación, su nueva pasión, a través de la Fundación Julio C. Hernández, son dos de sus sueños.

“He tenido la fortuna de haber conocido a Luis Miguel por más de 40 años, ser su amigo, y verlo crecer profesionalmente con esa rectitud y disciplina que caracteriza a los grandes líderes, pero siempre manteniendo esa maravillosa calidez y humildad que solo tienen los grandes seres humanos”.

“Luis Miguel de Bedout es una institución en El Colombiano. A lo largo de estos años, con alegría e integridad, ha inspirado a su equipo de trabajo y a nuestra sociedad con su impronta de seriedad, señorío y con su visión empresarial. El Colombiano es columna vertebral en nuestra región y Luis Miguel uno de sus líderes más destacados y queridos. Hoy le expreso mi reconocimiento en este momento tan especial en su vida”.

“Luis Miguel aportó, por más de 36 años, a la consolidación de uno de los periódicos más importantes del país. Desde allí, potenció el rol de los gremios, la academia y los medios de comunicación, siempre buscado consolidar la libertad de prensa como motor de desarrollo de nuestras regiones. A él le deseo éxitos en sus futuros proyectos personales y profesionales, y que desde donde esté, siga sumando al fortalecimiento de nuestra democracia y a la construcción de la Colombia que todos queremos”

“Aplaudimos de pie a Luis Miguel por la visión empresarial con la que fortaleció el ejercicio del periodismo nacional durante dos décadas. Por fortuna, contaremos con más tiempo de su liderazgo y contribución en proyectos culturales y sociales clave para toda la región. Sentido reconocimiento y gratitud desde Argos”.

“Primero que todo me honro de su amistad. He tenido la suerte de conocer a Luis Miguel desde hace años en diferentes actividades. Es una persona excepcional, de carisma e inteligencia destacadas. De su acertada gestión como Presidente del grupo El Colombiano, dan fe los resultados de la empresa y su posición entre los medios del país. Su dirección durante el proceso de negociación entre los accionistas fue definitiva para su buen término , siempre con una actitud respetuosa y con propuestas en beneficio de las partes y de la empresa. Estoy segura de que el grupo de colaboradores de El Colombiano lamentará enormemente su retiro, dadas sus cualidades personales y profesionales.